¿Cómo te atreves a volver? - (Ventino) [Makia]

Capítulo 14 - Desde mi cielo.

N/A: Escuchen la canción, es increíble.

Camila Prov:

Ya van dos semanas y media desde que Natalia está en coma, no ha empeorado ni ha vuelto a tener una crisis, pero tampoco hay mejoría, como debíamos ir al colegio hicimos turnos para venir, me tocaba a mí y traje uno de mis libros favoritos de poesía para leerle unas cuantas a ella, es la antología poética de Cristina Peri Rossi, estoy más de una hora leyéndole, no puedo creer que en tan poco tiempo logré tomarle tanto cariño, solo quiero que despierte y que podamos llevar a cabo un sueño juntas, ya va siendo hora de irse.

- Adiós Nata, mañana traigo otro libro para poder leerte - le dejo un beso en la mejilla y salgo de ahí.

Natalia Prov:

Cami, está chica es un ángel, no sabe lo que me relaja que cada tarde me lea poesía, me gusta la pasión que expresan sus palabras, la emoción con cada poema de amor que logra leer, me gustaría poder decirle que la escucho, que le agradezco sus tardes de lectura, hacen que llegue a una paz que no creía posible, pero ninguna parte de mi cuerpo responde, solo puedo escuchar y sentir cuando me tocan, me deja un beso en la mejilla y se despide, estoy ansiosa por escuchar lo que me traerá para mañana.

Olga Prov:

Llegué a la habitación de Nati, dejo mis cosas y me dispongo a contarle lo que pasó hoy.

- Nata, ni te imaginas lo que pasó hoy en el colegio, Makis se ganó un castigo y sé que te reirías y nos dirías pinches ñoñas porque es el castigo más idiota de la historia. Resulta que teníamos que coger un libro de matemáticas y no había nadie para poder pagarlo, entonces solo decidimos llevarlo, pero venía gente, así que le dije que nos escapáramos por la ventana, pero la muy idiota se quedó parada ahí y la atraparon, se tuvo que quedar una hora más - le tomo la mano y la miro - Sé que te reirías con esto.

Me quedo varios minutos más, contándole cosas, imaginado que me escucha y me está mirando con atención, pero ya va siendo hora de irme, así que le besó la mejilla y le acarició la frente.

- Muy bien preciosura, hora de irme, mañana te traigo otro episodio de Makis y Olgui en el colegio haciendo pendejadas - le doy un ligero apretón a su mano y salgo, cada vez que salgo por esa puerta siento que mi corazón se aprieta un poco más.

Natalia Prov:

Tiene razón, Olgui tiene razón, son unas pinches ñoñas, ¿Quién carajos se gana un castigo por un libro de matemáticas? Me gustaría poder decirle que deben soltarse más, que esta etapa no la volverán a vivir, me gustaría reírme con sus historias y los chismes de famosos con los que llega, es que ella es muy rara, pero me encanta, me hubiera encantado compartir con ella un poco más, poder reírnos juntas, hacer alguna tontería juntas, pero ahora no sé si pueda, solo espero que si no vuelvo a despertar ellas no sufran, porque yo no sufriré, serán ellas y mi familia las que quedarán destrozadas, me gustaría darles consuelo de alguna manera.

Juliana Prov:

- Hola rata ¿A qué no sabes con quién me pelee hoy? - le digo mientras entro a la habitación, le dejo un sonoro beso en la mejilla y me siento a su lado.

- La idiota de Kate se estaba riendo de que tú estuvieras en el hospital, hacia mofa de la situación y decía que te merecías todo esto por engreída y mala persona, pues no me aguanté y le di un buen golpe en el centro de la cara, creo que la deje aturdida porque se fue de espaldas y no se volvió a parar, el director literalmente me tuvo que sacar a rastras del salón porque estaba furiosa y quería pegarle de nuevo, bueno me gané una suspensión de 3 días, así que en tres días me tendrás que aguantar hablándote de todo lo que se me ocurra - le digo con una sonrisa nostálgica, no puedo evitar que se me escape un sollozo y que las lágrimas solo salgan de manera abundante.

