85 Convocar

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Por casi un mes, la Residencia del Rey parecía haberse deshecho de la concubina imperial y había añadido un obscuro esclavo mudo. Al principio fue muy codicioso y acaparó la mitad del trabajo sucio de todo el palacio, se había puesto tan delgado que parecía un palo de bambú a punto de caerse de sólo tocarlo, aun así, parecía que tenía una fuerza interminable.

Después de que terminó de doblar la ropa que le habían enviado a lavar hoy desde la Residencia Liqing, comenzó a organizar su cuarto.

"Bueno, no hay nadie aquí."

El Loto Rojo entró contorsionándose al cuarto seguido de un hombre y Chen Yu reconoció a la persona que iba detrás del él, lo había visto en el estanque de aguas termales, se llamaba Sun Lao.

"Concubina Imperial."

Sun Lao lo saludó con una reverencia y su cara parecía leal y honesta.

Chen Yu inclinó la cabeza de forma desacostumbrada y pensó que probablemente el nombre de Concubina ya no lo escucharía en el futuro.

"Su Alteza le ordenó a este sirviente que viniera por usted y lo llevara al valle, donde lo está esperando."

¿Esperándome a mí?

Chen Yu recordaba esas aguas termales del valle, llenas de bruma. En ellas, se había encontrado con el rey una vez y se había entregado a él completamente. Habían pasado solamente unos cuantos meses desde que habían estado juntos en esas aguas, pero se sentía como si eso hubiera pasado hace diez años.

El rey, de repente quería verlo en esas aguas, ¿acaso había recordado la alegría que sentía cuando estaba con él?

Resultaba que Chen Yu también quería ver al rey. "Vamos."

Después de terminar de hacer gestos se dio cuenta de que Sun Lao no lo estaba mirando y Song Qing no estaba, así que tuvo que recurrir a Hong Lian.

El Loto Rojo estaba disfrutando su nueva decoración de uñas y agitó sus manos impaciente. "Dijo que si, apúrense y váyanse."

Sun Lao hizo una reverencia y lo guió hacia afuera.

Chen Yu tomó el bolso que contenía los fragmentos de su dado, lo apretó contra su pecho y siguió a Sun Lao hasta la puerta trasera del palacio. Se le hizo extraño que lo llevaran por la puerta trasera, ¿sería el camino más corto? O tal vez, ¿el rey lo ordenó así para que no fuera visto por extraños?

Sun Lao tenía listo un carruaje con un caballo e invitó con sinceridad a Chen Yu a subir, espoleó al caballo y comenzó a avanzar apresurado.

Chen Yu solamente había salido del Palacio del Rey una vez antes, escondido en el carruaje del rey e igual había sido cuando la noche estaba muy avanzada. Era imposible que supiera que el camino que estaban recorriendo no llevaba al estanque de aguas termales.

Hong Lian se quedó en el cuarto de Chen Yu por un rato, husmeando, pero no encontró nada de lo que esperaba y salió decepcionado.

De repente, caminó hacía las habitaciones de la Residencia Shaohua, todas las habitaciones habían sido saqueadas excepto por el cuarto original de Chen Yu. Caminó arrastrando los pies, esculcando por todos lados, pero no encontró nada de valor.

"Su Alteza favoreció a Chen Yu por un tiempo, ¿cómo puede ser que no tenga cosas de valor? ¿Dónde estará la joyería y los regalos?"

Sus ojos cayeron en el baúl de ropa de Chen Yu.

"Ahí deben de estar."

Efectivamente, todas las joyas de Chen Yu estaban ahí, Chen Yu no se las había llevado y los ojos de Hong Lian brillaron.

"Realmente hay tontos en el mundo que no aprecian la riqueza, es un esclavo barato."

El Loto Rojo agarró joyas de todo tipo, adornos para el cabello de jade y aretes de oro, y se los guardó todos en el pecho. Mientras se preocupaba sobre si el rey se molestaría si lo descubriera, pero obviamente, Chen Yu no le diría a nadie.

