Bad Girl

Capitulo 26

Capítulo 26

Desperté unos minutos antes de qué llegáramos a su casa. Bostecé, estiré todo mi cuerpo y miré a Michael.

- Buenos días dormilona. - me sonrió.

- Buenos días mi amor. - dije un poco aturdida.

Me doblé un poco en la cama para mirar a Michael ya qué él se quedó en el sillón.

- ¿Cómo amaneciste? - me preguntó.

- Bastante bien. - le sonreí. - ¿Y tú? - pregunté insegura ya qué me sentía mal por haberle quitado su cama pero el agarre de su mano y que besará mis nudillos hizo qué me sintiera segura.

- Pasé la mejor noche porque estabas aquí, a mi lado. - entrelazó sus dedos con los míos.

- Sabes una cosa. - levantó su vista hacía mi. - Aveces no puedo creer que esté contigo. - contemplé su mirada.

- ¿Porque me dices eso? - preguntó confuso.

- Porqué.. Eres lo más hermoso que Dios pudo haber creado, eres tan dulce, tan especial, tan bueno, tan lindo. Aveces no puedo creer qué tú seas sólo mío. - evadí su mirada.

- Nena... - toma mi mentón y me encuentro sus ojos fijos en mí. - Tú me hiciste así.

- No, tu ya eras así. Tú me cambiaste a mí Michael. - al coger mis mejillas y sentir su maravillosa piel mis ojos se cierran de golpe. - Te amo tanto.

- Te amo más qué mi vida nena. - mis ojos se abren con una estúpida sonrisa dibujada en mis labios.

Mi mano viajó sobre su mano y le dejé un beso sobre la palma de su mano.

- Yo te amo con el alma. Gracias por estár en mi vida. Desde él primer momento que te vi creo que me enamoré de ti. - acaricié ahora su mejilla y Michael cerró sus ojos dejándose llevar de mis caricias. - Me siento tan dichosa al ser tú novia.

Su mirada chocó con la mía al momento de que abrió sus ojos al escuchar mis últimas palabras sobre lo qué le he dicho, sin soltar una sola palabra acercó su rostro y juntó sus labios con los míos, besó mis labios tiernamente y despacio, sentí sus besos demasiado cálidos y llenos de ternura. Rodé mis brazos en su cuello y una sonrisa tiré de mis labios encima de los suyos, lo aferré más hacía mi enterrando mis dedos entre sus cabellos, le murmuré cuánto lo amaba y deseaba, no iba a permitir qué nadie le hiciera daño.

Sus dedos hacen contacto en mis caderas enterrando sus dedos en mi piel desnuda sin darme cuenta ya estaba sentada en su regazo sin dejar de rodear su cuello. Sin dejar de besarlo, mis piernas estaban a cada lado suyo, necesitaba tanto de sus besos, de su sabor, de sus labios, su lengua, me adueñe de sus mejillas sin evitar enterré mis uñas en su piel sin lastimarlo, me levantó un poco de su regazo y él sonrió encima de mis labios, cogí su labio inferior mordisqueandolo un poco y él se estremeció. Me aleje un poco de él, sin quitar mis brazos en su cuello.

- Estás hermosa. - hizo mi cabello hacia atrás.

- No te imaginas cuánto te amo Michael. - acomodé mi mano sobre su mejilla acariciando cada centímetro de su rostro con las yemas de mis dedos, acaricié sus labios, sus párpados, su nariz, sus cejas. Regresé de nuevo a su mejilla. - Eres tan perfecto. Estoy loca por ti.

- Tú no tienes idea lo mucho qué te amo Alexandra, eres mi vida entera, tú me haces sentir cosas inexplicables que nunca pensé llegar a sentir, tú eres mi vida, solo dime que tengo que hacer para que te quedes a mi lado por siempre. Lo dejaría todo por ti, cambiaste mi vida. No puedo dejar de amarte. Promete que no me dejaras nunca pase lo que pase, por favor nena prometemelo. - me pide apretando mis caderas con sus manos, mi labio inferior se hunde adentro de mi boca.