Falta un mes exacto para el cumpleaños de mi chiquilla y me quiero poner manos a la obra de una vez, Jaype y Janneth se contagian con mi entusiasmo para la fiesta de Emily, que es la alegría de esta oficina, y todos coincidimos que tiene que ser la fiesta más fabulosa del mundo.
Y lo más fabuloso de todo es que hoy es el último día de escuela de mi pequeña, por lo que pasará más tiempo aquí y podrá ayudarnos a montar todo lo de su fiesta, a su gusto y todo lo que ella quiera, su padre me ha dado luz verde para que cumpla todos sus deseos, pues es la primera fiesta de cumpleaños que le hacen. Es decir, todos estamos dichosos de celebrar los nueve años de mi niña.
Corriendo recojo todo y me voy a buscar a Emily a la escuela, se me hace tarde, pero con mi Fridamóvil llego a tiempo, la veo salir y como se despide de todos sus amigos y les dice que los invitará a su fiesta de cumpleaños, al verme corre a mis brazos, la mimo y ella sonríe. Ya los demás se han acostumbrado a tenerme por aquí y no me miran como bicho raro, eso me alegra porque estaba a punto de explotar.
—Estoy de vacaciones mamá, ¡qué guay! —Sonrío mientras le coloco el casco.
—Lo estás princesa, ahora vamos a la oficina y luego te dejaré en casa de tu abuela, Amaya también se quedará contigo allí.
—¡Súper! —dice emocionada —¿Otra noche de amigos?
No, noche parejitas, Gina y Ernesto, Isaac y yo. Pero obviamente soy la única que sabe eso y es súper obvio que mi pequeña tampoco puede saberlo.
—No creo bebé. Tu abuela quiere compartir con sus niñas porque Gina no estará en casa esta noche.
Asiente con una sonrisa y nos subimos a la moto, como siempre, manejo con cautela y Emily se sujeta con fuerza de mi cintura.
—Yo creo que mi tía tiene novio y no quiere decir —me dice Emily en el camino y se ríe —Tal vez es un ogro como Shrek y le da pena presentarlo.
Me río sin poder evitarlo, si supiera ella que el novio de su tía es muy simpático y ella misma ya le dice tío por ser el mejor amigo de su papá.
—No digas eso cariño, nadie debe apenarse de los otros por su belleza física, la verdadera belleza está en el corazón ¿vale? Esa es la belleza que importa.
Asiente mientras estaciono la moto.
—Lo siento mamá, pero, ¿tú crees que mi tía tenga novio? yo quisiera que sí, quiero que alguien la quiera y le dé besitos como tú lo haces con papá, eso es muy romántico.
De qué me habla esta loquilla, mientras nos bajamos de la Fridamóvil continúo riéndome de Emily y las loqueras que dice. Que su tía necesita amor, tener hijos y bla, bla, bla.
—¿Qué sabes tú lo que es romántico niñita loca? No sé si tu tía tiene novio, pequeña, pero es feliz como esta ¿no crees? —Lo piensa un poco y luego asiente con una sonrisa —Bien, ahora dejemos de hablar de ella que le han de picar los oídos.
Le hago cosquillas en su barriguita haciéndola reír, entramos juntas al negocio y se arma el bochinche, Jay empieza a jugar con ella y Janneth y yo comenzamos a reírnos, en este local hay pura gente que le falta un tornillo, eso es bueno porque somos felices así. Aprovecho que Emily está entretenida y llamo a su papá, le aviso que ya llegamos y que todo está bien, con un beso me despido y le hago una oscura promesa sexual para esta noche, estaremos solos y he de aprovechar.
Apenas cae la noche nos apresuramos para cerrar el negocio, los cuatro estamos agotados, el trabajo es cada día más y más demoledor y mañana es la fiesta de aniversario del Bar de Juancho, y hoy trabajamos en eso, por suerte Emily fue una mano extra para dejar todo listo.
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¿Qué diablos, Frida?
RomanceLa historia de amor entre una chica extrovertida y un padre soltero y amargado. ¿Qué diablos Frida? Fue lo que dijeron todos al saber que me mudaba, dejaba la gran metrópolis para empezar mi vida en un pequeño, pero acogedor pueblo, ya no quería ser...