MI MOTOCICLISTA

CAPÍTULO 75 "¿Mamá? ¿Papá?"

Emiliano se fue y era momento de confrontar a Javier, así que me levante de la cama y me acerque hacía él.

-Mi amor déjame explicarte. -Tomo mi rostro con sus manos.

-Si. -Tome sus manos y las quite. -Claro que me tienes que explicar. Porque yo no entiendo ¡Nada de lo que está pasando!. Tu me prometiste muchas cosas.

-Escuchame...

-¡Y me engañaste! ¡Yo te di mi vida Javier!.

No aguante más y quebré en llanto y Javier se acercó a mí y me abrazó, lo cual yo no correspondi solo me quedé paralizada. Sentí super bien ese abrazo, pero reaccione y lo empuje.

-Dejame en paz. -Dije entre lágrimas.

Javier no dijo nada y me volvió a abrazar y lo volví a empujar.

-¡Que me dejes! ¡Ya dejame en paz!. -Grite furiosa.

-Alejandra, por favor. -Dijo arrodilladose. -Perdoname.

Lo tomé de las manos e hice que se levantará.

-Quiero el divorcio. -Dije seria.

-No. De ninguna manera. -Dijo enojado.

-No es una opción. Ya no te quiero ni en mi vida ni en la de mi hija. -Dije enojada.

-¿Mamá? ¿Papá?.

Javier y yo volteamos a la puerta y ahí estaba Alejandrita, asustada con un peluche abrazado.

-¿Se van a separar?.

Javier y yo nos miramos y Alejandrita salió corriendo a su cuarto, yo la seguí y Javier fue detrás de mí.

Entramos al cuarto y Alejandrita se acostó en su cama y comenzó a llorar. Yo me senté junto a ella y Javier se quedó parado junto a mí
.

-Mi amor perdóname, pero es una decisión que yo quiero tomar. -Dije acercándome a ella.

Ella no dijo nada solo se lanzó hacía mí y me abrazo.

-Mamá por favor, no quiero que se separen. -Dijo entre lágrimas.

Verla así me partió el alma y no podía verla así. Me gire a ver a Javier el cual se le veían los ojos llorosos.

-Mi amor. -Dijo Javier sentándose junto a mí. -Perdón es que... Yo tuve otra novia, y pues... Yo que hacía.

Alejandrita al oír eso se separó de mí y salió de su cuarto.

-¿Por qué le dijiste eso?. -Me levante de la cama.

-¿Qué querías? Que le dijera mentiras.

-No, pero pudiste ahaber sido menos duro.

-Ya basta. Quieres el divorcio te lo daré.

Javier salió del cuarto y se fue de la casa, y yo fui a donde mi hija y la console en su tristeza.

-Mi amor debemos irnos de esta casa ¿Si?. -Dije limpiando sus lágrimas con mis dedos.

-¿Por qué?. -Respondió aún triste.

-Porque es casa de tu papá, además me trae demasiados recuerdos.

Me fui a mi cuarto y comencé a empacar mis maletas y de mi hija. Al terminar de empacar tomé mi celular y llamé a papá.

Llamada telefónica
-Papá.

-¿Qué pasa hija?.

-Podemos irnos a vivir un tiempo yo y Alejandrita a tu casa.

-Si hija pero ¿Por qué?.

-Cuando llegue te explico.
Fin de la llamada telefónica

(...)
Fui a casa de mis papás con mi hija y al llegar ahí mi hija corrio y abrazo a ambos.

-¿Cómo estas princesa?. -Dijo mamá feliz.

-Un poco triste, porque mamá y papá se van a separar, pero feliz porque voy a vivir aquí con ustedes. -Respondió Alejandrita feliz.

Mis papas me miraron confundidos y yo solo evadi sus miradas.

-Preciosa ¿Qué te parece si vamos por un helado?. -Dijo papá tomando a Alejandrita en sus brazos.

-Si. -Dijo feliz

Papá y Alejandrita se fueron y me quedé sola con mamá.

-Hija ¿Es en serio? . -Dijo sorprendida.

-Si mamá. Javier me engaño.

-No puede ser. -Bajo la mirada.

-Si, lo es y lo peor de todo es que yo organice su boda.

Me senté en el sofá de la sala y me gire a un costado y vi un retrato de Javier, Alejandrita y yo en la pared. Nos veíamos tan felices y pensar que esa felicidad solo era una falsedad de lo que en verdad era.

No pude ver más el retrato y me tape la cara y comencé a llorar. Mi mamá me vio y fue conmigo y me abrazo.

-Iré a llevar las maletas a mi antiguo cuarto. -Dije separandome de ella.

Me levante del sillón, tomé las maletas y fui a mi cuarto. Al entrar una ola de recuerdos me invadió, en su mayoría buenos.