Ya habían pasado varios días tras aquel acontecimiento con el asesino de héroes, aquel asunto estaba superado. Los jóvenes se preparaban para evitar nuevos sucesos parecidos y continuaban su entrenamiento para convertirse en lo que aspiraban.
Un nuevo mañana, nuevo entrenamiento, nuevo sufrimiento.
— ¡Nadie les digo que se detengan, mocosos del demonio! — gritó Angela a todo pulmón, haciendo un fuerte ruido con sus zapatos.
Parecía un militar.
Los chicos aspirantes a héroes corrían bajo el intenso calor del sol, agotados por el arduo entrenamiento supervisado por sus susperiores.
— No sabía que Angela-san era tan estricta. — habló agitada la chica de ojos verdes, sin parar de correr, con algunas gotas de sudor sobre su rostro y su cabello alborotado.
— E-es una bruja. — respondió el castaño, sin poder más. Dejando caer su cuerpo como un saco de arena. — Quiero dormir.
Lisa lo tomó del brazo, y empezó a arrastrarlo para terminar el entrenamiento. Si él no terminaba ella también estaría afectada, después de todo eran un equipo.
— ¡Mueve tu perezoso trasero, Noah! — dijo sorprendiendo al joven tirado en el suelo y a sus demás compañeros. Todos abrieron la boca con sorpresa al ver el cambio repentino de su actitud.
La "otra Lisa", quería apoderarse de la situación para darles una buena golpiza y ver el mundo arder ante sus pies.
— Está bien Venus. — susurró, poniéndose de pie y limpiando los rastros de tierra que habían en su ropa. — Actuaste como la rubia explosiva. — rió.
"¿Enserio? ¿Parecía un perro rabioso?"
Pensó avergonzada, moviendo la cabeza en busca de una respuesta que nadie daría.
Ambos terminaron de correr, y fueron a beber el agua que entregaba Angela con una sonrisa radiante y encantadora.
Si, cambiaba mucho cuando se trataba de entrenar.
Descansaron a la hora del almuerzo, en un restaurante conocido por Hideki, disfrutando de la comida japonesa con emoción. Siendo el Noah quien lo disfruto más, al sentir nuevos sabores en su paladar.
— Dude. ¡This is awesome! — le dijo a Hideki en su lengua natal, con más energía que nunca.
El hombre solo rió al ver sus ojos iluminarse por primera vez, despeinando sus cabellos marrones con el cariño de un padre.
Lisa sonrió con nostalgia, recordando al hombre que la cuidaba todas las veces que se lastimaba la cabeza al tropezar.
El cielo empezaba a sonrojarse por la caída de la noche, las calles continuaban siendo pobladas y el ruido era continuo pero soportable, todo parecía andar sin ningún problema.
— Hawkeye, ¿cuál es la situación?
Se detuvo, intentando ampliar su campo visual. Las venas al costado de sus ojos se ensancharon y su expresión cambió radicalmente.
— ¡ Monstruos horribles esta-
no alcanzó a terminar su oración cuando la explosión causo pánico en los ciudadanos.— Holy shit. — pronunció el canadiense, abriendo los ojos ligeramente al estar frente aquella bestia horrorosa.
— ¡Noah-kun, tu vocabulario! — le reprendió el rubio mientras luchaba contra la criatura.
— Señor Black Eclair, evacuaré a los ciudadanos. — dijo Lisa, recibiendo la aprobación del héroe.
Y así fue, los civiles salieron de la zona de peligro y los profesionales llegaron a defender su ciudad.
La chica realizó una mirada rápida a su alrededor, para asegurarse que todos estuvieran fuera del área de combate.
— Un niño. — vocalizó con preocupación, corriendo hacia el auto en el que estaba atrapado. Dejó salir un grito ahogado cuando reconoció al niño de cabellos azules, que estaba inconsciente por el humo que había respirado.
Rompió la ventana del conductor de una patada y alzó con cuidado el pequeño cuerpo. Salió del vehículo, y se propuso a llevarlo a la zona de heridos, pero fue impedido.
— No es lindo verte, Nomu.
Susurró frunciendo ligeramente el ceño ante el rugido de la bestia propuesta a atacar. Apuntó con su brazo en alto, y de su extremidad surgieron poderosas llamas, que cubrieron el cuerpo de quien queria hacerle daño.
El fuego seguía vivo, ardiendo el cuerpo caído del ser inhumano.
— ¡Lisa! — oyó su nombre a lo lejos, reconociendo la voz de su tutor que peleaba con el Nomu en el aire.
«Increíble.» pensó, viendo los rayos que usaba para llegar a el.
— Quema su cerebro. — indicó al terminar con el causante del alboroto.
— Lo hice Sr. Todoroki, asi no podrá regenerarse.
— ¡Ha! Bien. Fuiste lista. — sonrió de lado, mostrando los dientes y sus flamas danzantes en su rostro.
Él estaba ahí pero, ¿dónde estaba Shouto?
— Si preguntas por Shouto, él se fue corriendo en busca de alguien. — señaló el lugar por el que había llegado, para después seguir con la eliminación de aquellas bestias.
«¿En dónde esta?»
Siguió el camino para dejar a Roy, el niño inconsciente que llevaba en brazos, en la zona segura.
— ¡Te encontré! — dijo Noah, tomándola por espalda. — Hideki me dio esto, ambos tenemos permiso para pelear. — le entregó una daga que guardaba en su bolsillo.
— ¿Aún no logran terminar con todos? — sonó preocupada.
— No. Pero el chico de los dos colores, esta en un callejón a unos tres edificios desde aquí. — se detuvo para respirar y recargar las armas que portaba. — Yo llevo al niño, tu ve a ayudarlo, después iré con los profesionales.
— Roy tiene dos hermanos de casi la misma edad, si los encuentras pregunta por sus padres, pero antes llévalo a...
— Lo entiendo, ve ya.
— No demores. — respiró, con un mal presentimiento, dirigiéndose a donde el chico había mencionado.
«¿Dónde estás Shouto?»
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NEVER FORGET YOU
FanfictionHayami Lisa ha conocido la grandeza, y a probado el amargo sabor de la derrota. Ella ha escuchado los empalagosos halagos de sus aduladores, y a soportado el odio irracional de esas mismas personas que decían amarla. Hayami Lisa ha saboreado las d...