38- Jack Johnson

802 24 0
                                    

-Vale, si todo está claro empecemos con el plan- dije.

-Yo lo he entendido, pero repítelo por si a Sam se le ha pasado algo- me respondió Gilinsky.

-Yo lo he entendido todo...- dijo el rubio teñido confundido, pff nada nuevo.

-¡Que lo repitas Maeve!- gritó esta vez el moreno asustándome. 

-Está bien, relájate- pasé un mechón de pelo detrás de mi oreja y repetí- Hoy es el cumpleaños de Johnson, así que con su madre vamos a preparar una fiesta sorpresa. Para que podamos organizar todo, vais a llevároslo a jugar un partido de baloncesto. Pero Cameron, Hayes, Shawn y Taylor os quedáis a ayudar con las decoraciones y la tarta. ¿Ahora sí?

Todos asintieron, y a "todos" me refiero a todos los chicos de Magcon. Me había tomado la molestia de llamarlos a todos ellos para hacer el cumpleaños 23 de J inolvidable. 

-¡Oye! No puedes hacer eso- se quejó Nash- No puedes dejar a Cameron aquí y mandarme a mí allí, ¡No tienes derecho a separar Cash!- chilló esta vez, a continuación el resto de simios aulló apoyando lo que el ojiazul acaba de decir.

-A mí me da igual- concluyó Shawn.

-Me decepcionas bro- le dijo Taylor con una mano en el pecho- ¿Qué hubieras hecho si nos hubieran separado?

-¿Quejarme?

-¿Lo afirmas o lo preguntas?

-¡Ya está bien! He mandado a Jack a por leche así que está a punto de llegar, a prepararse todos. 

Los cinco minutos antes de la partida de los chicos fueron horribles. Había ropa volando por todo mi apartamento; calcetines, calzoncillos, camisetas, botellas de agua...                                           Sorprendentemente, nada me dio. Y gracias a Dios que la fiesta iba a ser en el apartamento de J, sino la llevábamos clara. Además me niego a recoger la ropa interior de los chicos, a saber donde han estado. 

-¡Hey, chicos!- dijo Jack entrando con un paquete de galletas, voy a matarlo- ¿Qué hacéis aquí? 

-Estaban cerca y han decidido ir a jugar un partido, ¿Tú que haces con las galletas, si te había pedido leche?

-Es que me apetecían de esta marca para mojarlas en la leche. 

-¿Qué leche?

-Oh... Vuelvo a la tienda, regreso en un segundo.

-¡No!- lo paré- Ve cuando acabéis el partido. No es urgente. 

Asintió, se cambió y salieron todos juntos. Nada más ver como se alejaban, cogimos todo lo necesario para después dirigirnos a casa de Johnson.

*****

-Ha quedado todo muy  bien, Maeve. Estoy agradecida de que seas la novia de mi pequeño Jackie- me dijo mi suegra. 

-Bueno, pequeño- pequeño...- dijo Cameron, quien se encontraba junto a Nash en el sofá. Sí, al final Hayes había ido de parte de su hermano. Pero bueno, Taylor, Cam y Nash se podrían haber ido; el único que ha ayudado realmente a sido el pobre Shawn. Se va a llevar un gran trozo de pastel, se lo merece. 

-Tú calla- le dijo la señora dándole un zape en la nuca. Mi teléfono sonó interrumpiendo el momento; era un mensaje de Jack. Decía que acababan de dejar la leche en mi apartamento y que iban a ir al suyo para beber algo. 

-Todos preparados, ya vienen. 

Los familiares también habían venido, todos estábamos escondidos. O medio escondidos mejor dicho. Al no haber mucho espacio, lo único que nos escondía era la oscuridad. Aun así, era una bonita sorpresa. 

El silencio reinaba, haciendo que cada pequeño sonido se escuchara ensordecedor. Se oían las pisadas acercándose a la puerta, la llave en la cerradura dando vuelta, la luz siendo encendida. 

-¡Sorpresa!- un grito colectivo lo sorprendió haciendo que se le cayeran las llaves- ¡Felices 23 Jack!

Los aplausos, besos y abrazos no se hicieron esperar. Los vasos iban siendo llenados y la tarta repartida. Yo estaba en una esquina hablando con una de sus primas cuando unos brazos rodearon mi cintura.

-Casi mejor os dejo solos- dicho esto, la rubia se fue dejándonos solos.

-¿Qué tal cumple añero? ¿Te están sentando bien los 23?- le dije dándome la vuelta en sus brazos, pasando los míos por su cuello. 

-De maravilla, además creo que va ha acabar mejor...- unió nuestros labios acercándome más a él.

-No vamos a darles a tu familia y a tus amigos un espectáculo- dije separándome- es hora de los regalos, luego seguimos- finalicé al ver su carita de perro mojado.  

-Eso espero...

Cada regalo era más ridículo y divertido que el anterior, hasta que el de los chicos casi hizo que a su madre le diera una ataque: cinco cajas de condones. Hurra. 

-Para esta noche, chicos- dijo Skate- espero que ninguno de vosotros se quede aquí hoy, va ha ser una noche movidita. 

-Además son muy ruidosos- completó Shawn.

-Me has decepcionado amigo, dame ese trozo de pastel- le dije al canadiense. Este se metió lo que quedaba en la boca y lo masticó con la boca abierta.    

-Es que, en el último hotel me tocó la habitación de al lado y no pude pegar ojo...

-Eso es porque no estabas ocupado- el comentario de una de las primas hizo reír a todo el mundo, menos a Shawn. Juro que jamás lo había visto tan rojo. 

*****

La noche acabó muy bien, todos se fueron y Jack hizo que me quedara con la excusa de que "ya era tarde". También me hizo ayudarle a recoger todo. Rata. 

-Todavía no me has dado mi regalo- dijo besando mi cuello y apretando mi vientre.

-Creía que prepararte una fiesta sorpresa y cederles a tus amigos mi casa era suficiente regalo...- dije echando mi cabeza hacia un lado.

-Yo llevo todo el día pensando en otra cosa...- me giró en sus brazos y me besó fuertemente. 

Como ya he dicho, la noche acabó muy bien. Además, no se si fueron los besos en el cuello o los condones con sabores los que me hicieron aceptar su invitación de mudarme con él. Solo espero que su madre no empiece a pedir nietos. 

-Sabes, deberías saber que piensas en alto muchas veces- comentó el rubio a mi lado, lo único que nos tapaba era una fea sábana gris- ¿No quieres tener hijos?

-Sí, claro que sí. Pero más adelante, cuando esté preparada.

-Yo te veo preparada ya...

-Jack tienes 23, y yo igual. Es muy pronto... 

-Pero G ya está esperando una niña, ¿No quieres que sean como nosotros?

-Eso es chantaje- me quejé.

-Da igual... Entonces- dijo posando su cuerpo sobre el mío- ¿Ponemos uno encargo en el horno?



One shots multifandomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora