Amor en Verano. (Joerick)

¿Salud?

-¿Oye estás bien? - preguntó mi amigo siguiendo mis pasos. - Siempre y cuando vamos a mi casa ¿No? Tengo bocaditos y alguna...
-No, iremos a otro lugar.
-¿Qué? ¿A donde? - preguntó extasiado.
-Solo sígueme. - dije con una sonrisa fingida.
Caminamos por unas cuadras que llevaban de camino a casa de Christopher pero nos decíamos en una de ellas hasta llegar al dichoso club donde Erick se desaparecía por horas.
-¿Que hacemos aquí?- preguntó mi amigo.
-¿No es obvio? Venimos a divertirnos.-dije entrando al lugar. Christopher me tomó del brazo. - ¿Que estas haciendo? Tú no eres así.
-¿Y que más da si no soy así? Al fin y al cabo uno trata de dar todo de si y nunca nada sale como uno lo planea, esto no es planeado así que saldrá mejor d elo que esperamos. - Chris me miró con desconfianza. - Anímate mi amigo, confía en mi.... Divertamonos como casi nunca lo hacemos..... Juntos. - dije tirándole del brazo.
El lugar estaba como de costumbre, con una nube de humo producida por los cigarrillos que eran fumados con facilidad como si se tratara de comerse un dulce. Christopher consiguió una mesa muy cerca al escenario, digamos que a escasos centímetros de el. Una mesera se nos acercó a ofrecernos sus bebidas.
-No gracias. - dijo Chris sin dejar que ella nos ofrezca algo de beber.
-Oye no seas mal educado. - repliqué.
-Perdone pero sabemos a lo que viene y no queremos tomar ni una gota de alcohol.
-¿Nos puedes traer una botella de tequila?- ordené.
-Si claro.
-Gracias guapa.- se retiró. Chris no dejaba de observarme boquiabierto.
-¿Y ahora que pasa? - le pregunté sin mirarlo.
-Juro que no te entiendo, dices que detestas estos lugares y mírate o mejor dicho mirarnos, tú yo estamos aquí, en un lugar donde se drogan, beben, fuman y hasta hay prostitución. - me dió un sermón tan intenso que no quería escuchar.
-Si quieres puedes irte, yo no te obligó a quedarte aquí, conmigo.
-Sabes que no puedo hacer eso, eres mi mejor amigo y aunque no me agrada tu accionar, lo haremos juntos. - dijo tomando su mano tan fuerte como pudo.
-Gracias bro,sabía que podía contar contigo. - dije tratando de mostrar una sonrisa.
-¡Que lo disfruten! - la amable mesera trajo la botella de tequila con dos pequeñas copas.
-Gracias guapa. - le guiñé un ojo, ella solo se sonrojó.
-Y ahora andas de galán. - comentó.
-Mi estimado amigo, siempre ando así solo que no lo notas. - dije jactandome de ello.
-¿No te parece que un tequila es una bebida muy fuerte para alguien que nunca a tomado? - dijo él sirviendo las copas.
-Entonces no tomes. - le dije atrayendo la copa a mi.
-Ja-ja-ja muy gracioso.... No lo digo por mí, mente de pollo. - atrajo la otra copa hacía él.
-¿Lo dices por mi?- pregunté indignado.
-¿Hay alguien más aquí? - arqueó la ceja.
-Por si no lo sabes he bebido en el quinceaños de Lucía. - presumí.
-Y dime... ¿A cuantos quince años fuiste? - apoyo un codo en la mesa.
-Pues a unos veinte.
-Y de los veinte solo bebiste en uno... ¿Quieres que te recuerde porqué?
-No gracias. - dije tomando la copa decidido a beberla de una vez. Hice muecas de desagrado a lo cual Chris rió como un loco. - ¿De que te ríes? - pregunté enfurecido.
-De tu resistencia al alcohol y como decía, la fiesta de Lucía fue el primer quinceaños al que fuimos, recuerdo que bailamos y cuando teníamos una sed insaseable nos ofrecieron vodka... ¿Recuerdas quien fue la persona que estaba apunto de desnudarse si yo no lo impedía? ¿Sabes cuantas copas se tomó?
-Yo no iba a hacer eso pero tomé mucho esa noche. - traté de excusar me.
-Joel solo te tomaste cinco copas. - dijo en son de burla.
- ¿Vas a tomar o tomo yo solo? - dije sirviendome otra copa.
-Ya voy, pero tranquilo que te vas a marear si sigues tomando de un solo trago.
-¿Que sugieres?
-Que tomemos con calma, no hay prisa.... ¿Salud? - alzó su copa.
-Salud mi hermano. - chocamos ambas copas.