México Mundialmente Shippeable [One-Shoth Y Drabbles]

When we were with him... / Als wir bei ihm waren...

Como.saben, el UsMex fue de mis parejas favoritas, hasta que estudie bien la historia y, el AusMex se volvió mi OTP.

Así que, espero les guste.

Estados Unidos x México

Y

Austria x México

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

“—Les voy a contar la historia de dos muchachos que en su juventud
Solían llevar serenata al mismo chico.
El tiempo los separó, y fue también el tiempo el que se encargó de
Reunirlos otra vez. Y ésto fue lo que sucedio al rencuentro:”

Al llegar al restaurante, Alfred se había encontrado con Roderich, se sorprendió al verlo. Pues desde que eran jóvenes se conocían, ambos habían pretendido al mismo chico, un lindo mexicano más joven que ellos.

—Amigo ven, te invito una copa. —Comento con amistad el estadounidense a austriaco mientras ambos tomaban asiento en una de las mesas del pequeño restaurante.

—Ya no tomo gracias. —Agradeció el castaño, el de ojos azules asintió ante la negativa. Así que dijo:

—No tomas, bien, te invito un café. —Insistio, el mayor suspiro y amble contesto.

—Bueno —Lo había dicho casi como un suspiro, la mesera tomo las ordenes para después dejarlos solos.

—Que quiero recordar la época loca.
De ayer cuando teníamos 16. —Habló animado. Aunque, en esa época, el único que tenia 16 era Alfred, el austriaco tenía como unos 19 años.

—Bien, dime que ha pasado con tu esposo. —Hizo el comentario el de lentes, a lo que el de ojos azules hizo una mueca disimulada.

—mm, nos divorciamos. —Contesto mientras veían a la mesera llegar con las ordenes. Roderich negó con la cabeza diciendo.

—Seguro te dejó por ser infiel. —El rubio hizo media sonrisa caída, pues, es que, no había podido evitarlo, estaba ebrio, no era su intención dañar al mexicano. Levanto la.mirada al escuchar nuevamente la voz de su amigo. —Recuerdas que yo le mandaba rosas...
Pero la conquistó más tu clavel.

—Así es— Contento con una pequeña sonrisa mientras miraba unos claveles blancos a la lejanía, mientras el austriaco tomaba una rosa del florero que tenían en la mesa. Ambos sonrieron por aquellos lejanos, pero gratos recuerdos.

—Llevamos juntos serenata
Juntos hasta el balcón aquél
Tu la guitarra y yo maracas
Él 15 y nosotros 16 —Dijeron ambos. Mientras la imagen del pelinegro, recargado en su balcón venia a sus mentes, esa sonrisa que les regalaba. Sus ojos oscuros brillar, solo él podía demostrar tal belleza. —Llevamos juntos serenata
Juntos hasta el balcón aquél
Yo la guitarra y tu maracas
Él 15 y nosotros 16

—Solo por ser mi amigo te confieso. —Comentó el rubio con un suspiro pesado, el austriaco le preguntó.

—¿Qué pasa?

—Me divorcié mas nunca lo olvidé. —El mayor negó, mientras hacían un simple "—hmmm.—". —Extraño su mirar, sueño el regreso
Le amo más que cuando me casé.

Su voz se había oído como un suspiro, el europeo podía notar la tristeza y nostalgia en sus palabras. Si bien, él también amo al mexicano, sabia que este se había quedado con el estadounidense por ser mas, simpático, mas alegre y gracioso, con voz queda dijo.

—Bien. —Suspiro y pensó, una idea llego a su mente y sonriendo dijo. —Llevemos juntos serenata.

—No, no tiene caso —Contesto Alfred decaído. El de ojos amatista puso una mano en el hombro del contrario y con una sonrisa dijo. —Ésto lo debe de saber
Yo la guitarrra y tu maracas
Conquístalo, amalo
Como cuando teníamos 16

Alfred sonrió al oírlo, ambos se levantaron, pagaron y salieron del local, rumbo a una tienda de instrumentos,
Para poder dirigirse a la casa del mexicano, que no quedaba muy lejos de ahí. El estadounidense oyó la voz del castaño decir:

—Llevemos juntos serenata
Juntos hasta el balcón aquél. —Él contento con un alegre "—vamos". El austriaco dijo amable. —Tú la guitarra y yo maracas
Conquístalo, amalo~

Ambos se abrazaron por el hombro y al unisono dijeron alegres.

—Como cuando teníamos 16 — sontieron y rieron un poco para volver a decir. —Como cuando teníamos 16.

—Ohayo Perez