DULCE
Poncho: Lobo, ¿qué te preparen a Yure?
Dulce: No, Tiene que descansar para los entrenamientos y la charreada, que ensillen a Cancia.
Poncho: ¿Y para las Chavas?
Dulce: escoge los más mansos, no sabemos qué tan acostumbradas están a montar en este tipo de terrenos. – dicho esto se encamino junto con tres peones.
Rosi: Es bonita la novia de Ricardo, ¿verdad?
Dulce: Si, lo es.
Rosi: ¿Y la hermana?
Dulce: ¿La hermana qué?
Rosi: Te gusta, ¿verdad?
Dulce: Rosi no me hagas preguntas si sabes que la respuesta no te va a gustar.
Rosi: ¿Te gusta?
Dulce: …- jale aire antes de responder- Si me gusta.
Rosi: pues no entiendo porque, es muy desabrida.
Dulce: jajajajaja, pues cuando la pruebe te digo, a lo mejor y no sabe a nada, pero chanza y esta deliciosa.
Rosi: A veces puedes ser terriblemente cruel, no entiendo como sabiendo todo lo que te amo, no me das la oportunidad de darte todo lo que necesitas.
Dulce: No me gusta lastimarte, pero no me dejas opción, lamento que no comprendas que no hay forma de que puedas satisfacer mis necesidades, creo que no hay nadie que pueda, pero lo que más lamento es que sea tan difícil recuperarte como amiga.
Rosi: Pero a ella no te importa lastimarla, es carne nueva y te mueres por tirártela, no como yo que me usaste y me botaste.
Dulce: ¡Carajo Rosi! Nunca te engañe, y lo sabes, no te prometí nada, me conoces de siempre y sabes muy bien como soy, y no te use, de verdad lo intente, pero no funciono, te pido que llevemos la fiesta en paz, quiero por sobre todo que mi hermano se la pase bien, por favor disfrutemos la tarde, hazlo por Ricardo.
Rosi: Lo siento, perdóname, es que los celos me enloquecen, y no pienso claramente.
Poncho: listo ya están los cuacos, "amonos".
Menos mal que Poncho llego, porque estaba a punto de demostrarle a Rosi lo que era mi faceta cruel, nunca le he soportado a nadie escenas de celos o panchos, lo único que me detenía con Rosi es que de verdad le tenía afecto; pero todo tiene un límite y con ella ya me está llegando, cuando regresamos al casco, note una actitud extraña en todos, Ricardo estaba muy colorado y me esquivaba la mirada, señal de que algo pasó y tenía que ver conmigo, Mariana me miraba diferente, no la conozco como para determinar qué o porqué, y Anahi ni me miraba pero estaba también muy roja, Poncho y Ricardo ayudaron a las chicas a montarse en sus respectivos caballos y cuando me disponía a hacer lo mismo Rosi me tomo del brazo y me dijo:
Rosi: Me ayudas a montar – evidentemente supe cual era su intención, quería marcar territorio, Rosi no necesitaba de ayuda alguna para montar un caballo, pero no iba a provocar una escena discutiéndole nada, así que le di por su lado, total me había hecho el propósito de cumplirle a Ricardo y no dañarle su estadía.
Dulce: a ver – la tome por la cintura para impulsarla, ella pego su espalda contra mi pecho y echo su cabeza hacia atrás besándome en la mejilla diciendo en señal de triunfo "gracias". Trate de aparentar indiferencia al momento, sobre todo por Poncho, monté también y me empareje con él, emprendiendo el galope tratando de ir un poco a parte del resto del grupo; Anahi me encantaba pero tampoco quería líos con mi hermano.