La miré doblar la carta y guardarla en un sobre que dejó en la mesa. Luego tomó su teléfono. Marcó unos números y suspiró cuando escuchó la voz del otro lado.
-¿Qué mala broma es esta Lauren? ¿Por que no tomabas mis llamadas?- preguntó alterado y lo suficientemente alto como para escuchar su conversación.
-Lo siento, yo…-
-No puedes hacerme esto, Lauren.- volvió a retar el hombre.- Acabo de abandonar un caso en la Corte y tu no puedes tomar mis jodidas llamadas!- decir que estaba molesto era minimizar su furia.
-Necesito que me escuches…-
-Oh no. ¡Tu vas a escucharme! ¿Por qué carajos me llama el hospital a decirme que intentaste suicidarte? ¿Qué rayos pasa por tu cabeza, Lauren? – Nunca lo había escuchado decir tantas veces mi nombre.- ¿Tienes una minima idea de… - antes de que continuara escuche el fuerte ruido del claxon.- ¡Ve por tu carril, idiota.- imaginaba que iba conduciendo.- ¿Tienes una mínima idea de las locuras que pasaron por mi cabeza?
-No pero…-
-Llame a Camz.- volvió a cortar sin dejarla hablar.- estoy seguro de que ella también va en camino. No tienes ni la mas minima idea de lo mal que se puso al enterarse de lo que hiciste. ¡Estas demente, Jauregui! – esta vez el tono de voz disminuyó.- y tienes mucho que explicar.
-Lo sé.- finalmente sentí que su compañero la dejaría hablar.- lo sé y lo siento tanto. Pero era la única manera de llegar aquí.-
-¿De que estas hablando?- Lauren miró el reloj y suspiró.
-No tengo mucho tiempo. Estoy segura de que Camz esta por llegar y tu no estas muy lejos asi que escúchame bien. Sobre mi mesa hay una carta que debe llegar a Camila. Asegúrate de eso. ¿De acuerdo?-
-¿De que estas hablando?-
-¿Recuerdas la caja fuerte en casa de mis papás?
-Si, pero ¿a que viene eso ahora?- su voz era cada vez mas confundida.
-Hice que cambiaran el testamento de mis padres y lo puse todo a nombre de Taylor. Le faltan meses para cumplir la mayoría de edad, pero no quiero que la envíen a un internado. Por eso te nombre su tutor legal.-
-¿Qué? ¿De que rayos estas…
-Eres mi mejor amigo desde la universidad y un gran abogado, y se lo mucho que apreciaste a mis padres y lo mucho que adoras a Taylor. Por favor cuida de ella. Asegúrate de enviarla a una buena Universidad y de vez en cuando vigila que tome sus medicamentos.- mis ojos empezaron a cristalizarse por el reconocimiento de que yo no estaría ahí para ella.
-Lauren no se de que estas hablando pero podemos arreglarlo. – lo escuché cerrar la puerta de su auto con fuerza.- Estoy entrando a la clínica, necesito que te tranquilices y…-
-Eres como un hermano para mi.- dije dejando salir las lagrimas.- Se que cuidarás de Taylor como siempre cuidaste de mi. Te quiero mucho.- intentó calmarse y dejó salir un suspiro.- La contraseña es mi fecha de cumpleaños.-
-Lauren…-
Y eso fue todo.
Ella terminó la llamada.
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Siempre tu
Fanfiction¿Qué pasaría si te enamoras una y otra vez de la misma persona? ¿Una y otra vez en... cada vida? Creo firmemente que algunas personas están destinadas a conocerse, a encontrarse a pesar de las circunstancias, algo así como el mito del Hilo Rojo pero...