Surprise! (Bruno Mars)

FIFTY FOUR

Llegaron a su hogar, tristes y sin ánimos.
Ruby se fue a su habitación encerrándose. Bruno se acercó a si chica y la abrazó fuertemente, besando su cabeza.

-Estará todo bien -dijo susurrando, intentando no llorar.

Ella negó y lloró con más intensidad.

-Estamos juntos, los tres. Pasó por algo, debemos seguir adelante, ¿si? Por favor, me duele verte así.

_______ deshizo el abrazo -perdón- mencionó mientras subía a su habitación para desahogarse. Necesitaba llorar, estar sola.

Bruno también, así que sin ganas salió a dar una vuelta por la calle. Tantas pérdidas en su vida, para él era demasiado, pero es normal. La muerte es algo ya asegurado.

Su madre, Catherine y ahora su bebé.

Aunque todo deja una enseñanza. Valora y da amor a los que están con vida, aprovecha cada momento con ellos. Porque cuando te des cuenta, eso ya no será posible.

Y duele.

••

-Ruby Hernández... -mencionó la profesora al día siguiente mientras pasaba la lista de asistencia.

No hubo respuesta, ella no había asistido. Johnny se sentía preocupado, Ruby iba diariamente y el día anterior no habían hablado. Lo único que recordó es que su amiga le había comentado con ilusión que su hermano nacería el día anterior. Sonrió al recordar su rostro llenó de emoción.

La campana sonó indicando la hora de su receso, algo desanimado salió del aula. Caminaba mientras pensaba qué comería y haría durante ése rato.
Ya estando en la mesa donde comía cómodamente, se acercó Sophia.

-Hola -habló sonriente.

Él le devolvió la sonrisa, mientras respondía -hola.-

-¿Puedo? -dijo mientras observaba los asientos.

-Claro -respondió él.

Pasaron los minutos y ella no dejaba de hablar, Johnny ya se sentía aburrido y agobiado. Necesitaba a Ruby.

-¿Y te gusta alguien?

-Mm... -dijo mirándola.

-¿Mm...?

-Nop -mintió.

-¿En serio? -dijo algo triste.

Él asintió.

-Es en serio.

-Oh, bueno. Oye, ¿por qué te cae tan bien Ruby?

Johnny la observó algo asombrado por la pregunta.

-Pues, es mi amiga. Es alguien amable, graciosa y atenta. No sé, solo me agrada.

-Es insoportable para mí, jamás se te despega, nunca deja de hablar, y agh, no sé.

-¿Te ha hecho algo?

-No pero...

-¿Entonces en qué te afecta? -interrumpió..

Ella no dijo nada y Johnny se levantó del asiento para después retirarse.

-Un gusto hablar, adiós.

Caminó cansado y aburrido. Eran de esos momentos en los que necesitas un abrazo muy fuerte, de los que te dejan sin aire.

Pero no tenía a quién pedirle uno.

••

-¿Ruby? -Bruno golpeó la puerta y la abrió.

-¿Qué pasa? -respondió mientras estaba recostada en su cama dándole la espalda.

-Hija, sé como te sientes. Mira, ______ necesita estar sola un rato -dijo con mucha tristeza- ¿quieres salir a dar una vuelta, nos distraerá un rato.

Dudó, pero al final accedió.

~~~

Caminaban en aquel centro comercial, fueron a tiendas de ropa, a la tienda de discos y a ser sinceros. Fue el lugar al que más les gustó ir.

Si, seguían tristes y dolidos.

Pero esto lo tenían que enfrentar, si no lo hacen ellos entonces nadie más lo hará. Debían ser fuertes, y se podía.

-¿Ahora qué quieres hacer?

-Quiero ir a mi cama, ver una película y después dormir.

-Si, también tengo ganas de eso. Vamos por golosinas y después a dormir.

Se sonrieron levemente y caminaron en busca de lo que necesitaban.

••

"Mi bebé..."

Fue lo único que se repetía, no lo podía creer. Dolía demasiado, las lágrimas no terminaban y cada vez que se tranquilizaba, intentaba mantenerse así, pero no podía.

Estaba rota, no había otra definición.

Seguía en su cama hecha un ovillo, los sollozos salían libremente y muy fuertes. Lentamente, sus ojos se fueron cerrando, hasta quedar totalmente dormida.

No fue cuando sintió de la removían un poco, al despertar observó a Bruno a si lado, en cuclillas para quedar a se altura.

-Linda, ¿quieres venir a ver alguna película con nosotros?

-No me siento bien, Bruno.

-Yo tampoco -le sonrió con melancolía- ni Ruby. Pero debemos ser fuertes, tú lo eres demasiado, cualquier cosa que te ha ocurrido la has sabido superar. Eso me encanta de ti, eres muy inteligente y valiente.

Por primera vez después de lo sucedido, sonrió levemente.

-Gracias, pero es muy difícil y doloroso -comenzaba a querer llorar de nuevo.

-Pero no estás sola, nos tienes a Ruby y a mi. Podemos ser tu soporte si necesitas de donde apoyarte.

-Te amo tanto, Bruno. Gracias a por todo.

-Y yo a ti, gracias también.

Ambos tomaron asiento en la cama y se abrazaron con fuerza. Eso necesitaban, estar juntos más que nada.

•••••••

Gracias.💖