Querido diario:
Me encantaría añadir un 'Y vivieron felices y comieron perdices' después de ese capítulo entre Ben y yo en el vestuario, pero estaría mintiendo. ¿De qué me sirve mentir cuando probablemente soy la última superviviente humana en la Tierra? De nada. Por tanto, lo siguiente que debo contar es: ¿por qué rompimos Ben y yo?
Días después de lo que ocurrió en el vestuario, reflexioné. No paraba de darle vueltas a la conversación que tuve con Jérome. Eleanor la había cagado al no confiar en mí, ni en Lizbeth, pero entendía su punto. Es muy difícil confiar cuando casi todas y cada una de las personas a las que has querido te han traicionado. Así que no tardé mucho en acercarme a ella durante un almuerzo, al principio se sorprendió, pero no tardé en ver una sonrisa en su cara. Lizbeth se unió cuando me vio junto a Eleanor, incluso Tiffany, aunque esta última dudó un segundo, hasta que Eleanor le aseguró que todo iba bien.
Tenía a mis amigas de vuelta en mi vida, un novio perfecto, y ahí no acabó todo. Dylan me confió sus sentimientos por Tiffany y yo misma le ayudé con la sorpresa que le organizó para declararse, para dejar claro que no había sido una chica con la que se acostó, sino que se había ganado un sitio en su corazón.
Todo a mi alrededor parecía ir genial, casi era como un cuento de hadas, y todos estábamos teniendo nuestra bonita historia de amor y amistad.
Entonces, ¿qué pasó entre Ben y yo para que acabáramos del modo en que acabamos? Supongo que puedo invertir algo de mi tiempo en contar la historia de lo que ocurrió esa noche mientras estoy refugiada en mi tienda de campaña escondida de los otros.
Era el cumpleaños de Lizbeth y se nos ocurrió montar una fiesta sorpresa. Theo ofreció su casa para la fiesta, incluso cuando no estaba muy contento por hospedar en su casa a los enamorados Eleanor y Jérome. Sin embargo, entre Ian y yo, le logramos convencer de que habría demasiada gente en la fiesta como para toparse con ellos.
La tarde de antes al cumpleaños de Lizbeth, Ben se encargó de cuidar a su hermana y a Sammy mientras yo ayudaba a decorar la casa de Theo.
Lo típico unos globos, una pancarta de 'Feliz Cumpleaños', una tarta, una mesa entera de bebida... Lo normal en una fiesta llena de adolescentes.
Tampoco me voy a demorar mucho en contar las horas previas al inicio de la fiesta, no tengo suficientes páginas en el diario como para derrocharlas. Así que, lo hicimos todo, incluso tuvimos algo de tiempo libre para bailar Dylan y yo en la que iba a ser la pista de baile mientras Ian y Theo comprobaban el equipo de música.
Solo echando la vista atrás me doy cuenta de los pequeños detalles de aquel día, de las pequeñas cosas que desembocaron en la mayor tragedia de mi vida (al menos hasta el momento, hasta que los Otros decidieron aparecer en mi vida y poner una pizca más de drama).
Bueno, iré directamente hasta justo después del momento en que Lizbeth fue sorprendida por la fiesta (realmente fingió, al parecer no sabemos guardar bien un secreto).
Ben me sacó a la pista, aunque apenas unos minutos después sus compañeros de fútbol le arrastraron hasta la mesa de las bebidas, donde habían organizado una competición de chupitos. Pero no pasó mucho tiempo hasta que Dylan apareció a mi lado y decidió que sería mi nueva pareja de baile, no sin antes, brindar con un chupito de tequila.
No sé si lo he comentado antes en este diario pero, con respecto al alcohol, soy un peso pluma.
No estoy segura de cuánto tiempo estuve bailando con Dylan, pero por el dolor de mis pies, bastante. Di gracias a Dios cuando apareció Tiffany y cumplió su papel de novia revelándome en la dura tarea de bailar con el incansable Dylan.
Ben seguía con sus compañeros, pero uno de ellos, ni siquiera recuerdo su nombre, decidió que sería buena idea comprobar cuánto aguantaba la chica de Ben. Ben puso algo de resistencia a que yo participara en ese estúpido juego, lo que provocó que quisiera jugar, cuando al principio no tenía ningún interés.
