Capítulo 49.

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-¡Viniste!

Melody se lanza sobre mí abrazándome. –Mel, estas... ahogándome. –Digo.

-Dijiste que no vendrías. –Dice Alvin con los brazos cruzados y mirándome con disgusto.

-Digamos que me anime a venir. –Respondo.

-¿Sola? Nos hubieras dicho Rose.

-Aquí están los algodones. –Alex coloca un brazo sobre mi hombro, luego se da cuenta de la presencia de los chicos. –Ah ustedes. –Dice sin ganas.

Melody lo mira con los ojos como platos mientras Alvin sonreía como un idiota.

-¿Tu? ¿Qué haces aquí? –Melody aún sigue sorprendida.

-Disfrutando de la feria.

-Tú nunca vienes a las ferias.

-No me gustaban. –Alex se cruza de brazos.

Melody iba a hablar cuando Alvin se ha adelantado. –Vamos por unas hamburguesas, ¿Vienen?

-¡Claro! –Respondo.

Hemos llegado a un pequeño puesto de hamburguesas nos hemos sentado en una mesa y cada uno ha ordenado.

-Entonces, cuéntame Alex, ¿Qué te hizo venir? –Pregunta Melody frotándose la barbilla.

-Tengo derecho a venir como todo el mundo. –Contesta este alzando sus hombros.

-¡Tú nunca vienes!

-¡Pero este año quise hacerlo!

Mientras ellos discutían Alvin y yo solo nos miramos estallando de risa. Mi móvil ha sonado era un número desconocido, decido levantarme y alejarme un poco para contestar, pues estos con tantos gritos no iban a dejarme escuchar.

-¿Alo?

-Deberías haber dejado las cosas como estaban.

-¿Perdone?

-Hurgar el pasado a veces podría traer consecuencias señorita.

Qué diablos, ¿Qué clase de broma es esa?

-¿Podría saber quién es usted?

-Eso no es importante, solo le digo a partir de ahora tenga mucho cuidado y gracias.

-¿Gracias? ¿De qué habla?

Cuelga. Si era una broma no me ha provocado ninguna gracia.

-Que hermosura están viendo mis ojos.

Al voltear frente a mí se encontraba Hugo con una radiante sonrisa, definitivamente cada vez que se me acercaba este tipo me provocaba un asco profundo. Iba a ser cortante como siempre pero me he acordado de lo que me ha dicho Guillermo, tengo que aparentar ser amable si quería tener respuestas.

-Un gusto verte Hugo.

-Vaya, esta vez no hay desprecio de tu parte, ¿He avanzado algo?

Sonrió. –Nada de eso, pero tal vez solo te juzgo mal, ¿Por qué no darte una oportunidad?

Este me sonríe acercándome a mí, colocando un brazo sobre mis hombros. –Me gustaría conocerte mucho más Rose.

Su aliento olía a alcohol y tabaco, tuve que aguantar mis ganas de vomitar. -¿Ah sí? ¿En qué forma Hugo?

Alex Griffin.

Melody seguía discutiendo como una loca cuando me he fijado en que Rose se encontraba hablando con Hugo, pero lo que llamo más mi atención fue que este tenía su brazo alrededor de su cuello.

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