Bad Girl

Capítulo 145

Capítulo 47

Aún sigo soñando con este hombre, su cuerpo se sigue moldeando a la perfección con el mío, me sigue llevando a la locura dónde no quiero bajar. Me ha hecho el amor en todas las formas posibles, en el suelo, de pie, no sé en qué momento mi cuerpo dejará de tener movilidad y caerá completamente rendido.

He llegado al orgasmo al mismo tiempo qué él, lo sigo teniendo encima de mí pero midiendo su peso para no aplastarme. Sus manos ocupan casi todo mi rostro, sus dedos me aprietan con fuerza mientras qué su pelvis se sigue moviendo, sube y bajaba haciendo fuerza en sus caderas con lentitud, traspasando un poco mi altura. Mi boca está semi abierta sin quitar la mirada en sus ojos, su mirada puesta en mí escuchando sus jadeos inconstantemente. Las gotas de sudor resbalan en todo su perfecto rostro, con algunos mechones alborotados aún con su trenza intacta, luce demasiado caliente. Sus labios se adueñan de mi boca para callar mis gemidos luego muerde mi labio inferior incesantemente atrayendolo hacía él, me vuelve a besar pero está vez me lleva a la locura metiendo su lengua poco a poco con tanta lentitud torturandome.

Deja un momento mis labios para qué yo pueda soltar un profundo gemido por el impacto de sus caderas, sus brazos estaban reposando a los costados de mi cabeza, se detiene por unos cortos minutos para medir su peso encima mío.

- Quiero escucharte gritar nena. - se le dificulta decirme y yo sólo pude asentir la cabeza.

Mirá hacía abajo para volver acomodar su miembro a una mejor posición, yo miré cada uno de sus movimientos, abre mis piernas y las acomoda en sus brazos, comienza a embestirme y escuché cómo nuestros cuerpos chocan con cada azote. Empecé a gritar, su rostro refleja lujuria y muerde con tanta fuerza su labio inferior qué un momento creí en llegarían a sangrar. Mis uñas afiladas comienzan a dejarle pequeños recuerdos en su espalda, no ha dejado de mirarme, mi garganta me pide a gritos de qué me detenga, mi voz se escucha desgastada. Mis piernas empiezan a temblar, estoy apunto de correrme.

- Quiero qué termines nena.

Me pide y nos giramos para quedar encima suya, me incorporo sólo para meter su miembro en mi entrada para luego recostarme encima de su pecho, su mano viaja en mi muslo y la sube hasta llegar a su abdomen plano acariciandome levemente, sus dedos acarician con suavidad la piel de mi pierna, su otra mano la hace un puño sobre mi cabello, me acomodo un lado de su cuerpo del lado derecho oprimiendo mis pechos con el suyo, recostandome en su hombro. Comienzo a moverme rápido, lo escucho cómo gime, cómo jadea, hago qué mis caderas se muevan al compás del suyo. Estira sus piernas para acomodarlas mientras qué las mías se acomodan a sus costados, besé su hombro con delicadeza y parte de su pecho, me da un fuerte apretón en mi muslo dejando su mano en esa posición.

Me incorpore para sentarme sobre su regazo para moverme mejor, me sostuve en su pecho para levantar mis caderas hacía arriba y luego bajar, sentí sus caricias en mis muslos y sus uñas se entierran en mi piel, no ha dejado de gemir desde qué llevo el control, verlo con su boca semi abierta mientras disfruta del placer me inspira a moverme mejor para él. Me vuelvo acostar encima de su pecho y él me rodea entre sus brazos, es la mejor sensación cuándo estoy estoy en sus brazos, me siento demasiado segura.

Mordisque su pecho, pase mi lengua en el, subí un poco la cabeza para llegar a sus labios y los atrape, nuestras lenguas se mezclan, es cómo si estuviesen en una guerra. Nos quejamos en silencio mientras nuestros labios seguían en contacto. Dejé su boca cuándo sus caderas empiezan a golpearme con fuerza, abrí mi boca y mis gemidos acarician sus labios, mis pecho se mueven cómo gelatinas por su impacto de cadera, estoy apunto de correrme. Pase mi lengua en sus labios principalmente en su labio superior, dejé de hacerlo cuando todo mi cuerpo comenzó a temblar, me había corrido y él conmigo.