EL HOMBRE QUE DISIPÓ EL MIEDO DE SER © [TERMINADA]

Capítulo 15

Me hubiera gustado encontrarme con un hombre desalineado, gordo y patético, de quien pudiera reírme por la mediocridad en la que se había convertido, y no al revés. Pero lo cierto es que Dylan seguía resultándome terriblemente atractivo. Con los años había obtenido un aire de madurez varonil.

         Me sentí pequeña y frágil bajo su mirada soez y deseé en ese momento salir corriendo. Pero en vez de eso me vi obligada a saludarle amablemente. Le besé la mejilla y sentí su frialdad con ese simple roce. Había pasado tanto tiempo que prácticamente ya éramos dos extraños.

         Cuando se volvió a sentar mis tías me invitaron a desayunar con ellos, pero me negué, recordando de súbito mi objetivo principal.

Su: No puedo. Me esperan. Yo... voy a ir a acampar con unos amigos.

Xx: ¿A dónde?- preguntó la mayor.

Xx: ¿No nos vas a invitar?- rió la menor, mucho más festiva y relajada.

Xx: ¿Con quién?- intervino mi abuela desde el fondo de la mesa.

Su: (me encogí de hombros) Son amigos de Tony- alegué, sabiendo que ella confiaba en él- los conozco desde hace un tiempo... Emily va a ir también.

Xx: ¿Vas a pasarte todo el fin de semana fuera de casa?- me respondió con semblante malhumorado- No puede ser posible que no tengas el más mínimo sentido común o de responsabilidad. Estuviste saliendo desde hace dos días, ¿de verdad necesitas más días de libertinaje y vicio?

Su: (me encogí de hombros) Vamos a hacer excursionismo. No haremos nada malo.

Xx: No se trata de eso- gruñó- ¿Acaso no tienes tareas, deberes, algo de provecho que hacer con tu vida?

Su: Yo... ya quedé con ellos, me están esperando abajo. No quiero quedarles mal, están ilusionados con que yo vaya...

Xx: ¿Y sus necesidades son tu prioridad? ¿Acaso basas tus decisiones en lo que los demás quieren de ti?

Su: No, yo...

Xx: ¿Tú qué?

Su: Yo... estoy saliendo con alguien- susurré.

Xx:... Tú, ¿qué?

Su: (cerré los ojos) Estoy saliendo con alguien. Con uno de ellos.

         Al abrir de nuevo los ojos contemplé a mis tías sonreír a la par, como si fuese la noticia más sorprendente que hubieran escuchado jamás. Supongo que pensaban que esta era la primera relación de toda mi vida. Deberían voltear a ver al tipo que está con ellas en la mesa, pensé.

Xx: ¿Quién es?- continuó mi abuela, recelosa.

Su: (me encogí de hombros) Se llama Jonathan... Empezamos hace poco, pero él me gusta...

         No muy convencida, mi abuela se acercó a la ventana y abrió mucho los ojos cuando miró el coche aparcado en medio del estacionamiento.

Xx: ¿Ese es su coche?- dijo impresionada.

         Todos la imitaron al momento. Pude ver a Dylan levantar una ceja, impresionado por el modelo que se encontraba abajo. Por supuesto, a él le interesaban bastante los coches.

Su: Sí... Me están esperando. Llevan algo de prisa.

Xx: ¿Y por qué sigues allí parada?- hablo mi tía, la más joven, sonriendo- ¡Ve a apurarte!

         Corrí a mi habitación, ignorando los demás comentarios que se formaron a mis espaldas. Una vez dentro eché el cerrojo y suspiré. Me conmocionaba que Dylan estuviera en mi sala, después de tanto tiempo, después de tantas cosas, todavía tenía el valor de regresar.