One-Shots Sharey

Animarme a declarar lo que siento

Solo había pasado una hora desde que Don Alfredo se había ido de la mansión junto con su novia del pasado a recorrer el mundo como en los viejos tiempos, la casa se encontraba tranquila por el momento, Rey recorría la casa controlando que todo estuviera en orden, ahora que no estaba Don Alfredo, él se sentía más cómodo porque si no tenia que estar escuchando sus comentarios y consejos sobre el amor a cada rato que se lo encontraba. Llego a la sala pensando que Sharon estaría ahí pero no la encontró, miro el lugar por unos segundos para después ir al jardín a ver si ella estaba ahí, mientras caminaba su mente trajo el recuerdo de lo ultimo que el Sr. Alfredo le digo antes de irse.

- ¡Anímate a declararle tu amor a mi hija! Ahora que yo no voy a estar va a ser más fácil.

Él se rio al recordar eso.

- ¡Claro como si fuera tan fácil hacerlo! -pensó Rey para sí mismo, como si porque el hombre de edad no estuviera las cosas con Sharon cambiaran en algo.

Rey continúo caminando hasta que por fin la encontró, Sharon estaba regando sus orquídeas con una evidente sonrisa de felicidad en su rostro, él se detuvo para contemplarla, se sentía contento de verla así de alegre, le encantaba ver esa hermosa sonrisa en su rostro que solo apareció cuando su jefa lograba con sus propósitos, de repente las palabras de Alfredo volvieron a sonar en su cabeza mientras la miraba.

- ¡Declárale tu amor! Ahora que están solos.

Rey dio un suspiro de fastidio al no poder dejar de pensar en eso, no era que él no quisiera confesarle a Sharon lo que sentía, si lo que más quería en todo el mundo era que pasara algo entre ellos, pero él sabia que estaba lejos de ocurrir, Sharon jamás sentiría algo más hacia él, para ella era solo un empleado más y aunque le doliera prefería eso, a que le rechazara y le rompiera aún más el corazón. La miro un poco más, pero luego dirigirse hacia donde ella estaba.

- ¡Miss Benson!

- ¡Rey! ¿Paso algo?

-No, quédese tranquila que todo esta en orden, solo vine a ver como estaba-respondió él colocándose a su lado.

-Estoy bien o mejor dicho feliz, ahora que mi padre no está en la mansión y podre estar un poco mas tranquila-dijo la mujer de cabello rubio sin dejar de hacer lo que estaba haciendo. -No me tendré que preocupar de se este entrometiendo en todo, que hable del pasado con el personal especialmente con Luna.

Rey solo asintió.

-Ahora solo debe de asegurarnos que las cosas vayan en el rumbo que van, no podemos permitirnos cometer ni un error indico Sharon mientras lo miraba.

- ¡No se preocupe Miss Benson! Eso no ocurrirá-le afirmo su asistente con una sonrisa.

-Bien, lo que más me importa es que Luna nunca sepa la verdad, y así la fortuna Benson seguirá siendo solo mía, eso es lo único más valioso para mí.

Al oír esto la sonrisa de Rey se borro de su rostro, era obvio que eso era lo único importante en la vida de Sharon, y él jamás podría ocupar ni siquiera competir contra eso, la fortuna Benson tenia más valor que lo que su corazón sentía por ella. Al no oír respuesta alguna de su asistente Sharon se voltio a verlo, al hacerlo lo encontró con una mirado al suelo, y con una expresión de tristeza en su rostro.

- ¡Rey!

-Hum-dijo él levantando la mirada para verla.

- ¿Esta bien? -le pregunto ella con preocupación al ver el cambio de expresión de su rostro.

-Si, todo esta bien-respondió el hombre de cabello negro con una falsa sonrisa.

- ¿Seguro? -indago la mujer de ojos verdes al ver lo contrario.