🌙||•𝓓𝓮𝓼𝓽𝓲𝓷𝓪𝓭𝓸𝓼•||🌙

✨ 26 ✨

— ¿Cómo pudiste hacernos esto? Eres un infeliz, Jung Yunho — Escupió Yeosang.

Ninguno de los 7 entendía el porque había hecho algo tan horrible. Él había estado con ellos desde el inicio, lloro junto a los demás al no tener a su pareja a su lado, ¿para que?¿para que todo haya sido parte de un juego? Todas las preguntas que pasaban por la cabeza de los chicos, eran cada vez más confusas.

— ¿Por qué lo hiciste? — Preguntó, o más bien, suplicó JongHo. Observado como los desconocidos quitaban las esposas de Yunho. Esté solo logro darle una pequeña mirada, pero tan rápido como se cruzaron, la bajo, viendo de nuevo al suelo.

— No sean tan dramáticos,¿acaso nunca lo sospecharon? Owww, cada vez me sorprende más saber los ingenuos que pueden llegar a ser~~ — Soojin se había agachado para mirar mejor los rostros de los chicos, observando con un gran odio a Yunho.

— ¿Cómo es que..? — San no lograba unir las piezas en su cabeza, todo lo que sucedía se veía tan irreal.

— ¿Cómo es que los engaño? Fácil, nosotros logramos que él se uniera a nuestro equipo. Ahora basta de charla, llévalos abajo, Yunho. Nosotros iremos a ver algunas cosas. — Tal como lo indico YongIn, Yunho se dirigió a los chicos sin ninguna resistencia.

— Levántense — Gruñó a los 7 chicos. Su mirada había cambiado, ya no mostraba cuan mal se sentía, sino que ahora mostraba frialdad y cero simpatía ante ellos.

Los 7 se levantaron, o más bien, fueron obligados a levantarse por los desconocidos que se encontraban a sus espaldas.

Empezaron a caminar por la gran casa, pasando por los pasillos que eran formados por las paredes de cristal. Una vez que llegaron a la puerta que dirigía al sótano, Yunho se giró para observar a los desconocidos.

— Déjenme esto, no creo que necesite de su ayuda. — Demandó Yunho, los desconocidos solo hicieron una reverencia de 90 grados para girarse y desaparecer, sin dirigir alguna queja.

— Más les vale que me sigan y no digan nada — Pidió Yunho de una manera amable, pero parecía que los chicos no lo tomaron bien, pues San y Yeosang solo pudieron reírse.

— Claro, lo que digas, mi cielo — Gruño JongHo.

Yunho no dijo nada más, abrió la puerta y los obligó a entrar antes que él. Cuando los 7 ya estaban adentro, observó a todos lados para luego cerrar la puerta. Cuando estuvo adentro, los 7 pares de ojos se posaron en él, viendo cómo de su camisa sacaba lo que parecía ser un micrófono, cuando Yunho alzó la mirada y vio que él era el centro de atención, hizo una seña para que guardaran silencio.

— Harán todo lo que les diga, sin decir nada, ya saben qué sucederá si no obedecen. — La voz de Yunho sonaba firme, pero su rostro sólo indicaba que los 7 chicos no hicieran algo que lo expusieran.

Una vez que confirmó que todos habían entendido el mensaje, rompió el micrófono.

— ¿¡Qué carajos está sucediendo?! — Gritó entre susurros Seonghwa.

— Miren, no estoy a lado de ellos,¿de acuerdo? Ya se que en estos momentos no me creen nada pero en serio necesito que estén de mi lado... — Antes de seguir, fue interrumpido.

— Ja,¿estar de tu lado? Por supuesto que no. Te creímos una vez y mira que sucedió. Mierda Yunho, te sostuve tu maldita mano mientras llorabas por Yeosang, incluso te conté mis preocupaciones. — Hongjoong realmente se encontraba molesto con él, solo porque Mingi y JongHo lo sostenían, no había logrado lanzarse a él y ahorcarlo como le fuera posible.

— Lo sé, en serio que lo sé. Incluso yo me odio por hacerles esto, pero es parte del plan.

— Yunho, te conozco hace años. Habla de una vez,¿cómo es que estás metido en esto? Y no me mientas. — Yeosang tenía los ojos rojos, se notaba demasiado rápido que tenía ganas de llorar por la impotencia que sentía.

— Ellos me contactaron cuando Wooyoung y Mingi tuvieron el accidente, me dijeron que me necesitaban a su lado, si es que no quería que las próximas víctimas fueran Yeosang o JongHo, o alguna otra pareja. Sentía demasiado miedo al negarme, así que acepte con tal de que nadie de ustedes tuvieran un peor final.

— De acuerdo, tuviste un motivo, pero ahora es lo de menos, al menos para mi. Estoy confiando en ti de nuevo, Yunho. Si estás de nuestro lado como dices, dinos, ¿qué haz descubierto? — hablo de manera tranquila Mingi, parecía ser el único que estaba volviendo a confiar en él. Hongjoong sólo pudo quitarse de su lado para posarse ahora a lado de Seonghwa y Yeosang.

— YongIn formó todo este plan cuando empezó a tener una gran afición por el tema de los destinados, había leído centenares de libros, entrevistas, ensayos e incluso se había contactado con gente especializada en ese tema, quería saber cómo funcionaba todo.
Había planeado secuestrar a Yeosang y a mi, pero cuando estaba investigándonos, descubrió que Yeosang y Yo no estábamos destinados, por lo que profundizó en nosotros, y se topó que teníamos destinados con gente que no estaba en nuestras vidas, por lo que ataco a JongHo y Hongjoong. Al mismo tiempo que nos investigaba a nosotros 4, se topó que dos de sus empleados estaban metidos igual, por eso es que les dio el caso a ustedes, para tenerlos en primera fila. Él había visitado la empresa de Seonghwa cuando descubrió que Yeosang estaba relacionado, llevándose la sorpresa que Soojin lo había descubierto hablando sobre su plan en el teléfono en una sala deshabitada, ella le pidió que le contara todo porque habia escuchando el nombre de Mingi y Wooyoung. Ella le contó que conoció a unos hombres empresarios que estarían dispuestos a apoyar su plan solo por el hecho de que harían distraer a Seonghwa de su empresa. Es así como acabamos aquí. — El rostro de los 7 chicos era toda una obra de arte, estaban desorientados y perdidos.

— En pocas palabras, ¿estamos metido en todo esto solo porque un lunático quería comprobar si era real su extraña obsesión? — Yeosang había sido el primero en recuperar un poco sus sentidos.

— Si, se podría decir — Respondió Yunho.

— Esto es una locura, realmente están locos. — San estaba en una crisis, no podía creer que había perdido su relación de años, porque un lunático quería ver si eran reales los cuentos románticos y de fantasías.

— Bien, ahora entendemos el porque estamos metidos, pero ¿cómo saldemos? — Pregunto Wooyoung.

— Creo que es hora de nuestro movimiento, y para eso, me usarán — Respondió Yunho, los 7 chicos habían entendido a la perfección sus palabras.

Era el momento de la partida final. Hora de acabar el juego.