(LIBRO 1) ¿Qué sucede cuándo pones todo tu empeño y esfuerzo en detestar y despreciar a un chico que te hace la vida imposible? ¿Qué sucede si para colmo viene a tu vida para quedarse y te toca vivir bajo el mismo techo que él?
Pues que un día te pu...
Aviso para las almas inocentes que el capítulo tiene contenido sexual, con lo cuál aquellos que no tenga edad o no se sientan preparados para su lectura, mejor os lo saltáis ya que no os perderéis nada de la trama principal.
El resto de mortales... que disfrutéis de la lectura 🙈
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¡Me ha roto el vestido! Indudablemente en otro contexto me habría enfadado porque este vestido me encantaba y, además, es de una edición limitada de Ferrucci, pero ya no me lo voy a poder volver a poner. Aun así, reconozco que me parece tremendamente provocativo y excitante que lo haya hecho con tanta osadía y determinación. No todos los días a una le arrancan el vestido así en un arrebato pasional. En las novelas puede que eso suceda cuando n frecuencia, pero en la vida real no es así.
Pese a que llevo tacones altos, Tyler me mira desde arriba y no parece sorprenderse al verme en su habitación. Tampoco me pregunta cómo he entrado aquí ni cómo he sabido cuál era su habitación. Todo eso parece que ahora mismo le da exactamente igual y sólo permanece frente a mí, desnudándome con la mirada.
Sus manos me acarician con suavidad desde los hombros hasta mis muñecas, llevándose detrás los tirantes de mi vestido blanco mientras me mira fijamente. Por sus ojos, un tanto enrojecidos, diría que está un poco pasado de alcohol, pero no estoy segura de eso.
—No tengo fuerza de voluntad frente a ti, Olivia. No estoy ni siquiera seguro de que esto esté bien. Pero no puedo parar. Dios, te deseo tanto, te necesito tanto que no puedo parar. No voy a parar. Dime que no pare, por favor... dímelo —Le tiemblan las manos mientras me suplica y con delicadeza desliza mi vestido de encaje blanco por mis caderas hasta que cae a mis pies dejándome expuesta frente a él, vestida únicamente con la ropa interior.
Me quedo impresionada y estática ante sus palabras, mientras el corazón se me acelera con violencia. Ya siento nuevamente como todo en mí sé descontrolado ante su presencia, sus palabras y su penetrante mirada verde.
¿Debería pararlo? Sí, incuestionablemente debería hacerlo porque tiene que escuchar mi verdad, pero temo que, al hacerlo, se rompa la fantástica magia que se acaba de crear entre nosotros dos y, además, hay que tener en cuenta que son escasa o prácticamente nulas las veces que eso ocurre.
Aun así, tenemos que hablar de todo lo que ha ocurrido esta noche, y necesito saber qué pasa con April y en qué punto están ellos dos ahora mismo. Mi conciencia me grita que no sea tan ingenua, porque en el fondo yo ya conozco la respuesta... April es su novia, pero necesito escucharlo de su boca. Necesito que después de escuchar mi verdad, tenga la valentía de confesarme que está saliendo con esa loca víbora que ha logrado distanciarnos a base de mentiras y con la ayuda de Neal.
Tyler acaricia mi mejilla con los nudillos, nublando mi mente y deteniendo mis pensamientos, haciéndome sentir perdida en su delicioso contacto. Inconscientemente cierro los ojos para disfrutar del roce de sus dedos humedecidos en mi rostro. Retira la mano y apoya su frente contra la mía para llegar al cierre de mi sostén. Ahí es cuando empiezo a temblar como un postre de gelatina, porque sé que cada paso que él avanza en esta dirección que nos lleva a perdernos el uno en el otro, es un paso más que me alejo de mi supuesto objetivo para esta noche.