"¡Hay tanta riqueza que podría abrir tres burdeles!"

Mientras Hong Lian se atascaba de joyas, pensando en cómo dirigiría a un grupo de prostitutas para entretener a los clientes y disfrutar sus sueños dorados, vio algo enterrado hasta el fondo del baúl.

Era una estatua de jade, los ojos de Hong Lian brillaron con avaricia. La textura de esta estatua era rara y exquisita, era jade Hetian, pero no representaba a un Buda Guanyin, sino a una belleza.

Las cejas, boca y nariz, ¡eran claramente las de Chen Yu!

El Loto Rojo abrió la boca lleno de sorpresa, no se atrevía a robar esto, nadie en el mundo se atrevería a comprarlo y seguro lo delatarían.

El Loto Rojo sentía tanta envidia que babeaba y se sonrojó.

Ese día en que el rey le había regalado un anillo de jade y lo pavoneó en frente de Chen Yu para presumírselo, no tenía la mínima idea de que, ¡a Chen Yu le había dado una estatua de jade tan grande!

Comparado con esa estatua, ¡su anillo de jade era simplemente un juguete con el que los méndigos jugaban! Se sentía tan humillado por haberlo presumido con tanto orgullo en frente de Chen Yu.

"No es que Song Qing sea un tonto, resulta que este esclavo no es suficiente para tentarlo. ¡Este esclavo ha perdido contra la belleza humillantemente de Chen Yu! La felicidad entre amos y sirvientes está rota, ¿cierto?"

Hong Lian se sentía más y más avergonzado.

"¿Qué estás haciendo?"

La repentina voz hostil asustó a Hong Lian, se cayó del baúl y la estatua de jade casi se estrella en el suelo.

Song Qing sabía que estaba haciendo, bastaba con ver la condición del baúl. Un collar de perlas rojas todavía colgaba del borde. Su corazón se sintió lleno de desdén y estaba seguro que le estaba robando.

"¿Tu ordenas a este esclavo?" El Loto Rojo estaba molesto por haberse avergonzado a sí mismo.

"Bueno, yo estoy a cargo de la defensa del Palacio del Rey, ¿realmente quieres probar como se siente ser un prisionera del palacio?"

Bajo la amenaza de Song Qing, Hong Lian sacó de mala gana todo lo que se había guardado en las ropas y lo puso de regreso en el baúl, listo para irse.

"¿Dónde está la Concubina Imperial?" Song Qing preguntó.

"¿Cómo va a saber este esclavo? ¿No tienes a alguien vigilándolo siempre? ¿Cómo? ¿Has perdido a tu pequeño amante?" El Loto Rojo volteó los ojos.

"¿Me vas a decir o no?"

El Loto Rojo agarró las manos de Song Qing. "El estanque de aguas termales tiene a un sirviente llamado Sun Lao, él se lo llevó diciéndole que el rey quería verlo. A mi parecer está perdidamente enamorado de Chen Yu y ¡no lo va a compartir contigo en el futuro! ¡Deja de estar delirando!"

"Sun Lao."

Song Qing repitió el nombre en silencio, él conocía a todos en el palacio. De pronto recordó, Sun Lao había sido convocado a la Residencia Liqing y, después de eso, se había comportado de forma extraña. La princesa lo había mandado de regreso rápidamente al estanque de aguas termales.

El rostro de Song Qing cambió de repente y agarró a Hong Lian de las ropas.

"¡¿Tú lo trajiste aquí?!"

"Tío Song, incluso aunque quieras poseer a este esclavo, no seas tan ansioso."

Hong Lian se encontró con la mirada asesina de Song Qing y sintió un escalofrío en su cuello, no se atrevió a decir nada más para provocarlo. "Este esclavo sólo se lo encontró en el camino a la cabaña de leña."

SongQing aventó al Loto Rojo y salió apresurado de la Residencia Shaohua. ¿Por quéel rey había convocado a Chen Yu a las aguas termales tan tarde?

El Amante Mudo (Parte 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora