¿Cómo te atreves a volver? - (Ventino) [Makia]

Capítulo 44- No vayas.

Makis Prov:

- ¿Cuándo se supone que me tengo que reunir con ella? – pregunto mirando esa carta con total furia, hace unos momentos llegaron Cami y Juli a la habitación, Olgui jamás se fue y Natalia estaba dándose vueltas de un lado para otro refunfuñando groserías que hasta yo desconocía.

-TÚ NO VAS A NINGÚN LADO – grita Natalia dejando salir unas cuantas palabras por primera vez en todo este rato, haciendo que nos sobresaltemos las otras integrantes del grupo.

-Natalia...- pero no me dejan terminar y esta vez no es mi amor la que me deja con las palabras en la boca.

-No iras Makis – dice Cami poniendo cara seria.

-Apoyo a Cami – dice Juli, los paseos de Natalia van cesando a medida que escucha a mis amigas, miro a Olgui intentando buscar una aliada en ella, pero sus ojos me demuestran una negativa implacable, una negativa que de seguro ni se molestara en darme porque solo su mirada basta.

-Yo...- nuevamente no me dejan terminar, normalmente esto me molestaría de sobre manera, pero en esta situación, con estas personas, nada me molesta.

-Ya casi perdimos a Natalia, no podemos arriesgarnos a perderte a ti, no es justo que nos hagas pasar por esto cuando sabes que ella es peligrosa y que todo daño lo puedes evitar simplemente sin ir a ese lugar – me dice Olgui, recuerdo todo lo que pasó con Natalia, ese nudo y esa culpa se apoderan de mí en unos cuantos segundos.

-Es por eso que quiero ir, decía claro que si no iba una vida pesaría en mi conciencia, no quiero que eso pase, no quiero que a alguna de ustedes les hagan daño porque yo decidí ser cobarde, no puedo dejar que Natalia vuelva a pagar por mis errores – les digo completamente desesperada, no quiero desistir frente a esto, no quiero que algo malo vuelva a pasar.

-No hables como si no estuviera acá – dice Natalia parándose frente a mí con el ceño fruncido, se abre paso entre las chicas y se arrodilla frente a mí – Escúchame y mírame, todo lo que me pasó no fue tu culpa, fue culpa de esa cabeza retorcida que tiene ella, pero no puedes ir, tampoco nos puedes pedir que te veamos ir a un matadero con los brazos cruzados sin poder hacer nada, no es para nada justo, no nos puedes hacer esto, nos tenemos las unas a las otras y nos vamos a proteger, me tienes a mi amor, me tienes a tu lado, por favor no corras peligros innecesarios y no vayas, no vayas donde esa vieja con cabeza retorcida – me dice trazando la curva de mis mejillas con los pulgares, me quedo sin respuestas y sin aliento.

-No podría soportar que te pasara algo malo, a ti o a cualquiera de las chicas – le digo tan bajito que quizás fue la única que escuchó, ella me mira y me sonríe, deja un pequeño beso de pico en mis labios y se queda mirándome con ternura.

-Así como tú no soportarías que algo malo nos pasara, nosotras tampoco nos perdonaríamos por dejarte ir con esa tipa deschavetada, por favor, te lo ruego Makis, no vayas con ella, no dejes que te vuelva a hacer daño – cuando termina de decir esto su frente queda pegada a la mía, dejo que su perfume me envuelva de manera delicada, dejándome completamente a su merced.

-Por favor Makis escucha a Nati, no vayas donde ella – me dice Olgui poniendo su mano sobre la mía.

-No vayas, no permitas que te pueda hacer daño – dice Juli apoyando su mano sobre la mano de Olgui.

-De verdad no nos perdonaríamos si te pasara algo – dice Cami apoyando la mano en la de Juli, de la nada me encuentro con cuatro pares de ojos esperando mi respuesta, sé que ambas decisiones son un riesgo, pero no ahora me inclino por la que causará menos daño a mis seres queridos.

-No iré, pero por favor tomemos precauciones, díganle a Juancho que contrate más seguridad, no salgan solas, si la ven traten de evitarla lo más posible, así que, por favor, por favor cuídense de sobre manera, no sean temerarias, no voy, pero esa es mi única condición – digo soltando un suspiro, veo alegría en esos ojos y antes de poder agregar algo unos labios se apropian de los míos de manera desesperada.

-Trato hecho hermosa – dice apenas nos separamos, Olga me abraza mientras que Juli y Cami se abrazan entre ellas, de inmediato recuerdo que pasó algo entre ellas y nunca se aclaró, o por lo menos a mí nunca me lo contaron.

- ¿Qué pasa entre ustedes? – lanzo sin ningún tipo de anestesia, ambas de inmediato se sueltan y se ponen rojas como un par de tomates, ya no saben dónde mirar.

-De aquí no se van hasta que cuenten – dice Natalia acomodándose a mis espaldas para abrazarme y recostarme contra su pecho.

-Yo también quiero saber, no puedo creer que por fin las cosas están saliendo bien – dice Olgui emocionada, la verdad es que ha sido un poco desastrosa nuestra vida desde que somos Ventino, pero eso no quita que ahora somos una familia y que las cosas estén saliendo realmente bien es gratificante.

-Bueno.... Es que .... Juli y yo .... ¡Ay no puedo! – dice Cami poniéndose roja, Olgui ya un poco desesperada le dice con mayor naturalidad.

-Ya habla niña que me estás poniendo los nervios de punta – le dice tratando de apurar la situación.

-Camiyyodecidimosintentarlo – suelta de sopetón Juliana, quedando todas con la boca abierta intentando descifrar algo de lo que dijo.

-Espera que yo la destrabo – dice Nati soltándome, no sin antes dejarme un suave beso en la mejilla, se pone de pie y se posiciona al lado de Juli, esta ultima la ve con miedo, de improviso le jala la oreja de manera fuerte – Habla bien demonios, que no tengo tiempo de descifrar tus intentos de trabalenguas.

-DIJE QUE CAMI Y YO LO VAMOS A INTENTAR, VAMOS A SALIR ¡AY YA SUELTA! QUE ME VAS A DEJAR SIN MI OREJITA – grita Juli pataleando, Nati ya un poco más satisfecha con la respuesta la deja y se vuelve a tirar a mi lado – Cami, me pegó – dice Juli haciendo pucheritos.

-Pobre bebé, ven acá que ya te consiento – dice abriendo los brazos, Juli no duda en arrojarse sobre ella para envolverse en un abrazo.

-Llorona – dice Olgui riéndose entre dientes, Cami de inmediato se incorpora y le jala la oreja con los ojos encendidos.

- ¡AAAAAAAAAY! PERO SI FUE NATALIA LA QUE LE JALO LA OREJA, YO NO HICE NADA -grita está tratando de soltarse de su agarre.

-Esto te pasa por decirle llorona a mi Juli – le dice soltándola, Natalia comete el grave error de reírse muy algo, ganándose la total atención de Cami y de Juli, quienes se ponen de pie y la miran de manera macabra, mi novia no alcanza a dar dos pasos antes de que ambas chicas tomen de sus orejas y la jalen con fuerza, todo esto con especial cuidado de que la bata no se le abra.

- ¡AAAAAAAAAAAAAAY! PERDONENME, MAKIS, SALVAME, LAS LOCAS ME QUIEREN MATAR – grita despavorida.

-Lo siento amor, tú te metiste en eso, tú te sales – le digo al momento que mis dos amigas la sueltan, Natalia de inmediato corre hacia mí para esconderse entre mis brazos haciéndose un ovillo lloriqueando por el ardor de sus orejas.

-Son unas sendas pendejas – dice Olgui y sale corriendo, decidimos terminar ese día con una cena relajante y un tranquilo baño, antes de darme cuenta Natalia está profundamente dormida, fue un día cansado de seguro dormirá de tirón hasta mañana, el sonido de mi celular me saca de mis pensamientos, es un número desconocido.

N/D

Te espero en máximo una hora y media en el lugar citado, más te vale llegar, sabes las consecuencias que tiene molestarme, más te vale llegar.

Sé que es Isabel, ella y solo ella tiene motivos para hacerme daño o para dar a quienes quiero, veo el celular y me debato entre ir o no, miro a esa hermosa y valiente chica que duerme acurrucada a mi lado, tengo miedo de que la furia de esa chica loca se desate sobre ella, no lo meceré, Natalia Afanador merece ser feliz, es casi por inercia que a pasos silenciosos salgo de la habitación para vestirme, pido un Uber, el recorrido indica máximo 40 minutos, antes de salir del departamento veo por la puerta ese hermoso rostro dormido, todo lo que haga esta noche lo haré para protegerla a ella.