67- Hero Fiennes-Tiffin

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—Sois unas capullas— les dije— ¿Por qué no me lo decís? Os juro que no se lo cuento a nadie.

—Que no te lo podemos contar Mel— me respondió Karen.

—Es por tu propio bien, creerme— la apoyó Poppy—. Si tuviera la oportunidad de no haberlo sabido, no la hubiera cogido.

—No ayudas idiota— le dijo borde la morena—. La cosa es que no tienes porqué saberlo. Es una tontería.

—Pues si es una tontería dímela— les dije, pero ellas volvieron a negar—. Entonces ya nos veremos.

—¿Luego te vienes a cenar, no?— preguntó Karen, yo asentí—. Pues nos vemos.

Me despedí de ellas y salí del instituto para coger mi usual camino a casa. Ya iban a empezar las vacaciones de Navidad y ya habíamos hecho los últimos exámenes por lo que íbamos a ir a celebrarlo a un restaurante chino.

—Estoy en casa— grité una vez cerré la puerta y tiré las llaves en un bol que teníamos en la entrada— ¿Hay alguien?

—Sí, Melody. Estamos en la sala— contestó mi hermano. Espera, ¿estamos?

—Si estáis haciendo cosas inapropiadas parad, que voy a entrar— dije antes de girar por el pasillo.

—Hola, Mel— saludó Hero, sin apartar los ojos de la consola.

—No somos gays hasta donde yo sé— comentó mi hermano— no creas que solo pienso en echar polvos.

—¿Te quedas?— preguntó su amigo.

—Voy a mi cuarto, tengo que pensar lo que voy a llevar a la cena de luego— le contesté saliendo de la habitación para dirigirme a las escaleras.

Se escuchó un chillido de niña y un golpe. Volví a bajar corriendo y vi como mi hermano se encontraba sobre su amigo cubriéndole la cara con un cojín.

—¿Qué ha pasado?— pregunté, ni hermano me sonrió y se quitó de encima del moreno.

—Hola, Mel— volvió a saludar Hero.

—Que pesado eres— le contestó el otro—. Solo estábamos jugando.

—Una guerra de almohadas— complementó su amigo.

—¿Quien de los dos ha soltado ese grito de niña?

Víctor señaló a su amigo, mientras que Hero se señaló a sí mismo. Negué y volví a subir a mi habitación. Chicos, nadie los entiende.

Abrí mi armario para buscar algo que ponerme. El vestido floreado que mi abuela me había regalado deslumbró. Sonreí y lo descolgué. No me gustaba llevar vestidos, menos en invierno; pero el restaurante era calentito e íbamos a ir en coche. No iba a pasar frío.

—Mel, nos vamos a una fiesta— dijo mi hermano entrando a mi habitación.

—Yo tengo una cena con mis amigas— me respondí—. Subeme la cremallera, Víctor... ¿Víctor?

—¿Te pasa algo?— dijo Hero parándose en mi puerta. Le di la espalda dándole a entender lo que necesitaba.

Se acercó lentamente, sentía su aliento chocar contra mí nuca. Posó una mano en mi hombro descubierto y con la otra subió la cremallera.

—Gracias— me dije dándome la vuelta, él sonrió y apartó un mechón de mi pelo.

—Tío, nos vamos ya— el grito de mi hermano nos sacó de nuestro trance.

—Ya nos veremos— salió sin decir nada.

Me quedé allí parada por Unai momentos. Escuché el portazo de la puerta principal, indicándome que habían salido.

Cogí mi teléfono y llamé a Karen. Sin señal. Supuse que Poppy nos llevaría, así que la llamé. Pero nada, saltó en contestador. Mi hermano se había llevado el coche y mis amigas estaban desaparecidas.

Maldecí. Tenía quince minutos para llegar a tiempo al restaurante. Sabía que mis amigas no me esperarían; así de buena gente son. Me puse una sudadera de mi hermano, sabía que hacía frío y solo con el vestido me iba a helar. Me colgué el bolso del hombro y salí.

El camino fue horrible, pero mereció la pena. El chino olía de maravilla y la calefacción estaba a tope. Busqué a mis amigas pero no estaban, aún no eran las diez.

—¿A quien buscas?— me preguntaron. Giré y me encontré con unos ojos verdes mirándome mientras una sonrisa se formaba en sus labios.

—¿Qué haces aquí?

—Cenar con mi cita— cogió mi mano como si nada y los dirigió a una mesa.

—¿Qué está pasando, Hero?— le dije tomando asiento. El cocinero estaba frente a nosotros, o sea que estábamos al lado del otro. Demasiado cerca.

—Estamos teniendo una cita— lo miré incrédula—. Hemos planeado esto con ayuda de tus amigas.

—¿Cómo que hemos? Víctor a...

—Síp. Sabe cuánto me gustas y sabía que jamás te iba a pedir una cita.

—Estais fatal.

—Ya pero no te has ido, ni piensas hacerlo.

Reí y esperé a por el primer plato. Jamás pensé en salir en una no- cita con el mejor amigo de mi hermano, aunque tengo que admitir que fue muy divertida. Sobre todo cuando el chef nos lanzó gambas, yo cogí tres con la boca mientas que Hero las cogía con la mano por miedo a que quemasen.

—Ha estado bien— admití una vez salimos del restaurante—. Aunque he tenido que venir andando pasando un frío de cagarte y me he enfadado con mis amigas.

—Bueno, eso no importa— dijo tranquilo—. Ha salido bien el plan, así que el resto solo son cages del oficio.

—Tú tienes problemas mentales— le dije riendo—. Oye ¿Y a donde han ido mis amigas y hermano?

—A una fiesta, ¿quieres ir?

—No, prefiero quedarme en casa— me miró y sonrió pícaro—. Ni lo pienses.

—¡Oh, vamos! Sería una estupenda forma de acabar la noche— dijo poniéndose frente a mí cogiendome por los codos.

—No pienso acostarme contigo— le dije sería. Nos pasamos discutiendo todo el camino hasta mi casa, al final tuve que dejarlo entrar pues me dijo que iba a quedarse a dormir con Víctor—. Buenas noches.

—¿Quieres ver una película?

—¿Enserio? Qué truco más viejo— le dije sin levantar la vista de mi teléfono.

No dijo nada más, oí como cerraba la puerta y sus pasos. Pero estos no parecían alejarse, sino que parecía que... Oh, se había metido en mi cama.

—Vete— le dije dejando mi móvil de lado.

—¿No te apetece?— me dijo mostrándome un condón. Lo miré divertida, podría ser beba noche para perder la virginidad. Le cogí por el cuello del pija a y lo besé— Eso me vale como un sí.

Reímos y seguimos con el tema. Vamos a dejar de lado la noche, pues lo divertido fue la cara de mi hermano. Jamás he oído un grito tan agudo. Cabe decir que jamás paramos de vernos, un tiempo tuvimos que escondernos pero una vez Hero me pidió ser su novia no había manera de mirarlo y no sonreír.

One shots multifandomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora