CONFESIONES

CAPÍTULO 7

CAPÍTULO 7

(Zoe)

- ¡Cariño, Sabrina está esperándote para ir a clase! – me grita mi madre desde abajo.

- ¡Ya voy! – contesto bajando el último escalón.

- Llévate algo para desayunar por el camino, al menos.

- No tengo hambre, mamá

- No era una pregunta Zoe, aquí tienes – me ordena – por cierto, ¿Quién era ese chico tan guapo al que deje esperándote ayer?

- Nadie, un compañero de clase, teníamos que hacer un trabajo juntos. Y te agradecería que no le contaras a papa que estuvo aquí, me costó bastante sacarlo sin que lo viera – le contesto intentando no darle mucha importancia al físico de Kylian.

- ¡Vaya! Creí que tu padre tendría turno doble ayer en el hospital, por eso deje entrar al chico. Además me pareció muy educado y no tuve más remedio que dejarle esperandote en el salón, no podía dejarle en la calle mientras tú estabas por ahí. Si habíais quedado, ¿Por qué saliste?

- ¿¿Educado??- le pregunto entre risas.

- Perdonad por interrumpir pero... Zoe vamos tarde- me dice Sabrina metiéndome prisa educadamente, desde la puerta principal.

- Es cierto, adiós mamá –me despido dándole un beso en la mejilla como todos los días y salgo pisándole los talones a Sabrina en dirección a su escarabajo.

Sabrina no aguanta ni llegar al coche para preguntarme por la conversación que ha escuchado con mi madre.

- Dime que ese chico tan guapo y educado que describía tu madre no era Kylian Smith – suelta directamente.

- Por desgracia, sí. No te lo vas a creer. Llegue de correr y me lo encontré en el sofá de mi salón, después nos metimos en la ducha para que mi padre no nos viera y se hizo pasar por mi novio delante de Justin... - le cuento exageradamente rápido para que no se me olvide nada.

- Espera, ¿Tú y Kylian en tu ducha? ¿Qué me he perdido? – dice con los ojos bien abiertos pidiéndome explicaciones.

- Bueno, llevábamos ropa.

- Creo que vas a tener que explicarte mejor – consigue decir después de unos segundos pensando - ¿y qué pinta Justin en todo eso?

- En resumen podría decirse que como ya sabes, mi padre no quiere chicos en casa, nunca he entendido por qué pero lo tiene prohibido desde siempre. Sin embargo la novia de Mike sí que puede entrar, no lo soporto...

- Ve al grano – me ordena.

- Está bien, - digo riéndome – mi padre llegó cuando estábamos buscando unos libros en mi habitación así que tuve que esconderlo en el baño y al final acabamos los dos metidos en mi bañera con el grifo abierto, la verdad es que la escena no tiene desperdicio. Después salimos, y apareció Justin y como no me apetecía nada hablar con él, le pedí al imbécil que se hiciera pasar por mi novio y me monte en su coche aunque me dejo tiraba en medio de la calle un rato después – consigo contarle sin que me interrumpa aunque ha estado a punto de hacerlo varias veces.

- Y todo eso ¿lo hizo por tu cara bonita? – me pregunta dudosa - ¿no pasó nada más?

- Bueno a cambio no puedo contarle a nadie lo que paso en mi casa y tengo que hacer el trabajo yo sola – le cuento mientras frunzo el ceño y suspiro.

Sabrina no puede evitar reírse de mí y no para de decirme que es lo más absurdo que le he contado en todo el tiempo que llevamos siendo amigas. Pero me promete que no le contará nada a nadie de lo sucedido, además de pedirme una vez más que tenga cuidado con ese chico. Mi mejor amiga cree que voy a acabar locamente enamorada del imbécil y él se reirá de mí, pero yo solo pienso que está muy bueno aunque sea un capullo. Nunca voy a olvidar como frenó en seco en la carretera y me gritó que me bajara de su coche, debería haberle reventado el retrovisor de ese precioso coche, seguro que es lo que más aprecia.