Casada con mi Crush

Cap 18

El espectáculo.

Han pasado cuatro días de lo sucedido, Eros sigue como siempre y yo sigo ignorándolo completamente. ¿Por qué pensaría un mísero segundo que iba a cambiar? Eros sin duda es alguien que no conoce la palabra "cambiar". Me parece muy fuerte que no conozca el sentimiento de culpa. Tal vez sea mejor así, tal vez encontraré al amor de mi vida en otro lugar.

Las primeras horas de la clase son como siempre. Se pasan lentas y todos los alumnos desean que se acabe, para tener un descanso. Cuando suena el timbre del descanso,  todos salen en estampida, como si hubiera zombies dentro de la clase, a lo mejor hay un espejo en clase, se han visto y se han asustado. Hay cada espécimen en clase. Cuando la marabunta se va, recojo mis cosas, acompañada de Dos. Vamos a salir afuera, cuando un brazo me retiene y no me deja avanzar, cuando me giro, no puedo creer lo que ven mis ojos.

— Evelyn, tengo que hablar contigo. - me mira y sé que está nervioso, porque no para de tocarse el pelo, todos los chicos hacen eso, es una manía colectiva o ¿qué? No le respondo, me suelto de su agarre y sigo avanzando como si no hubiera pasado nada. Mi dignidad siempre por delante. Escucho un bufido y sé, perfectamente de quién es. — No me hagas rogarte, porfavor. - no me giro y sigo avanzando hasta afuera.

— Tía yo creo que deberías escucharle. - me mira y yo entrecierro los ojos. Ella ha sido siempre, la que me ha dicho que Eros no es buen chico y ahora quiere que hable con él. — Ya sé que estás pensando, pero tía casi se ha puesto de rodillas. - ruedo los ojos, con lo exagerada que es, Eros no se habría puesto de rodillas nunca, o ¿sí?

— Déjalo estar, no me apetece darle vueltas a eso, ahora mismo quiero disfrutar de mi descanso. - le respondo malhumorada y ella se calla. Mejor,no quiero que nadie me hable ahora mismo sobre él. Estamos charlando de cualquier otro tema con mis amigos y el timbre suena. Nos levantamos y vamos hacia la puerta, cuando la abrimos, vemos a mucha gente alrededor de alguien. Me acerco, porque me da curiosidad por saber que están mirando y veo que la gente me está dejando espacio, frunzo el ceño, pero ¿qué les pasa?,no me dejarían pasar nunca, la gente de mi instituto quiere enterarse de todo. Yo creo que hasta reservan sitios para ver el espectáculo. Me voy adentrando más y más en el centro y me topo de frente con alguien, cuando alzo la vista veo que es Eros quién está en frente. Como no.

Intento salir, pero la gente que antes me dejaba entrar, parece que no se quieren mover. Bufo molesta. Parece que está el toro contra el torero y no quiero decir quién es quién.

— No te van a dejar salir, así que escúchame. - me mira serio y yo solo bufo molesta, mientras me cruzo de brazos. — Me he comportado como un idiota, al apodarte así y todo por la fama, quería pedirte perdón, por todas las veces que te he mirado mal y sobre todo por lo que pasó el otro día, no quiero ser así contigo y no quiero ser así con nadie. No quiero que la gente me tema por si los voy a querer destruir. Lo siento mucho Evelyn, espero que puedas perdonarme. - cuando acaba con su discurso se escuchan aplausos y diversos murmullos. Cuando centro mis ojos en su mirada, dejo de escuchar a la gente. Me ha dejado anonadada, el rey del instituto, acaba de admitir que se ha equivocado y sobre todo ha pedido perdón y sobre todo a mí.

Vaya, parece que algo tiene en la cabeza, a parte de madera, claro.

No sé qué contestar y solo me lo quedo mirando, creo que estoy en shock. Escucho un murmullo de un profesor gritando enfadado que todo el mundo entre en clase, pero yo no puedo moverme, aún que la gente si. ¿Por qué se pueden mover y yo no? Seguro que hay un gas en el aire que solo aspiramos Eros y yo, ya que él tampoco se ha movido. No puedo mirar hacia otro lado.

Su mirada es como una droga para mí, un drogadicto necesita su sustancia, bueno pues yo necesito su mirada.

Parpadeo varias veces y me pellizco para ver si esto es real, si alguien me viera ahora, diría que estoy drogada.

— Princesita, no estás soñando y si sueñas conmigo, que buenos sueños tienes, ¿no?- me echa una mirada coqueta y me guiña. Levanto la vista de la zona pellizcada, que ahora mismo está roja y lo veo, alzando las cejas.

— Si soñara contigo, no serían sueños bonitos, tendría pesadillas. - borra la sonrisa y finge estar molesto. Yo solo niego con la cabeza, divertida. Mira que es idiota.

— Claro, tendrías pesadillas, ya que soñarías que me pierdes y claro, quién no lloraría si pierden a este hombre. - se señala y hace que sus músculos resalten. — Tienes un poco de baba en tu barbilla, princesita. - me toco la barbilla, no tengo nada y me doy cuenta que caí en su trampa, ya que se empieza a reír.

Vamos a la clase que nos toca, cuando tocamos y entramos los dos juntos, la gente nos observa curiosa. Me sale una sonrisa victoriosa cuando veo a sus arpías arder de celos. Creo que van a tener que acostumbrarse, porque a partir de ahora, van a conocer al nuevo Eros.

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Estoy viva, no me he muerto por ahora 😭

El 9 de septiembre empiezo la universidad jfjvjfjfjkf. 😩

No he podido actualizar, porque he tenido un cumple y madre... JAJAJAJA

Ya basta de hablar de mi. :(

Hemos llegado a 3 K lecturas, no me lo creooo, muchas gracias enserio. ☺️❤️

Que lindo es Eros, ¿eh?😏

Muchas gracias por leerme y por tener paciencia conmigo, cuando empiece la universidad, no sé si voy a poder publicar tan seguido, pero lo intentaré.

Si os ha gustado, comentar y dar un voto. ❤️