-Calmate Rebecca -dijo Brenda.
-¿Estas segura que has hecho bien los cálculos? - preguntó Keila.
-¡Si! -respondí angustiada-. ¡A mí siempre se me viene en el día!
-Tranquila, no siempre el periodo es regular.
-¡Keila, lleva dos semanas de retraso!
-Seguro que has hecho mal la cuenta.
-¡Que no! ¡Joder!
-Vamos a calmarnos -dijo Brenda-. ¿Eres virgen?
-Bueno...
-Eso es un no -Keila soltó una pequeña risa.
-¡Dios! -dije dando vueltas por toda la habitación-. ¿¡Qué hago!?
-Ya, calmate -dijo Keila como si nada.
-Claro, es fácil decirlo. A ti seguro que no te ha pasado.
-¿Pero habéis usado protección? -preguntó Brenda.
-Creo que si.
-Con un "creo" no me basta.
-¡No me acuerdo!
-Que memoria de pez -dijo Keila mientras se reía.
Tenía pánico inmenso, ya no sabía que pensar. ¿Si lo estaba o no? Esperaba que no. Brenda se levantó de la cama y se acercó hacia mi.
-Tranquila, no te pongas nerviosa -dijo intenando relajarme-. No siempre es regular, eso pasa a todas las chicas.
-Verás que en la próxima semana te vendrá el periodo -dijo Keila.
-Confío en vosotras.
*********
Cinco minutos, solo faltaba cinco minutos para que el timbre sonara. Me encontraba con Logan en el pasillo, hablaba de algo pero no le prestaba atención por el sueño que tenia, tenía muchas ganas de dormir. Bostezaba cada tres minutos.
-¿Tienes sueño? -preguntó.
-Si -volví a bostezar.
-¿Cuantas horas a dormido?
-Ocho horas -dije-. No se pero últimamente me da ganas de dormir.
-Bueno, tendrás que estar atenta en tu próxima clase -miró el reloj-. El timbre tocará dentro de un minuto.
-¿Un minuto?
-Si.
-Es mejor que ya me vaya a la clase.
-Vale, adiós.
-Adiós -dije yendo a la clase de ciencia.
En toda la clase no prestaba mucha atención la clase, me pesaban los ojos. Estaba cada minutos cerrando brevemente los ojos.
-Para el próximo mes, quiero que realicen un grupo de cuatro para un proyecto científico -explicaba el profesor de ciencia con su típica voz calmada mientras se paseaba por todo el salón.
Me asusté al escuchar el timbre sonar, cada universitarios se levantó de su asiento para salir lo más pronto de aquella prisión. Subí las escaleras a la habitación, abrí la puerta y lo primero que hice era lanzarme sobre el colchón como una vaga.
-¿Qué haces? -preguntó William.
-¿No me ves?
-Tenemos que limpiar la habitación, está muy desordenada.

ESTÁS LEYENDO
Enamorada De Un Acosador
Short StoryCuando Rebecca comienza a ser acosada por whatsapp, el miedo invade su vida. Su único objetivo es descubrir quien es su acosador. Pero a medida que los acosos comienzan a intensificarse, Rebecca se da cuenta de que en su interior comienzan a alberga...