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Tuvo que alzar mucho su mirada para alcanzar a observar el rostro de ese alto muchacho que se encontraba a su lado sosteniéndolo de la mano. El chico de cabello ondulado vestía con un traje clásico como en la Época Victoriana y con demasiado vello falso en el rostro, muchísimo para serle imposible reconocerlo. Lo único que podía ser visible eran esos redondos ojos marrones.

—Muévete conmigo a la cuenta de...

Su voz era tan profunda y grave que erizó los escasos vellos del cuerpo de Baek Hyun y dio un brinco a su corazón mientras se perdía en aquel insólito acontecimiento y solo a reacción de la mano contraria sobre la suya, empezó a moverse, a dar sus primeros pasos por la pasarela.

Su mirada por segundos viajó hacia el rostro contrario para percatarse que era observado de su parte. Ambos se daban miradas sin expresión alguna, simplemente parecían fijarse en las facciones de cada uno tratando de memorizarlas.

Baek Hyun supuestamente estaba siendo sostenido por su palma, pero, mientras más se mostraban ante el público, comenzó a percibir que sus dedos estaban siendo entrelazados con los ajenos y no le incomodaba en lo absoluto que el contacto se volviera tan íntimo. Era tan extraño para él. No sentirse en desacuerdo de ser tomado de la mano por otro hombre. Más que eso, ser tomado de la mano por un desconocido. Un completo extraño con quien seguía cruzando miradas sin comunicación alguna.

Porque cuando volvieron al punto inicial, el desconocido soltó la mano de Baek Hyun para perderse entre los demás modelos que hacían fila para presentarse. Sin darle oportunidad de hablar. Y dejando únicamente el calor de su mano aún presente. Había notado la gran diferencia entre ambas extremidades. Ese muchacho tenía los dedos largos y la palma tan ancha que cubría por completo la pequeña y frágil mano de Baek Hyun. Se suponía que estar pensando en ello como algo agradable era de su completo rechazo, pero... ¿Por qué no lo sentía de aquella manera?

—¡Baek Hyun!

Oír la voz de Lu Han causó que dejará de mirar el camino por donde la persona que lo ayudó había desaparecido por completo. Aunque escuchar su nombre ser dicho vagamente no le fue desapercibido.

—¿Qué estabas mirando? —le preguntó tras haberse dado cuenta que se encontraba un poco distraído.

—¿Yo? No, nada, nada —intentó restarle importancia al tema.

—No quieras engañarme —achicó los ojos para mirarle fijamente—. De seguro estás curioso por saber quién era la persona que te ayudó —esa expresión de sorpresa que le mostró le dio permiso para continuar—: Tienes suerte, Baek Hyun. Sé de quién se trata —pasó inmediatamente un brazo por sus hombros para susurrarle a la oreja—. Su nombre es...

—¡Baek! ¡Baek Hyun!

Sin embargo, su charla se vio interrumpida cuando empezó a escuchar las voces de sus mejores amigos casi cerca de donde se encontraba. Baek Hyun debió disculparse con Lu Han para conducirse hacia el lugar donde esas voces se oían con más fuerza. En el segundo que, bajo los cortos escalones, fue recibido por una brillante luz al mismo tiempo que una cámara hacía click por alguien haberle sacado una foto en ese instante.

—Será mi nuevo fondo de pantalla —comentó Jong Dae con una expresión divertida en su rostro mientras observaba su teléfono móvil.

—¡Chen! —se quejó Baek Hyun por sus actos.

—No sabía que te gustaba disfrazarte de la Caperucita Roja, Baek Hyun —Kyung Soo trató de mostrarse calmado, pero la situación era para reírse y eso hizo, se unió a la diversión del momento.

—¿Están tomando mi situación con gracia? —Baek Hyun se ofendió por el comportamiento que mostraban.

—Es que es para no creérselo —mencionó Xiu Min uniéndose a la diversión.

Objetivo: MasculinidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora