One-Shots Sharey

Nunca te dejare sola

Una parte de Rey estaba contento de que por fin pudo encontrar a Sol Benson y que lo que él insinuaba de que Luna podría ser Sol fue cierto, pero ahora él se estaba arrepintiendo de todo eso, es que desde ese día Sharon no ha sido la misma de antes, la mujer de cabello rubio estaba todo el tiempo con ropa de dormir, con lentes de soy y muy nerviosa sobre todo a su alrededor especialmente sobre lo que Luna y sus padres hicieran, sin contar que su carácter estaba mucho peor que antes, Rey ya no sabia que hacer porque le costaba mucho tener que ocuparse de su trabajo en la mansión porque debía controlar si Alfredo hablaba con el personal sobre el incendio especialmente con Luna y sobre todo cuidar y vigilar a Sharon porque no la podía dejar sola. Por las noches Sharon se sentaba en el sofá de la sala y se quedaba hasta altas horas ahí despierta sin hablar, perdida en sus pensamientos, Rey siempre se quedaba con ella diciéndole que subiera a su cuarto y que descansara, pero ella simplemente le daría una mirada asesina y le diría que no se metiera.

Esto solo hacia que él se sintiera mal porque no podía ayudarla sin contar que tenia que escuchar desprecio hacia su persona solo por querer cuidarla, pero, aunque Sharon lo derribara de arriba a bajo con sus palabras él seguía adelante sin rendirse, estaría con ella hasta el final, la ayudaría a volver a ser la mujer que días atrás era, él se levanto a traerle agua y cuando volvió la encontró dormida en el sofá. Él la cubrió con la manta y se quedo sentado en la mesita de metal mirándola dormir.

- ¡Sharon! -se digo para sí mismo mientras seguía mirándola dormir. - ¡No me importa lo que pase, yo seguiré a tu lado cariño! Aunque solo pienses en mi como un simple empleado que se mete en tu vida no pienso dejarte sola, yo te ayudare a volver a ser la Sharon que conozco y amo, te lo prometo. -Termino de pensar Rey en lo que estiraba su brazo y apartaba algunos cabellos que estaba en el rostro de su amada.

Se quedo en silencio mirándola dormir tranquilamente, él suspiro disfrutando de esta tranquilidad, cerro los ojos por unos segundos antes de escuchar que Sharon se despertó y comenzó todo el ciclo otra vez.

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Las semanas pasaron y todo en vez de mejorar solo empeoraba cada vez más, Rey aguanto todo lo que pudo hasta que ya no pudo sopórtalo más, el jueves por la tarde Rey llego a la mansión y encontró a Sharon sentada en el sofá con las cortinas de las ventanas cerradas porque ella decía que le molestaba la luz. Rey solo se quedó mirándola por unos segundos hasta que hablo.

- ¡Miss Benson! Ya volví-dijo él acercándose hacia donde ella estaba.

Sharon no hablo, solo quedo callada.

- ¿Ya tomo su medicación? -pregunto Rey con seriedad.

-Si ya lo hice, mi padre me lo trajo y no se movió hasta que lo tomara, es un insoportable-contesto la mujer de ojos verdes con fastidio mientras miraba para otro lado.

-No, Miss Benson, no es insoportable, es por su bien-declaro su asistente con firmeza, y Sharon se volvió hacia él.

- ¿Mi padre y tú están conspirando en mi contra, ¿verdad?

- ¡Nadie está conspirando en su contra, Miss Benson! Al contrario, todos estamos preocupados por usted, y solo queremos ayudarla-comento Rey con seriedad sin dejar de mirarla. -Ya hace dos semanas que esta así, desde que se entero de eso, sea sincera conmigo, ¿hasta cuándo piensa seguir así?

- ¡Suficiente!

- ¡Claro que no! -exclamo el hombre de cabello negro. - ¡Ya basta de actuar así! -grito Rey ya cansado de que ella este de esa forma.

- ¡Deja de gritarme, Rey! -reprocho Sharon mientras se ponía de pie.

-Le dejare de gritar cuando entre en razón, tienes que dejarte ayudar para volver a ser la de antes-dijo su asistente personal con enojo quedando frente a su jefa, la cual se limito a mirarlo a los ojos hasta que levanto la vista para mirarlo con odio.