• CAPITULO 63 •

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Cerré la puerta con el pestillo, y aunque moría de ganas de saborearla completa, hoy no es el día, solo lo que necesito es estar dentro de ella ¡Lo necesito!

—Toma—Karol me había entregado el preservativo.

—Pónmelo tú—Jadee, sin dejar de besarle el cuello, dejándole un chupeton, y de todo corazón espero que lo vea el inútil de Chucho—Joder—Sentir sus manos en mi pene hizo que se me pusiera más dura—Ah... Karol, Quiero que me la chupes.

—No estoy preparada aún—Besó mi mejilla, así que lentamente me separé de su cuello para mirarla.

—¿Te imaginas lo excitante que sería que me la chuparas? Tanto para ti como para mi, pero no te preocupes, algún día te enseñaré, ahora lo que quiero es hacer es esto—Sin darle permiso de contestar, la tomé de su trasero pegándola más a mi y penetrándola completamente de una sola estocada.

—¡Oh Dios!

—¡Ah! ¡Mmh!—Verla rodear mi cuello con sus brazos e inclinar todo su cuerpo hacia atrás dejándome una maravillosa vista de sus tetas casi hacen que me corra, ¡Que me corra! ¡Ajá! ¡Y ni siquiera me estoy moviendo!—Joder, Te vez tan sexy—Con una mano en su espalda la acerqué hasta mi, pero fueron sus pechos los que puse en mi rostro, primero les di una leve lamida y después me metí uno a la boca.

Ella por otro lado meneó las caderas para que entrara y saliera, pero con la otra mano la detuve.

—Pasquarelli...—Gimió.

—Solo, Un segundo más, estar dentro de ti es de maravilla y quiero gozar cada segundo—Mis palabras no le hicieron efecto, pues con sus rodillas empujó mi trasero para que me moviera de nuevo, solo me reí—Me encantas—Fui hasta su cuello para dejarle besos húmedos de nuevo, empezando a moverme con una lentitud que te llevaba a la gloria. Dentro y fuera, dentro y fuera.

—Quiero... Quiero una foto, Ah, Ah...—¡Amo que pida Fotos! Por suerte mi teléfono estaba a un lado, se lo extendí para que lo tomara, todo sin dejar de jadear ni dejar de movernos lentamente.

—Todo tuyo mi traviesa chica—Le sonreí, y esta empezó a tomar fotos por todos lados, desde arriba, a los lados, abajo, e incluso en el espejo tomó una foto pero solo se ve su espalda—¡Eres tan sexy Joder!—Demasiado diría yo, y de nuevo comenzaron a pasar miles de imágenes de mi sueño, verla debajo de chucho y gimiendo hizo que se me saltaran las venas del cuello.

—Ah... Ruggero—Ahora eran mis dos manos las que estaban en sus caderas, y de movimientos lentos se hicieron más fuertes, cada vez aumentando más mi velocidad, dentro y fuera una y otra vez... -"Eres Toda mía y de nadie mas"- le dijo ese imbécil, ¡Joder! -"Ah, Si, toda tuya"- le había contestado ella—¡Oh! ¡Pasquarelli! ¡Más!—Las imágenes de ellos dos se repetían en mi cabeza una y otra vez, ¡Joder no! ¡Es mía!

Mis movimientos aumentaban y aumentaban, solo yo la puedo hacer gozar como se lo merece. -¿Y si en un futuro con otra persona se saca fotos teniendo sexo?- ¡No! ¡Es Mia!

—¡Ah!

—Me vengo, Ah... Ah... Ah... Ah... Ah...—Su vagina se comenzaba a contraer a mi pene, y mi orgasmo tampoco se quedaba atrás.

Giré a ver al gran espejo que había detrás de ella, viendo cómo su pequeña cintura y su gran trasero se movía a mi ritmo, es tan sexy, creo que jamás he conocido a una persona tan sexy como es ella, o bueno, una persona que tenga sexo como ella lo hace, ella es única.

—¡Ah!

—¡Ah!—Y cayó en mis brazos, exhausta y aún temblando por el orgasmo que acababa de llegar, y tras unos Segundos yo ya había llegado también.

¿Por qué Yo? #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora