TWENTY

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No pongan el vídeo de multimedia hasta que les diga. 👀

5 años después.

Narra Bruno.

-¡Ruby, baja se hace tarde!

Mi pequeña ya tenía 6 años de edad, por lo tanto ya tenía que irse a clases. Pero ayer salí tarde del trabajo y me quedé dormido. ¡Eres genial Bruno!

Si, ahora soy padre soltero, Catherine no volvió a buscar a Ruby, y estoy muy molesto con ella. Básicamente inició otra vida sin nosotros, solamente he tenido una pareja, que por cierto también me dejó por que nunca tenía tiempo para nosotros.

Y tenía razón, pero ¡mujer! Trabajar y cuidar a una niña no es fácil. Philip y Abie han estado ahí para ayudarme cosa que agradezco demasiado. Por cierto mi loco amigo se animó a dar el primer paso y se le declaró, ahora son novios.

-Ya voy, papá.

Me acerqué a ayudarle a Ruby con su mochila, por suerte su cabello no era como el mío, y pude peinarla.

Ya estando afuera de la escuela me despedí de ella.

Regresé a casa y me preparé para ir a trabajar, al llegar muchos compañeros se acercaron y pedían ayuda o me daban recados. Sería un día pesado.

••

-¡Mierda!

De nuevo iba tarde a recoger a Ruby, había tráfico y me comenzaba a desesperar. Al llegar Ruby estaba sentada en un banco con lágrimas en sus mejillas y con una manita suya tallaba uno de sus ojos, una profesora estaba con ella.

-Lo siento, tuve unas ocupaciones.

La profesora sonrió.

-No se preocupe, listo Ruby, ya te puedes ir.

Ruby me miró y se acercó, miré a la profesora y le agradecí.

-Gracias -sonreí apenado.

Ella asintió y entró a la escuela. Tomé la mano de Ruby, pero ella la apartó bruscamente, y se dirigió al auto. La conocía muy bien y sabía que estaba molesta conmigo. Más tarde hablaría con ella.

Íbamos camino a casa y cuando me detuve en un semáforo intenté hacerle platica. Obviamente estaba enojada, ella hablaba demasiado sobre su día en la escuela, cosa que ahora no hizo.

-¿Cómo te fue, princesa?

-Mal, ¿me ibas a abandonar, papi? -dijo Ruby mientras me observaba y hacía un pequeño puchero, y sus ojos se llenaban de lágrimas.

-No, cariño.

-Es, que no quiero que te vayas, y que no vuelvas como hizo mi mamá.

Eso que dijo fue como una apuñalada en el corazón, me dolió y es que entiendo lo que es vivir sin mamá desde pequeño. Pero ¿por qué Ruby?

-Ruby, yo jamás, pero jamás me iría sin ti, no te dejaré nunca ¿está bien?

Ella asintió mientras se limpiaba sus lágrimas, quería abrazarla. Así que avancé a una orilla donde pudiera detenerme, desabroche los cinturones de seguridad, y le llamé.

Surprise! (Bruno Mars)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora