Estuvimos todo el tiempo callados, quería iniciar una conversación pero no sabía que tema hablar. Estaba super incomoda.
-Bueno... -suspiré-. ¿Cuantos años tienes Will?
-Ya sabes mi edad.
-Mi novio no lo sabe.
-20 años ¿y tú? -dijo con pocas ganas.
-¿Yo? -preguntó Zack.
-Si.
-21 -respondió.
Se quedaron los dos callados por un rato. Después de unas horas caminando por el parque, se hizo muy tarde. Ya nos teníamos que ir, me despedí de Zack y nos fuimos al campus.
P.O.V William
-Me lo he pasado muy bien con tu novio -sonreí.
-¿Ensrio? Si habéis estado todo el tiempo callados -dijo mientras abría la puerta con llaves.
Encendió las luces de la habitación, enseguida se quitó los zapatos y se tumbó en la cama.
-Que sueño tengo -bostezó.
-Tú no te duermes hasta las once. Aún son las nueve.
-Mañana tengo dos exámenes, tengo que madrugar -dijo-. Buenas noches.
-¿No te vas a cambiar?
-Si, en media hora me despiertas ... -dijo con los ojos cerrados.
Dos minutos después, escuché sus ronquidos, estaba completamente dormida. La dejé dormir tranquila, fui hacia el baño y empecé a llenar la bañera con agua fría. Tardaba demasiado en llenarse asi que aproveché para ponerme mi pijama sin camisa, al menos cuando Rebecca se despierte tendría buenas vistas, aunque sabía que no lo iba a importar mucho. Rebecca solo me veía como un amigo y eso me enojada un poco.
Volví a la habitación y me senté a su lado en la cama observándola mientras dormía.
¿Qué había hecho para que me gustara tanto?
Solo la conocía desde hace unos meses pero había conseguido robarme el corazón. ¿Por qué mi compañera y no otra chica?
Pasé una mano por su piernas y la otra por su espalda para cargarla y empecé andar hasta el baño. Abrí la puerta y me acerqué lentamente a la bañera. Ya era la hora de despertarla. La metí en la bañera, abrió los ojos de golpe y soltó un grito que seguramente los universitarios los escucharon.-¡Maldito hijo de tu madre! ¡Eres un idiota! ¿¡Lo sabías!? -me había dejado sordo después de su grito-. ¿¡Tu eres idiota o qué!? ¡A mi no me da gracia! ¡No me hables durante el resto de tu vida! ¡Ni te acerques!
-Eres una exagerada -dije riendo -. Deja de gritar que son las diez de la noche y a estas horas la gente duerme.
-¡Exacto! ¡La gente duerme! ¿¡Por qué mierda me despiertas!?
-Tú me dijiste que te despertará en media hora y ha pasado una hora.
-Al menos podrías poner agua caliente, me estoy helando joder. Me voy a morir de hipotermia por tu culpa -dijo abrazándose a si misma.
-Lo siento -rodé los ojos.
-Ayúdame a salir de aquí -dijo extendiendo una de sus manos.
La cogí, antes de ayudarla a salir, Rebecca tiró de mi mano haciéndo que perdiera el equilibrio y caer en la bañera. Oí sus risas mientras solté un gruñido en forma queja
-Tengo frío -oía que Rebecca que se reía aún más.
Justo entonces, me fije en la posición en la que estábamos, todo mi cuerpo estaba sobre suyo, por la culpa de la pequeña bañera estábamos tan pegados que podía sentir como temblaba al reírse y al respirar.
-Eres tan gracioso, ahora sal de encima y déjame salir antes de que muera congelada -dijo-. No vuelvas hacer eso.
Hice lo que me pidió y la tendí una mano para ayudarla a salir. Rebecca salió ignorando mi mano dejándome como un auténtico idiota, ni siquiera me dio las gracias.
-De nada -dije.
-Ahora tendré que cambiarme de ropa por tu culpa.
-Exagerada.
-No me ha gustado lo que hiciste.
-Solo era una broma.
-Ni bromas ni leches.
Salió del baño quejándose. Me quedé mirandola mientras se secaba con la toalla, seguía igual hermosa. Ojalá que que se enamore de mi pero eso no va a pasar. Ella le gusta Zack, se nota el amor que siente por él y eso me duelo mucho.
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Heey, ahora me encuentro super bien. Lo siento por tardar en actualizar, el dolor de cabeza que tenía no me dejaba pensar. Bueno, aquí ya teneis el capítulo. Espero que os guste (^o^)
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Enamorada De Un Acosador
Short StoryCuando Rebecca comienza a ser acosada por whatsapp, el miedo invade su vida. Su único objetivo es descubrir quien es su acosador. Pero a medida que los acosos comienzan a intensificarse, Rebecca se da cuenta de que en su interior comienzan a alberga...