NEVER FORGET YOU

XXV

Nuevo día en la agencia de héroes, todos se preparaban para sus actividades programadas y salían con sus equipos para cumplir su misión. 

Lisa y Noah se presentaron en una escena de robo armado, en la cuál también estaba el amigo gritón y malhumorado de la pelinegra.  

Ambos líderes de las agencias coordinaron y dieron inicio a su plan para capturar a los ladrones de bancos. 

Black Eclair explicó de que trataba su peculiaridad y les entregó una daga a cada uno de los estudiantes para poder ubicarlos en caso de peligro. 

Su don era la teletransportación, y las dagas que tenía lo ayudaban a movilizarse mucho más rápido, ya que tenían una parte de su esencia que le permitía viajar sin antes haber estado en el lugar. 

— ¿Porqué no llegan esos bastardos? — chistó el rubio con molestia por estar esperando en la azotea de un edificio cercano al banco recientemente asaltado, sin realizar un ataque. 

— No lo sé, dimelo tú. — bostezó el otro chico, activando su kosei para confirmar la situación. — Esperen, ahí están. 

Las venas en su sien se hicieron más gruesas, el joven delgado se posicionó tomando su rifle y apuntó al objetivo para da la señal. 

— Hazlo de una maldita vez — le dijo el de ojos rubíes con impaciencia. 

— Espera un poco Sr. Pantalones. 

— ¡¿Qué dijiste ojos llorosos?! — gruñó, deteniéndose al escuchar el disparo que indicaba el inicio del plan. 

Lisa suspiró, cruzando los brazos al saber que intentarían atacarlos primero. Los estaba esperando ansiosa y con una sonrisa triunfante. 

— Chicos dejen de pelear. — dijo Lisa intentando calmar la situación con sus compañeros. 

— ¡CÁLLATE NEKO-CHAN! — gritó el rubio explosivo, haciendo que la pelinegra perdiera la paciencia. 

Los villanos aparecieron como lo habían previsto, con los rostros ocultos  y el aura soberbia que no podían cubrir ni con sus máscaras. 

— Idiotas. — avanzó con paso decidido, prendiendo fuego a todo lo que estaba a su paso. Abatiendo a los ladrones en pocos segundos sin inmutarse por la cantidad de ellos. 

Sacudió el mechón de cabello que caía por su hombro y miró nuevamente a sus compañeros, que la miraban incrédulos y con la boca abierta. 

— ¿Acaso debo hacerlo todo? — preguntó con sarcasmo mientras daba el último golpe al delincuente que intentaba sorprenderla. 

Los muchachos negaron con la cabeza, incluyendo Bakugou, aunque el la maldecía en su mente. 

— ¿Qué esperan entonces? — los siguió reclamando con la fuerza de su mirada color esmeralda, y con el tono cortante en su voz. 

 Despertar a la "belleza aterradora" no era una buena idea. 

— Es un de-demonio. — dijo uno de los delincuentes, intentando levantarse sin éxito. 

— Quizás. — sonrió sarcástica, visualizando a los profesionales, quienes habían capturado a los demás asaltantes. 

Best Jeanist le llamó la atención al rubio por ser muy impulsivo, y Black Eclair a Noah por seguirle. Lisa no se salvó y también recibió un reclamo por quemar toda la azotea. 

Aun les faltaba mucho por aprender. 

— ¡Nos vemos luego Baku-explosivo! — la fémina agitaba su mano despidiéndose de su amigo explosivo, para después sacar rápidamente su celular y tomarle una foto sin que se diera cuenta.

«Debo enviarle esto a Kirishima.» pensó riendo por los pantalones que el héroe profesional le había obligado a usar a Bakugou. 

El día laboral no terminaba, aun quedaba una misión en la noche.