MI MOTOCICLISTA

CAPÍTULO 54 "ENCONTRE MI VESTIDO"

Salimos del salón de belleza de Shantall y recibí una llamada de Javier.

Llamada telefónica
-Hola.

-Alejandra ¿Dónde estas?.

-Salí con Brie a una prueba de maquillaje y a comprar mi vestido.

-Vaya ojalá y encuentres el vestido adecuado y que no enseñes demasiada piel.

-Ay por favor, Javier.

-Bueno en la noche te veo.

-Si está bien.

-Te amo.

-Yo también.
Fin de la llamada

Guarde mí celular en mi bolso y nos subimos al auto para ir a una tienda de vestidos. No sabíamos en que lugar comprarlo, o dónde habría una tienda. Así que fuimos al centro y había demasiadas tiendas de vestidos de novia, quinceañeras, de noche y muchos más y era increíble la cantidad de tiendas que había.

-Esto si que será un reto. -Dijo Brie mirando por la ventana del coche.

-Lo se ¿Cómo encontraré el vestido adecuado?.

-¿Hay una tienda que tenga un vestido que te guste en particular?. -Me miró.

-Ese es el problema hay demasiadas tiendas. Que no se a cuál entrar. -Dije fastidiada.

-Ya se a cuál tienda ir.

Brie me guío a una tienda que era mucho más grande que las anteriores, ya que en esa tienda había mil y un vestidos de todo tipo, colores y tamaños.

-Espero y el costo sea mínimo. -Dije bajando del auto.

-Confía en mí. -Dijo bajando también del auto.

Entramos a la tienda y era super linda y los vestidos estaban separados por categoría. De novia, quinceañeras, fiesta, gala etc. etc.

-Buenas tardes. -Dijo una vendedora. -¿Buscan algo en específico?.

-Si. Mi amiga quiere un vestido de novia, el más hermoso que tenga y que la haga ver espectacular. -Respondio Brie.

-Pero no tan caro. -Añadí yo.

-Muy bien, déjame verte bien.

La vendedora comenzó a tomarme unas medidas de mi cintura, pechos y caderas.

-Tienes buen cuerpo, y unos ojos que deben resaltar y creo que ya tengo la elección perfecta. Siganme.

Brie y yo seguimos a la vendedora, que nos llevó a unos vestidores y entró a un cuarto y saco varios vestidos.

-Ahora la elección es tuya. -Dijo entregándome los vestidos.

Entre al vestidor y me probé uno que era tipo sirena y a decir verdad resaltaba muy bien mis curvas pero no era mi estilo. Seguí viendo los demás vestidos y vi uno que era estilo princesa. Demasiado ampon y con unas series de piedras que brillaban muy bonito en la falda y el corset era de escote de corazón y con piedras también distribuidas en este. Así que no dude mas y me lo probé. Salí del vestidor para que Brie me viera.

-¿Qué tal?.

Brie me miró y se quedó boquiabierta.

-¡Está increíble!. -Exclamó.

-¿En serio?.

-No cabe duda te ves muy linda. -Me miró fijamente. -Además, creo que a Javier le va a encantar.

-Y yo creó que encontré mi vestido.

Fuimos a pagar el vestido y al salir de la tienda nos dimos cuenta que ya era de noche, así que llame a Javier para avisarle que ya iré a casa.

(...)
Dejé a Brie en su casa y yo me fui a la mía.

Estacione el auto afuera de mi casa, baje y recibí un mensaje de Javier que decía "Voy en camino a tu casa" entonces decidí esperarlo afuera.

-Hola.

Escuche detrás de mí. Me giré y me encontré con Josh lo cual me hizo asustarme, ya que se veía demacrado, con ojeras, los ojos rojos, súper delgado y pálido.

-¿Qué te paso Josh?. -Dije asustada.

-Soy un asco cierto. -Se acercó a mí y yo retrocedí. -Nunca pensé en llegar al límite de darte miedo.

-No me das miedo, solo que... No quiero que me hagas daño. -Lo miré a los ojos.

-No te haré nada Ale. Solo vine a pedirte perdón, por todo el dolor y sufrimiento que te hice pasar.

-No hay cuidado.

-Y a despedirme. -Paso su mano por detrás de él y saco un arma.

Al verla me salté y retrocedí un poco.

-Josh por favor no cometas una locura. -Dije asustada y temblando de miedo.

-Solo quiero que sepas, que te amo y que fui un tonto por no cuidarte y demostrarte mi amor.

Levantó el arma y me señaló, puso su dedo índice en el gatillo y al ver eso cerré los ojos con fuerza y mis lágrimas comenzaron a salir, pero Josh no tiraba del gatillo, así que abrí los ojos.

Giró el arma en su dirección y la metió en su boca.

-¡Josh no!. -Grite.