—Rubius—
—¿Qué haras con Fargan a las ocho? —pregunto curioso.
Sonreí.
—¿A qué se debe esa pregunta, Vegettita? ¿Celoso? —pregunte con una sonrisa llena de vacile, miro a otro lugar inseguro —. Iré a su casa a ayudarlo con unas cosas, eso es todo —dije al aire y entonces me miro con reproche —. Por si te lo preguntas, no, no haremos nada ilegal.
Sonrió.
—Idiota.
—Te sorprenderias de las veces que me lo suelen decir —dije socarronamente.
Suspiro mirando a otro lugar, pero no se aporto nada mas a la conversación, en silencio nos sentamos en la terraza, hacia un sol espléndido e incluso abrasador, pero soportable, pedimos nuestras bebidas, yo una cerveza bien fría, y Vegetta un café muy cargado, una vez teníamos nuestras bebidas enfrente se retomo la conversación.
—Vegetta me preocupas, se que puedo sonar a pesado, pero necesito saber que te pasa —dije cogiendo su mano por encima de la mesa, suspiro.
—Tengo miedo de que cuando te lo diga te rias de mi —dijo con voz llena de sinceridad.
—Te juro que no me río.
—Tuve un sueño, el sueño es confuso, pero soñaba que la hermandad me tenia preso, estaba atado en una silla y yo pedía ayuda despavorido, realmente estaba asustado, entonces... —enmudecio mirandome de una manera que no supe descifrar.
—¿Entonces...?
—Tu apareciste Rubén, pero no para ayudarme —cada palabra le costaba decirla, supuse que el sueño le había dado un golpe bajo. Me preocupe —. Estabas con un especie de vestido negro con un ojo rojo enorme en la capucha, tenias un pañuelo, pero este no estaba puesto, tenias una voz, una mirada, todo de ti me aterraba, entonces con palabras llenas de veneno confesaste que eras de la hermandad... Y yo...
Me tense, me había descrito a la perfeccion con "mi traje oscuro". Vegetta sin siquiera él saberlo sospechaba demasiado de mi, y lo peor que sus sospechar eran ciertas, si solo con un sueño esta así, temo saber como será su real reacción.
—Vegetta es un sabes que era un sueño ¿Verdad? —dije con voz caramelosa, me incline un poco a el poniendo mi mano en su mejilla, suspiro.
—Lo se perfectamente, se que tu no eres de la hermandad oscura, por que tu eres pura bondad y...
Deje de escucharlo y me aparte de el como si fuera fuego, todo esto me atravesaba como mil estacas.
—Vegetta no soy tan bueno como crees... —me interrumpió.
—Eso ya lo se, eres un cabrón, con perdon de la palabra, pero nunca harias las atrocidades que la hermandad esta haciendo.
Le mire con tristeza.
—Se que es un sueño, solo necesitaba contarlo, realmente lo pase mal y la idea me atormentaba... Solo necesitaba contarte.
—¿Y si lo fuera? —pregunté.
—Oh Rubén no juegues con eso.
—¿Y si realmente lo fuera? ¿Qué harias? —pregunté algo mas serio.
—Eso es ilegalisimo, te llevaría a prisión de cabeza –dijo con vacile, pero sentí que lo decía enserio, me encongi tristemente —. Me doleria mucho realmente Rubén, saber que confió en alguien ciegamente y que sea un asesino, que me haya ocultado todo... Seria horrible, seguro te odiaria y... Oh ¿E dicho algo malo?
—Oh, no, no, nada, solo estoy algo cansado de la construccion del manicomio y todo eso, no es nada.
Sonrió —. Me alegra poder sentirme mejor, llevaba con esa opresión en el pecho toda la mañana.
Sonreí con incomodidad.
—Para eso estoy Vegetita.
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¡Hola de nuevo! Como habreis observado estoy publicando varios capítulos a la vez o con un margen de minutos o una hora máximo, podríamos llamarlo mini maratón, supongo, si me animo público el capítulo 29 y 30. Un beso.—N.G.A
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Lo que susurra nuestro corazón. RUBEGETTA.
FanficQuerido Vege: Nunca antes me di cuenta de lo que sentía, te veía como un amigo que le tenía mucho cariño, como alguien que necesitaba ver siempre, pero jamás creí que eso fuera amor, jamás creí que fueras mi debilidad, jamás creí que me volvería tan...