Esta es una historia donde tu y Shinichi os conocéis ya desde pequeños...pero que pasará cuando un día desaparezca...
Como ya sabéis los personajes no son míos, sino de Gosho Aoyama
Me encontraba con Sonoko y con Conan de vacaciones, habíamos alquilado una habitación en una posada. Allí trabajaban dos personas, un chico de nuestra edad y un hombre mayor. El chico de nuestra edad nos advirtió de que tuviéramos cuidado, especialmente a Sonoko ya que había un asesino que andaba suelto y este solo iba a por las chicas de pelo castaño claro.
Sonoko se asustó, esta no sabía que decir. Decidió no darle al final mucha importancia, las primeras dos noches estuvimos viendo los fuegos artificiales y comiendo en puestos. Al día siguiente estuvimos en la playa un rato, allí conocimos a un chico, él nos invitó a tomar algo en la parte restaurante de la posada donde nos hospedábamos, este quería ligar con Sonoko.
Conan notaba a ese chico raro.. Esa misma noche cuando Sonoko fue al cuarto vio alguien que entraba por la ventana pero no puedo ver su rostro, este la atacó y ella intentó defenderse con un mordisco.
Cuando pudo esta gritó, en ese momento yo y Conan nos encontrábamos con el chico de nuestra edad. Corrimos todos hacia la habitación, cuando llegamos Sonoko me abrazó.. ella estaba temblando de miedo.
Sonoko: Tn.. ¡Alguien entró por la ventana y me atacó! - dijo ella aterrorizada.
Chico de nuestra edad: Será mejor que os cambiemos de habitación.. - dijo tomando nuestras maletas.
Tn: Si por favor.. - dije seria.
Él nos llevó las maletas a otro cuarto, al final no salimos en toda la noche teníamos planeado visitar algún que otro puesto. Durante la noche Sonoko no pudo dormir bien así que cuando quedamos con aquél chico del otro día ella se quedó en el coche durmiendo mientras que nosotros comíamos con este.
De repente vemos como su coche empieza a andar, Conan y yo salimos de allí corriendo.. Al llegar cerca del coche Conan se agarró a una de las puertas de este y yo me agarré a las barras de arriba que tenía.
Pegué un salto hasta quedarme de cabeza, tenía pensado romper la ventana donde se encontraba ella.
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Con fuerza, rompí el cristal con la rodillas, pasé mi mano por la ventana rota y quité el pestillo.
Sonoko: ¿Tn? - dijo despertándose.
Abrí la puerta del coche y la miré con pánico.
Tn: ¡Sonoko corre agárrate a mi! - dije ofreciendo mi mano.
Esta se agarró a mi, me tiré a la carretera al igual que Conan. El coche se cayó por el barranco.. El chico este vino a preguntarnos como estábamos.. Otro hombre vino corriendo hacia nosotros para ver si todos estábamos bien.
Chico: ¡Ese debe de ser el asesino! - Me puse en alerta, mientras que este y Sonoko huían. - Por aquí no nos encontrarán. - dijo en mitad del bosque.
Sonoko recordó que la persona que vio en su cuarto aquella noche tenía una mordedura en su tobillo izquierdo, hecho por ella misma. Esta se acercó al tobillo de este poco a poco, le bajó el calcetín.. Ahí estaba la mordedura.
