Sarang;; h.s ||1||

Capítulo 34

Guardé aquel recibo en mi bolso mientras entraba a mi auto. Una tarde pesada en donde lo único que estuve haciendo fue depositar aquel dinero que mi "familia" necesitaba para los gastos del hospital y medicamentos.

¿Es que acaso ninguno de mis supuestos hermanos puede pagar algo? Recuerdo que Sidney no vive de sonrisas su marido es un abogado uno de los más caros de San Francisco, Leandro trabaja como cirujano plástico, y su esposa es un intento de modelo a quien le pagan bien, Alaska es dueña de un spa que su antiguo novio y ahora marido le ha regalado, Jesse es gerente general de una empresa y resulta que a la única persona a quien le piden dinero es a mi.

La única persona a quien culpan es a mi, siendo que yo no tengo nada que ver con ellos desde hace años.

Pero aquí estoy yo, dándoles mi dinero.

Ahora mismo me dirigía hacia una cena en donde estarían todos mis trabajadores festejando el aniversario de Sweet Land.

Era lo mejor para mantenerme distraída, una de mis trabajadoras: Evelyn, se encargó de reservar una mesa en un restaurante un tanto peculiar, se dice que tiene presentaciones en vivo cada viernes en la noche así que... a mantener la cabeza fría y los pensamientos lejos.

Me miré por última vez al espejo retrovisor, mi maquillaje estaba intacto por suerte. Acomodé un poco mi vestido y lentamente me abrí paso hacia aquel lugar.

Ni bien entré una chica se acercó a mi con una sonrisa radiante preguntándome sobre la mesa que se había reservado.

-Evelyn Kim.- dije lentamente mirando como esta buscaba en una pequeña computadora el nombre.

-¡Oh! Venga conmigo, la llevaré a su mesa.- dijo sonriente.

Era un precioso asento inglés que la chica tenía, era extraño pero su rostro se me hacía familiar.

Lentamente me llevó hacia una zona apartada de las demás mesas que se encontraba en un lugar más tranquilo y cómodo cerca del escenario.

A lo lejos pude ver a la mayoría de mis trabajadores ya hablando entre ellos, el primero en verme fue Derek.

-Puedes tomar asiento.- la chica dijo ya a un lado de la mesa -buenas noches.- saludó a todos -soy Gemma, seré su mesera la noche de hoy, espero disfruten de su velada.- asintió para si misma -aquí están los menús, en unos minutos vuelvo para tomar la orden de todos.- dijo alegre antes de retirarse.

Ni bien me senté todos saludaron alegres sacándome una gran sonrisa, las típicas de oreja a oreja que daba antes de todos estos desastres aparecieran en mi vida.

-¿Terminaste tus cosas que hacer?- Finn uno de los pasteleros preguntó a lo lejos.

-Si, estoy libre y lista para festejar un año más con Sweet Land.- dije riendo sintiéndome completamente relajada, cómoda y segura entre ellos.

Fue la noche más tranquila y encantadora que pude tener con ellos me permití conocer un poco más a cada uno de ellos y poder ser un poco más cercana a mis trabajadores mientras compartíamos de un hermoso aniversario y con muy buena música.

El restaurante era magnífico, fuera de la cantidad de comida deliciosa, trato excelente... la música que ponían no era del todo mala.

Las personas que también se encontraban en las diferentes mesas estaban disfrutando de todo y algunos de ellos estaban ya en la pista de baile.

-Creo que vendré a menudo a este lugar, me gusta.- dije bebiendo un poco de vino -gracias por traernos aquí Eve.- sonreí.

-No es nada Sarang. Este lugar tiene muy buenas críticas en internet, así que supuse que sería genial y creo que si lo fue.- esta movía su cabeza de un lado al otro al ritmo de la música.