- Tienes que despertar, tienes que despertar para que las dos nos ganemos esas suspensiones por dejarle a Kate un ojo morado, me haces falta, horriblemente me haces falta, nada es lo mismo sin ti, no te atrevas a dejarme sola, no te atrevas a abandonarme con ese montón de pelotudos que no saben dónde va la vida, tenemos sueños por cumplir juntas, tenemos viajes pendientes, tenemos tantas cosas por hacer, eres mi mejor amiga en el mundo entero, por favor no me dejes sola - no puedo evitar llorar sobre su mano inerte, he querido mantenerme fuerte, pero esto me está rompiendo, no tener a mi mejor amiga me está matando, lloro casi toda la visita, cuando veo que ya es hora de irme seco mis ojos, aprieto su mano y le dejo un beso en la frente - Te amo boba, por favor vuelve conmigo - si más que agregar me voy nuevamente con el corazón desecho.

Natalia Prov:

Mi negra, siempre metiéndose en problemas, hubiera pagado por ver como Kate se desplomaba por el golpe que recibió, pero estoy aquí, de brócoli en una cama de hospital, la escucho decir que le hago falta, está llorando.

Por favor mi negra no llores por mí, cada lágrima que botas es una tortura, tú también me haces falta, me hacen falta tus abrazos, nuestras noches de películas, cantar a grito herido en los recesos hasta que algún profesor viene a callarnos, por favor mi negra no llores por mí, cada vez que lloras me muero, quiero verte sonreír, quiero verte feliz, no puedo soportar saber que estás triste. Mi negra si llego a irme, siempre te cuidaré y en sueños iré a decirte que fuiste la mejor amiga que el mundo me pudo entregar.

Makis Prov:

- Hola hermosa, perdón la tardanza, pero me castigaron por robarme un libro de matemáticas, te ves preciosa cómo siempre, ojalá no tuvieras esa estúpida mascarilla para poder besar tus labios - le digo después dejo un beso en su mejilla - Con esto tendrá que bastar por ahora.

Le acaricia la mejilla, está pálida y fría, me pone de los nervios ver sus manos inertes y su cuerpo repleto de cables y máquinas, me dejó caer a su lado y por primera vez siento flaquear mis esperanzas, no llevo ni dos minutos acá y ya estoy ahogada en llanto.

- Por favor ya despierta, no me hagas esto, no me dejes ahora que decidí amarte, que me di el valor de amarte, no me abandones, no te lleves mi corazón, juro que si te llegas a ir yo me iré contigo, tú no deberías estar acá, tú deberías saber que esa noche que te vi por última vez hicimos el amor, que corroboré que sigo enamorada de ti hasta lo más profundo, tú deberías estarme abrazando, estarme besando, no deberías estar en esta cama - ya no puedo más, la desesperación y el llanto me atacan completamente, sin pensarlo me echo a llorar sobre su pecho, ya no puedo más con esto.

Natalia Prov:

¿Acaba de decir que hicimos el amor? Si, eso dijo, Makis te escuché, repítemelo, repite que me amas y que hicimos el amor, por favor repítelo, no me puedo marchar si no me lo dices.

- Te amo con todo el corazón, no tienes idea lo que daría por volver a hacer el amor contigo como esa noche - la escucho decir, dios no, no estoy lista para irme, tengo que luchar por mi segunda oportunidad.

- Si te vas yo me iré, contigo, debería ir a buscar un carro que me pasara por encima - dice ella, siento que se pone de pie.

No seas tonta, Makis no te vayas, quédate conmigo, sigue hablándome, tráeme de vuelta, Makis no te atrevas a irte, yo también te amo, quiero está segunda oportunidad, quiero volver a hacer el amor contigo.

- Ya no puedo con esto, si tú no vas a regresar yo me iré contigo, ahora mismo voy a buscar el modo de llegar a tu lado - dice muy decidida tocando mi mejilla.

¿Estás loca? Makis no, no te vayas, por favor no hagas una tontería, voy a regresar, voy a regresar a ti, no te atrevas irte con un demonio, te amo, no permitiré que te hagas daño, no puedes.

-Te amo, espérame que ya vengo - me dice y me deja un beso en la mejilla, nunca antes había sentido este calor tan intenso, maldito cuerpo brócoli reacciona que el amor de tu vida está a punto de ir a suicidarse y tú no estás haciendo nada.

- Adiós- Makis no, el calor de su mano sigue sobre la mía.

No te vayas, no lo voy a permitir, Makis no te vayas, siento que su mano poco a poco va soltando la mía. Makis no te atrevas a salir, no puedes, no puede ser su calor poco a poco va desapareciendo, DEMONIOS, MAKIS NO TE ATREVAS A IRTE.

- No... No te vayas... No puedes irte - digo con las últimas fuerzas que me quedan.

- ¡Natalia! ....