La noche más fría || Chriserick.

Capítulo 48.

Ambos estuvieron callados por largos segundos, escuchando sus respiraciones aceleradas por la sorpresa, hasta que vieron a Joel sentarse en la cama que dormía.

Zabdiel llenó de aire sus pulmones y se sentó también, levantando consigo al castaño, ya que no dejaba de abrazarlo, entonces su amigo se aguantó una risita para no quitarle seriedad al asunto.

- ¿Perdón, qué? -arqueó una ceja, esperando que el moreno hablara de nuevo.

Resignado a perder su orgullo, Joel soltó un suspiro mirando hacia otro lado, hasta que tomó valor lo miró.

- Tienes razón, soy un idiota. No debí defenderlo, él me ha dicho que le gusto y que si tú no sabes valorarme que estará esperándome con los brazos abiertos cuando decida dejarte -el castaño elevó sus cejas, sorprendido de escuchar aquello.

- ¿Entonces piensas irte con él? -preguntó Zabdiel, con una mirada oscura- Es lo mejor, yo no quiero estar en una relación tan fea como esta se volvió desde que nos fuimos.

El moreno negó rápidamente, subiendo sus rodillas y acomodándose encima de ellas.

- No, yo sé que tú me valoras y es verdad, siempre me has demostrado que me amas, no tengo razones para dudar de tí, es sólo que es diferente, se fijan tanto en tí que creo que con mostrar que eres mío ya no es suficiente y quería probar lo que hacía Erick, pensando que funcionaría contigo como con Christopher.

El castaño comenzó a toser, ahogándose con su saliva al escucharlo y Zabdiel golpeó suavemente su espalda, hasta que se quedó tranquilo.

Los ojos del castaño estaban cristalizados y negó, mirando a Joel con el ceño fruncido.

- Eres más idiota de lo que pensé -Joel siempre le había insultado cuando metía la pata en su relación, era su turno de hacerlo sentir mal-. Tú no quieres eso. Joel, Erick siempre hizo estupideces que rebajaron su dignidad por ayudarte a tí. Estoy conciente de que tú siempre criticase el cómo éramos él y yo, y estoy seguro que tú no quieres tener una relación como la nuestra -lo miró dolido y se levantó, caminando hacia la puerta-. ¿Te pido algo? -Joel asintió un poco dudoso- No metas más a Erick en tus pretextos, no frente a mí, ten los huevos que siempre tenías cuando te enfrentabas a mí, o los ovarios, no lo sé, pero con eso enfrenta tus problemas, no te escudes con alguien que ni se acuerda de nosotros.

Y salió del lugar, dejando confundido a Joel.

Zabdiel se mordió los labios, mirando la expresión de su novio y se cruzó de piernas, dejando un espacio entre ellas, carraspeó y entonces habló, llamando la atención del moreno.

- Tiene razón -espetó y Joel frunció el ceño-. No lo menciones frente a él, no de esta forma porque le duele.

- Bien, la he cagado -bufó desviando la mirada, un tanto irritado-, como últimamente cago todo.

Una mueca apareció en el rostro del mayor, y bajó la mirada, pensando qué hacer, entonces lo miró de nuevo.

- También tiene razón en que después de todo lo que pensábamos de ellos, de su toxicidad y de que querías cambiar los pequeños detalles que estaban mal terminamos así... Siendo Chriserick -habló serio, juntando los nombres de sus amigos-. Fuimos de mal en peor -vió a Joel sonreír, era una burla-. ¿Por una vez quieres dejarme la razón? -se molestó- Siempre haces esta clase de cosas. Piensas que todo lo que sale de mi boca es pura mierda, que lo que hago o pienso son pendejadas y, posiblemente por eso siempre me veo como inferior a tí. Yo siempre he dado todo de mí para tenerte feliz, tú pareces hacerlo pero discretamente me vas haciendo mierda. Sin afán de utilizarlo como ofensa, tú eres el Chris de nuestra relación, porque te la pasas cagando cada momento feliz que tenemos, y haciéndome sufrir aunque en menor nivel. Desde que Chris se perdía lo notaba, yo era el pendejo al que se le escapaba y siempre recibía malas miradas y palabras hasta cierto punto ofensivas. Pero cuando te sucedía a tí siempre decías que eran cosas normales, errores que cualquiera cometía... -suspiró, estaba alterado, pero bajó su volúmen de voz y sus ojos conectaron con los de Joel- Si quieres podemos terminar como ellos, yo me voy a buscar la felicidad en otro lugar, posiblemente con alguien más y tú te quedas a recibir consejos para ser feliz, aunque creo que te va a doler menos que a él.