Insomnio de media noche
Hubo sombras de un amor imposible
que recordé con gran ternura
en el abismo de mis pensamientos,
abrazados a un alma inquieta
que vaga en sueños de aquellas pupilas.
¿Dónde podría estar
la golondrina de estos cantos?
Intenté besar toda forma de sus letras,
dueñas de los instantes de amor,
habiéndose perdida en la quimera
de la pasión prohibida de dos amantes.
¿Dónde podrías estar?
¿Acaso te perdió de vista mi alma?
¿Reclamo ahora tu ausencia?
¿Por qué perturbas mi noche?
¿Por qué la haces inquieta al sueño?
¿No ves acaso que en ese sueño te busco?
Y heme aquí queriendo;
heme aquí despierto...
Heme aquí soñando
en una noche triste
sin luna...
Y aquí estoy solo sin ti.