-¡Joel!- exclamó mi mejor amigo apareciendo en escena.
-Bueno... me tengo que ir.- dijo Erick.- Adiós Chris.... adiós rulosito.- se despidió alejándose.
-Bye.- respondió mi amigo.
Comencé a avanzar por el pasillo.-¿A donde vas? Todavía faltan 10 minutos para el inicio de la clase.- preguntó mi amigo.
-Tengo un asunto que tengo que arreglar.-dije.
-¿Que harás?- preguntó.- Juro que me das miedo cuando hablas con ese tono.- dijo siguiéndome.
Me dirigí hacia mi salón, tiré la puerta como lo hacen en una película. Ahí estaba Mateo rodeado de chicas como es de costumbre, apenas entré ellas dirigieron su mirada hacia mi... <<Hola, Joelito>>, decían con un tono dulce, no les devolví el saludo ya que solo estaba concentrado en mi objetivo.
-¿Que pasa chicas? Enserio les parece atractivo ese perdedor.- dijo con un tono de burla.
-Contigo quería hablar.- dije empujándolo contra las mesas.
-¿Que te pasa idiota?- dijo devolviendo me el empujón.
-¡Te lo advertí!- exclamé.- Te dije que si te acercas a las personas que quiero te las ibas a ver conmigo.- dije con un tono muy serio.
-Wow tranquilo amigo, solo fue un juego.- trató de excusarse.
-¿Solo un juego? Le diste de tomar infeliz.-grité.
-Tú no tienes porque meterte, es su vida y no la tuya, además, él ya no es un niño.
-Si lo es, tiene la edad de mi hermano.
-Entiendo que te preocupes por tu hermano pero no por ese mocoso...¿Acaso te gusta?- pregunto irónicamente.-Vamos perdedor, díselo a toda la clase.- todos me miraron, Christopher trato de interceder pero no se lo permití. -No voy a seguir perdiendo mi tiempo contigo...Te lo advierto por última vez, Vuelves a acercarte a los que quiero y te va a ir como en feria.- dije sujetándolo de la camisa.
-¡Suéltame perdedor!- exclamó.
-Estas advertido.- dije sentándome en mi mesa. Chris hizo lo mismo.-Oye, se la tenias jurada desde anoche.- dijo riendo a carcajadas.
-Pues si tarado, ¿Creíste que me iba a quedar con los brazos cruzados después de que a él lo indujo a tomar?- dije enojado.
-AJAM.... Que lindo, la mamá gallina defiendo a su pollito de ojos verdes.- dijo riendo a carcajadas otra vez.
-Quieres que te haga lo mismo que le hice a Mateo.
-No no no, gracias.. yo- yo paso.- dijo temblando.
-Jaaaaaaaaa... miedoso.- entró el profesor de historia y dejamos de hablar.
-Y bien alumnos... hicieron la tarea que les dejé ¿verdad?..... Tomaré ese silencio como un SÍ, pues bien... la encargada de la clase pasará por sus sitios a recoger sus tareas.
Saqué el resumen que había hecho y esperé a que Ximena pasará por mi sitio a recogerla.-Joe, tu tarea.- dijo tímidamente.
-Toma.- dije entregándosela.
-Gracias.- respondió.- Por cierto Joe... me gusta cuando sonríes de esa forma.-No sabía que decirle, creo que ella esperaba un <<También me gusta la tuya>> pero dije.- Gracias, es algo que hago de manera inconsciente.
-Si lo sé, siempre estas sonriendo..¿Sabes? te admiro por eso.- dijo alejándose.
-UHHHH... amigo le lates cañón.- dijo mi amigo.
-¿Desde cuando hablas así?- pregunté.
-¿No te conté?.....¿Te acuerdas de mi primo el que se fue a vivir a México?
-Pues sí, solíamos jugar con él todas las tardes.- dije con nostalgia.
-Pues está aquí, vino de visita y en casa la mayoría de veces anda hablando de ese modo y pues se me quedó wey.-dijo mi descabellado amigo.
- Ahora no solo tendré que aguantar a un chiflado sino que tendré que aguantar a un chiflado que se cree mexicano.- dijo con tono de lamento.
Pasaron las horas y era tiempo de regresar a casa, mis hermanos se adelantaron y tuve que irme a casa por cuenta propia. Cuando salí de la escuela observé a un auto color rojo con lunas polarizadas estacionado y ahora lo vi en movimiento, sospeché que tal vez me seguía a mi pero traté de pensar que iba por la misma ruta y nada más, lamentablemente me seguía a mi y cuando traté de alejarme de ellos uno de ellos me habló.
-Hey niño.- dijo bajando del auto.
-¿Que desea?- pregunté con temor. El tipo que bajó vestía de negro de los pies a la cabeza, era un hombre de aproximadamente 30 años de edad y de apariencia robusta.-Estudias en la secundaria que está a dos cuadras de aquí ¿Verdad?
-Si.- respondí.
-Conoces a un chico que se llama Erick uno de ojos verdes, un poco alto para su edad, delgado y co..
-¿Para que lo buscan?- pregunté.
-Ese no es tu asunto, ¿Lo conoces o no?- Dudé al responder, no me quería meter en problemas y mucho menos meterlo en problemas a él pero si mentía y lo espiaban, sabrían que lo conozco y muy bien.-SI, lo conozco.
-¿Sabes si ya salió de clases?
-No, no sé, no vamos en el mismo grado así que no puedo afirmarles nada, buenas tardes.- dije alejándome.- En todo lo que restaba del camino, no pude dejar de pensar en esos tipos y en las posibilidades de que le hicieran daño a él, tenía que hacer algo para que esos tipos lo dejaran en paz, para que él pueda ser feliz de una vez por todas y que dejara sus miedos atrás.
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Amor en Verano. (Joerick)
Teen FictionJoel, un chico tímido que va en busca de sus sueños, en sus planes no está enamorarse y menos de un chico problema al cual tendrá que sacar de muchos aprietos y buscará respuestas del porque Erick es tal y como es y porque esta metido en tantos líos...