Ben se encargó de permanecer a mi lado en todo momento mientras los chupitos seguían bajando por mi garganta. Perdí la cuenta de cuantos chupitos había bebido, solo sé que paré cuando uno de ellos se quedó a medio camino y necesitaba correr al baño para vomitarlo.
Me alejé de Ben, intentando aparentar normalidad, aunque supongo que la urgencia de mi salida y el traspiés tras apartarme de la sujeción de Ben provocó una horda de risas. Miré a mi espalda y me aseguré que Ben siguiera junto a sus compañeros, no necesitaba que me viera vomitar los chupitos de tequila cuando claramente él intentó evitar esto.
Cuando llegué al baño de la planta baja suspiré de alivio, pero casi suelto un grito cuando comprobé que la puerta estaba cerrada y dentro se oían unos gemidos, dejando poca duda a lo que estaba sucediendo allí dentro.
Alguien tocó mi espalda y otra arcada subió por mi garganta. Necesitaba encontrar un baño y después sentar mi culo en algún sitio que no diera tantas vueltas.
-Baño-susurré al chico que tocó mi espalda, que gracias a Dios, era Dylan. Aunque, desafortunadamente, iba aún más borracho que yo, pero entendió mi petición y caminamos hasta la planta de arriba, casi sin caídas, creo que solo fueron tres, o al menos tenía tres hematomas a la mañana siguiente en mis piernas. Dylan tomó mi mano, arrastrándome y me llevó hasta la habitación de Theo, donde, por suerte, había un baño libre y limpio todo para mí.
Entré corriendo en el baño, y vomité todo el tequila que había tomado no solo esa noche sino en toda mi vida. Me prometí a mi misma no volver a probar el alcohol después de eso.
Lo estoy cumpliendo, gracias a los Otros.
Mientras vomitaba mis párpados se estaban cerrando. Mi cuerpo no podía más, ni siquiera sé qué hora era, pero cuando me limpié la boca de vómito, sabía que necesitaba tumbarme en algún sitio. Solo maldije cuando me di cuenta que mi camiseta se había ensuciado de vómito de algún modo, pero definitivamente no podía usar eso.
Supongo que fue culpa de la borrachera, pero no dudé ni un segundo en quitármela y arrojarla en alguna parte del baño. Cuando salí, iba a preguntar a Dylan donde podría tumbarme un rato, pero él me había robado la idea. Estaba completamente dormido en la cama individual de Theo, incluso roncando.
Me estaba dando tanta envidia. No tenía ningún tipo de fuerza para bajar las escaleras y buscar a Ben, todo me estaba dando vueltas y pensaba que de un momento a otro me desmayaría si no me tumbaba allí mismo. Así que lo hice. Me arrastré hasta la cama y me acurruqué en la pequeña cama de Theo junto a Dylan. Gruñó un poco cuando me tumbé a su lado, pero no tardó en pasarme un brazo por encima, arropándome con su calor. No me aparté porque aquella habitación era realmente fría, yo estaba sin camiseta y a pocos segundos de desmayarme.
Estaba bastante dormida, pero recuerdo perfectamente tres ruidos mientras estaba allí totalmente borracha compartiendo cama semidesnuda con Dylan. La primera eran dos personas riendo, probablemente buscando un lugar donde tener algo de privacidad. Se cerró la puerta y volvió el silencio. La segunda vez, la puerta se abrió de manera abrupta y permaneció de ese modo hasta que llegó el tercer sonido. El tercer sonido fue alguien que alejó a Dylan de mí, haciéndome gruñir por la falta de su calor.
Después de esa noche, mi mundo cambió por completo.
¡DESPUÉS DE UN MES ESTOY DE VUELTA!
¿Qué? ¿Qué os ha parecido el 'gran' motivo de discusión para que Cassie y Ben rompieran? Sé que lo normal hubiera sido que no supierais que Cassie no le fue infiel, pero supongo que es otra manera de contarlo. Conocéis la verdad y desde ese punto de vista volveréis a vivir lo mismo desde los ojos de Ben.
Queda poco para el final, ¿ansiosos?, ¿tristes?
NOS VEMOS EN QUIÉN SABE CUANTO TIEMPO CON OTRO CAPÍTULO
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Ni un apocalipsis nos separará (Apocalipsis #1)
Fanfic-¿Sabes? Había pensado que aún no me apetece volver a mi casa. Me acerco un poco más a él y noto como toma una respiración profunda. Me encanta ver que le he puesto nervioso. Me acerco un poco más y atrapa su labio inferior con los dientes, mirando...