Confesiones

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Era una calurosa tarde de martes en la ciudad de Buenos Aires Sharon se encontraba esperando a Rey en la esquina del parque, ellos se habían quedado de acuerdo para encontrarse a estas hora en ese lugar para seguir hablando de la venga que estaban planeando para los Valentes y su padre, ella miraba para un lado y para el otro pero él todavía no venía, miro su reloj de pulsera mientras daba un suspiro de fastidio porque odiaba que no sea puntual. Sharon volvió a levantar la vista para todos lados y al ver que no llegaba decidió llamarlo, busco su celular de su cartera y cuando estaba a punto de llamarlo vio que justo llegaba corriendo hacia donde ella estaba.

-¡Sharon!

-¡Rey! Al fin llegas, por un momento pensé que no ibas a venir más.

-Sí, lo siento por llegar tarde es que tu padre no me dejaba salir, me estaba contando sobre su juventud y sus ex novias que no la terminaba más por suerte Miguel y Mónica aparecieron y pude venir-dijo el hombre de cabello negro mientras comenzaban a caminar con ella por el parque.

-¡Mi padre nunca cambia! Debió de haber sido una tortura para ti-comento Sharon en lo que guardaba su celular otra vez en su cartera.

-Lo fue-contesto Rey con una expresión de molestia en su rostro.

-¿Te pasa algo Rey?-pregunto ella al notar que su ex empleado estaba molesto.

-¡Maggie! Ese es el problema.

Sharon al escuchar ese nombre se sintió molesta por dentro, Maggie era la nueva empleada que su padre y los valientes contrataron para que trabaje en la mansión, y por lo que le conto Ámbar parecía que la mujer estaba muy interesada en Rey y esto no le gustaba para nada a Sharon.

-¿Qué paso con ella?-pregunto ahora la mujer de cabello rubio con molestia.

-Que es un fastidio total, además de que no hace los trabajos como se debe por estar con el celular todo el tiempo mirando subastas de zapatos raros no me deja de insistir que salga con ella-conto él mientras seguían caminando por el parque.-Ya estoy harto de decirle que no a todas las veces que me lo propone, pero al parecer no entiende el español.-Termino de decir Rey con fastidio.

Sharon siguió caminando en completo silencio sin decirle nada, estaba pensando en algo que se le vino a la mente, Rey al ver que ella se quedó callada y no hablo nada mas la miro y noto que ella estaba el frunce enojado, él pensó que tal vez ella estaba así por lo que él había llegado tarde.

-¡Sharon!

-¡Sí!

-¿Está todo bien?-inquirió el hombre de cabello negro sin dejar de mirarla.

-¡Claro que sí! Todo está bien, ¿Por qué no lo estaría?

-Porque de repente te quedaste callada, y al parecer estas molesta-explico Rey en lo que ambos se detenían para sentarse en uno de los bancos del parque.

-No me pasa nada.

-¿Segura?

Sharon no le respondió solo lo miro fijamente por unos segundos volviendo a pensar en lo de hace un rato sobre Maggie, ella tenía que admitir que cuando se enteró que en la mansión había contratado una nueva empleada para remplazar Amanda, al principio no le dio tanta importancia hasta que en un encuentro en una cafetería con Ámbar esta le mostro una foto de Maggie , la mujer era joven y hermosa pero eso tampoco le importo hasta que su hija le conto que Maggie estaba enamorada de Rey y que hacía de todo para tratar que su ex asistente personal aceptara salir con ella a una cita. Desde ese día la mujer de ojos verdes tenía un odio completo que aunque no la conocía personalmente Sharon la detestaba por estar detrás de Rey.

One-Shots ShareyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora