XXXVII

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La morena sintió pequeñas caricias por la piel de su abdomen, lo cual hizo que se despertara y abriera los ojos pesadamente con una sonrisa en los labios. Ya era de día, la luz entraba por las cortinas de la ventana y hacía que los pequeños rayos de sol golpearan su cara.

Sintió besos por la parte trasera de su cuello, lo cual hizo que un escalofrío le recorriera el cuerpo entero. Pronto sintió como la rubia la volteaba, agarrándola de la cintura, para verla a los ojos. Ambas rieron un poco, pegando sus frentes.

Y así fue como Jisoo se dio cuenta que quería despertar todos los días y que Lalisa estuviera ahí con ella, una enorme sensación de calidéz le recorrió todo el cuerpo y abrió los ojos de nuevo, para encontrarse con la mirada penetrante de la rubia.

- Buenos días, hermosa.- Sonrió Lalisa, mientras acariciaba la mejilla de la contraria.

- Bueno días...- Susurró de vuelta, mientras se dejaba guiar por el ligero toque de la contraria.

Jisoo en ese instante, en el que vio a su novia un poco despeinada, con un pequeño hilo seco de saliva, sin un gota de maquillaje, y viendo a través de sus ojos el alma de esta, y todo el amor que sentía por ella; recordó.

Sintió un pequeño dolor en su pecho, era tiempo de decirle acerca de su historia juntas, lo que Lalisa no recordaba. Abrió la boca para decir algo, pero fue interrumpida.

- Feliz mesiversario.- Le dijo la rubia, sacándola de sus pensamientos, mientras se acercaba a besarla.

- ¿Mesiversario?.- Rió con sus labios pegados a los de la contraria, mientras continuaba el beso.- ¿Eso es una palabra?.- Dijo después de unos segundos entre el beso.

Lalisa sin previo aviso se coloco encima de ella y la miró de arriba a abajo.

- No lo sé, y no importa tampoco, lo único que importa es que eres y serás siempre mia.- Dijo mientras dejaba pequeños besos por todo su cuello, y Jisoo soltaba una risa que sonó en toda la habitación.- ¿Te dije que me encanta tu risa?.- Dijo levantando la mirada un momento.- ... Y tus ojos, y tus hoyuelos...- Dijo entre risas mientras dejaba besos en cada una de las partes mencionadas.- Toda tú me encantas.- Concluyó mientras la miraba fijamente, a poco centímetros de su cara.- Te amo, te amo, te amo, ¡Te amo!.- Acotó una y otra vez, mientras abrazaba a su novia y hundía su cara en sus pechos.

En un movimiento rápido, ella quedó contra el colchón y Jisoo sobre ella, pero esta apresada por Lalisa la cual se movía de un lado a otro, con la cabeza en el pecho desnudo de esta.

- Lisa... hey, Lisa.- Decía entre risas. No podía moverse, pero eso la hacía tan feliz, quería permanecer así todo el día, pero el sentimiento de culpabilidad la invandió de nuevo.- Lisa... Tengo que decirte algo.- Dijo como pudo entre risas.

La rubia se separó de inmediato y aflojó el agarre hacia la contraria, para mirarla a los ojos un poco preocupada.

- ¡¿Estás embarazada?!.- Exclamó de forma exagerada, pero luego explotó en risas de nuevo. Pero cambió su expresión al ver que su novia no reía.- Espera... ¿lo estás?, estoy bromeando Jisoo.- Concluyó completamente seria, como si fuera posible que ella lo estuviera. Ahora fue el turno de Jisoo en reír a carcajadas.

- ¿Cómo es eso posible?, solo he estado contigo, Lisa.- Dijo entre risas, pero la contraria levantó una ceja.

- Pero... ¿no dijiste que ya habías perdido la virginidad?.- Preguntó un poco confundida. Jisoo no entendió al principio, pero a los segundos reaccionó, abriendo los ojos de golpe.

- ¿Jisoo, eres virgen?.- Le pregunto la pelirroja, la chica se quedó callada.

Jennie y Jisoo intercambiaron miradas, la morena estaba indecisa en decirlo, pero la castaña le hizo señas con sus cejas para que lo hiciera.

One Night Stand - Lisoo/ChaennieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora