Capitulo 88

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Capítulo 88

La cogí fuerte de sus muñecas tratando de calmarla cosa que no fué difícil. Ella intentaba de soltarse mientras qué gritaba para que la soltará. Me insulté mentalmente a mi mismo.

- Por favor relajate. - le rogué. - Respira hondo ¿vale? - ella asintió débilmente. - Venga, vamos, hazlo conmigo. - ambos respiramos hondo y soltamos el aire. - No dejes de mirarme. - asintió.

- ¿Como está? - preguntó Justin, era compañero de trabajo y amigo mío.

- No lo sé. - seguí mirandola. - Se quedó en shock, después creo que le dió un ataqué de pánico, y... ¿ahora Alex? - ella sólo me miraba no decia nada, ni siquiera parpadeaba. - Dime algo. - pude ver en sus ojos miedo, mierda. - Creo que la llevaré a casa.

- No puedes llevarla ahora a su casa.

- Lo sé, no iba a llevarla a la suya. - la cogi del brazo y la empujé un poco para qué andará.

Rodeé el auto, abrí la puerta del copiloto, y la metí dentro, le pusé el cinturón y cerré la puerta. Suspiré frustrado, los chicos me miraban.

- ¿Qué? - escupí.

- No debería haberlo visto, nos meteremos en problemas. - dice Pop.

- Ella no dirá nada Pop.

- Lo sé, pero basta que algo vaya mal contigo para que ella lo cuente. - dijo ahora Justin.

- Ya veré que haré joder. - pasé una mano por mi rostro. - Hablamos después. - abrí la puerta y me monté.

Me pusé el cinturón y arranque. Salí de ahí y me incorpore a la carretera dejando los almacenes atrás. Miré a Alex que seguia sin decir nada. Ni siquiera había expresión en su cara.

- Alex. - cogi su mano, pero ella la alejó de mi, me miró espantada.

- Has.. - movió su cabeza como si no pudiera creerse lo que iba a decir. - Has matado a mucha gente. - susurró.

- Te dije que a eso me dedico. - pisé el acelerador para llegar lo antes posible a casa.

- Ya no quiero involucrarme en esto...

Cerró los ojos y se acercó más a la ventana, cómo si estuviera huyendo de mi. Se qué la cage y ahora ella ya no me ayudará.

No tardamos mucho en llegar. Aparqué y salí del auto, esperé a que Alex saliera ya qué iba con lentitud. Cuándo salió la cogí del codo y caminamos rápido hacía la entrada, subimos las gradas rápidamente, y la llevé a mi habitación cuándo ya estuve dentro de ella dejé a Alexandra en el suelo, cerré la puerta y me acerqué a ella.

- Sam por favor.. no me hagas daño. - la miré, ella me miró.

- Alexandra no voy hacerte daño. - iba poner mi mano en su pierna pero ella se aleja. - Alex, no me temas.

- Quiero ir a casa, llévame a casa por favor, tengo miedo.. - había empezado a llorar.

- No voy a llevarte hasta qué te calmes y se qué me vas a ayudar a localizar a ese maldito. - ella volteo su rostro.

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