Amanda Diaz es una chica de origen latino que es contratada por los Estudios Marvel, a trabajar en la producción de una de las películas del MCU, durante esta experiencia conocerá el amor, de la mano de alguien que nunca creyó ni imaginó conocer, en...
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Estoy en mi departamento, hace ya un rato que ambos Chrises se fueron y estoy desolada, no he parado de llorar, afuera se escucha la algarabía del nuevo año pero para mi es una de los peores días que he vivido.
No puedo estar en la cama, se me hace imposible acostarme a dormir, intento llamar a Chris pero su teléfono sigue apareciendo apagado, siento un hueco profundo en mi corazón que casi no me deja respirar y creo que pronto me quedaré sin lágrimas.
Suena la puerta de mi departamento y una pequeña esperanza llega a mi pecho, puede ser Chris, abro y en la puerta está Pratt, con semblante serio, nunca me había desilusionado tanto de verlo.
- No pude hablar con Evans, intenté explicarle pero no quiere saber nada.
Siento una puñalada en mi pecho, sólo pensar que todo esto es mi culpa, después de los días tan especiales que tuvimos, hace que me sienta mil veces peor.
- Gracias Chris, por ahora quiero estar sola - le digo y me despido cerrando la puerta.
Voy a mi cama, arrastrando los pies, me lanzo literalmente y así me quedo hecha un ovillo, sollozando hasta quedarme dormida.
Suena la alarma de mi celular y me despierto desorientada y mareada, tardo unos segundos en reaccionar y recordar lo que sucedió ayer, siento el hueco en mi corazón crecer, quiero quedarme abatida en mi cama pero no puedo, hoy se reanudan las grabaciones, pensé que iba a ser un día de alegrías, por el contrario no quiero ni salir del departamento.
Me levanto de la cama haciendo un gran esfuerzo, me doy una ducha, y al salir trato de arreglar mis ojeras y mis ojos hinchados con un poco de maquillaje, luzco mejor de lo que me siento, me visto con ropa cómoda, pantalón negro y camisa blanca, zapatos de tacón bajo, cabello suelto y mis lentes, tal vez ayuden a disimular mis ojos llorosos.
Llego a los Estudios, le muestro mi identificación al chico de la alcabala y estaciono mi vehículo, se puede percibir el cambio en el ambiente, hay más vida que la semana anterior, el comienzo de las grabaciones llena de vibra todo el lugar; Luego de retirar un café en el comedor voy a mi oficina y de una vez me pongo a trabajar, llegué más temprano de lo habitual y ninguno de los chicos ha llegado aún.
Primero llega Matt, luego Ben, y después Jen, con todos comparto abrazos de feliz año, sólo mi amiga nota que algo me sucede.
- Hablamos más tarde - le digo cuando me pregunta si pasa algo, no quiero hablar porque no podría parar de llorar.
Transcurre la mañana, me refugio en mi trabajo, tratando de no pensar en más nada, no hay señales de Evans en ninguna parte, salgo a almorzar con Jen.
- Por favor dime que pasó ¿Es algo con tú familia?
- No - niego con la cabeza terminando mi plato, tomo aire y le comienzo a contar lo ocurrido el día de ayer.
