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Narra Luna.

-¿Vas a dejar que te bese o vas a seguir enojada?- Paulo se puso enfrente mío.

-Estoy haciendo cosas Paulo, déjame un rato, ¿dale?- Paulo llego hace un rato y desde entonces esta intentando sacarme el "enojo". Obviamente ya se me paso, pero quiero hacerlo sufrir un poco.

-Después terminas de hacer eso- me saco de las manos la ropa que tenia y me acorralo contra la pared. -Te extraño boluda, hace 4 dias que no me contestabas los mensajes, encima, te vengo a ver y no me dejas ni tocarte-

-Bueno-mire para cualquier lado menos su rostro.

-¿Bueno?, ¿Solo eso?- se paso las manos por la cabeza- Ya te pedí perdón Luna, te dije porque había tardado tanto. Ya no sé qué más hacer- Intente no sonreír.

-Esta bien, ahora déjame seguir limpiando- rodé mis ojos.

-Amor- enredo sus manos en mi cintura y me pego mas a el.- Perdón, ¿si?, ya entendí. No te vuelvo a mentir ni nada, pero no seas así, no puedo aguantar mucho tiempo estar así con vos.-

-Bueno ya esta- enrede mis brazos en su cuello. -Ya se me había pasado el enojo solo te quería molestar un ratito- el sonrió y se acerco a mis labios.

-Te quiero mucho amor- bajo sus manos a mi culo y me apretó contra el.- No sabes las ganas que me dieron de hacerte el amor cuando te vi con ese short- susurro para despues besarme y morderme el labio.

-Uuh que lastima- Levanto una ceja.-Como me mentiste elegí que tu castigo va a ser no tener sexo por un mes.- se empezó a reír.

-No me jodas-

-No te estoy jodiendo, es verdad.- me separe de el y continue con lo que estaba haciendo.

Se acosto en la cama y puso sus manos ataras de su cabeza mirándome.

Segui ordenando mi armario y podía sentir la mirada de paulo en mi.
Me agache para levantar una remera y cuando me fui a levantar Paulo se posicione atrás mío juntando mi trasero contra el.

Me reí y me trate separar de el pero me apretó fuerte contra el.

-Te dije que no Londra- Escuche su risa.

-No estoy haciendo nada.-Corrió mi pelo de mi hombro y empezó a dar suaves beso sobre este.

Con sus manos me apretaba mas a el mientras dejaba besos en mi cuello y hombros.
No iba a caer  en su juego, el único que iba a terminar mal era el.

Me apoye mas contra el y me empece a mover en círculos. Sentí su sonrisa en mi cuello.
Llevo una de sus manos a mis pechos y los apretó. Gemí cuando me apoyo contra la pared dejando mi culo parado contra su miembro.

-Como me gusta tenerte así- me mordió el cuello. Metió sus manos entre mis piernas separándolas.
Tenia que parar ahora porque sino después va hacer demasiado tarde.

Me gire rápido y lo aleje de mi.

-¿Que te dije Londra?- sonreí.

-No Luna, no me dejes así.- señalo su miembro.

-Lo siento, yo ya te había dicho.-me encogí de hombros.

-Que forra.- suspiro y se tiro en la cama otra vez. -¿Tu abuela?-

-En lo de la vecina.- fui hasta la cocina y puse el agua para hacerme un te.

Mía |Paulo Londra|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora