Me desperté al día siguiente, sintiendo frío correr por toda mi espalda. Haber dormido desnuda había provocado eso. Me giré para observar a Eric, todavía seguía dormido, con una mano bajo su cabeza y otra sobre mi cintura.
Quité con cuidado su mano de mi cuerpo, y tomé la ropa para vestirme, que consistía en el uniforme de Osados traidores en Erudición que Max me había dado a mi pedido. Me vestí lentamente, sin tener noción de qué hora serían.
Me acerqué al baño que estaba al final del pasillo y dejé la puerta cerrada. Me sorprendí a ver a Tris allí, solo la saludé con un movimiento en mi cabeza y me dispuse a cepillarme los dientes.
—¿No vienes con Eric, no? —me dice, algo divertida. Me quedé boquiabierta, por lo que un poco de pasta de dientes cayó al suelo—. Oye en serio, está todo bien. Solo que... ya sabes, ruidos contra la pared donde Cuatro y yo dormíamos.
—Dios mío, lo siento tanto Tris —le digo, o al menos eso intento. Escupí la pasta de dientes mientras ella comenzaba a lavarse el rostro con abundante agua fría. Me sequé con una toalla con las puntas deshilachadas y me apoyé contra la pared.
—No importa —responde con una sonrisa—. Sabes... yo debo contarte algo. Si no se lo digo a nadie creo que voy a explotar.
Tris se aleja hacia la puerta de entrada, la abrió, movió su cabeza en dos direcciones y volvió a cerrarla.
—¿Qué sucede? —le pregunto, ya que me parecía sospechosa esa actitud.
—Bueno, anoche escuché una conversación entre Cuatro y Evelyn—dice. Noté que había cierta aversión entre ellas, desde que Evelyn se enteró que Tris era abnegada—. Quiere reclutar a Cuatro y sobre todo a Eric para su causa, bueno, quiere derribar el sistema de facciones. Quiere hacerlo destruyendo Erudición.
—Pero... no puede destruir Erudición. Mi padre está ahí —dije, desesperada. No me había dado cuenta (como una idiota) que derribar el sistema de facciones incluiría ir contra la facción que había terminado con la paz, la que tomaba todas las decisiones.
—Lo cierto es que de una u otra forma podremos sacar a tu padre. Ella dice que Cuatro puede ser la voz de todos los de Osadía y así unirlos con los abandonados. Además, dice que teniendo a Eric aquí, siendo un líder, también les da cierta ventaja.
—¿Entonces quiere utilizarlos para ganar aliados?
—Al parecer, sí —dice Tris, encogiéndose de hombros y peinando su corto cabello con los dedos —. Sé que no parece mucha información pero...-
—No, está bien. Gracias por decírmelo —le digo —Iré a despertar a Eric, creo que será mejor que nos vayamos ahora, ¿no? Muero por ver a Christina y a Will.
—Sí, sí... yo también —me responde. Le dedico una mueca y salgo. Tris se veía muy rara desde que nos reencontramos, sé que murieron sus dos padres y que su hermano se irá al otro refugio de los abandonados para reencontrarse con el resto de Abnegados que sobrevivieron al ataque, pero su actitud no era de pena. Era algo más, solo que no sabía bien qué era y estaba segura de que si se lo preguntaba, negaría todo.
Al pasar las horas, Eric, Cuatro, Tris y yo decidimos partir hacia la sede de Verdad para poder observar el panorama completo. La verdad es que me hubiera gustado quedarme en Erudición para poder mantener a mi padre a salvo si los abandonados atacaban, y también para poder recibir toda la información sobre lo que sucedía.
Sin embargo, me alegra haberme ido. Porque si me hubiera salido mal, hubiera quedado entre diez soldados traidores en Erudición, y me hubieran pedido que capture a mis amigos. No, eso no iba a pasar. Creo que el tren de los abandonados fue algo que realmente me salvó.
ESTÁS LEYENDO
Soldiers - Eric/Divergente
FanficLa vida de Mila Hamilton no era digna de ser contada hasta que supo su verdadera procedencia. Su vida tuvo otro significado cuando, en su prueba de aptitud, Matt Hemmings le comunica que ella es divergente. ¿Cómo haría para sobrevivir en un mundo do...