Chen Yu miró a la princesa que estaba emocionalmente alterada y le decía cosas crueles, esta escena no era desconocida para él. Cuando era un niño, se había encontrado una vez con la señorita Chen en la Mansión del Magistrado, inmediatamente lo había odiado, y le ordenó a varios esclavos que lo azotaran.
Chen Yu de repente entendió las buenas intenciones de su madre. Como ella le había dicho, mi hijo no tiene nada malo, pero la gente es siniestra. Cuando ven gente que es mucho mejor que ellos, siempre los odian y quieren destruirlos, su rostro era un problema. Esta era probablemente la naturaleza humana de la que había leído en los libros, Chen Yu salió de la pagoda, si aprovechaba que la gente del palacio no lo quería tal vez podría escapar del caos.
Cuando la princesa lo vio alejarse como un muerto viviente, no dijo nada, se sintió llena de miedo y desvió la mirada.
"El monstruo se ha ido finalmente." La princesa dio un suspiro de alivio. "¡Prefiero morir asesinada por el Ejército de Zhen Bei!"
El Palacio Imperial era muy grande y Chen Yu no lo había recorrido completamente antes. No sabía que camino llevaba a las puertas del palacio, tenía que merodear, siguiendo a los eunucos que intentaban escapar. Llegó al grandioso y magnífico Templo Jin Luan, que parecía no estar muy lejos de una de las entradas del palacio.
En el salón del templo, Jun Xuan Xiao estaba parado en el centro, vestido con una armadura y ropas de sangre. El emperador estaba sentado en el Trono del Dragón y no tenía a donde ir, su armadura dorada también estaba manchada con bastante sangre. Xiao Xiye estaba sentado con una postura erguida, manteniendo lo que quedaba de la dignidad de la Familia Imperial, tratando de no mostrar su derrota.
"Xuan Xiao, parece que no puedo hacer nada, nunca pensé que perdería ante ti. Con doscientos mil soldados, ¿cómo era posible que perdiera?"
La voz de Xiao Xiye seguía siendo noble y gentil, pero le hacía falta el entusiasmo y confianza de antes, sus ojos estaban apagados.
"La respetabilidad y superioridad del emperador no son comparables con las dificultades que he vivido por años en la amarga frialdad del territorio del norte."
Xiao Xiye asintió y dijo. "Si, nacido de la pena y muriendo en paz. Cuando éramos jóvenes, yo era el engreído orgullo de la Dinastía Jing, pero ahora tú has ganado. Esto es tuyo y el Trono del Dragón es, naturalmente, tuyo también."
Xiao Xiye se levantó y bajó los escalones paso a paso.
Jun Xuan Xiao levantó la cabeza y sonrió con placer. "La Dinastía Jing es tan pequeña, que no vale la pena arriesgar mi sangre en una pelea. Piensa en la dinastía anterior, fue la expedición oriental a Persia, la expedición norteña contra los hunos y la del este a Corea. ¡Cubría todas las direcciones! No hay nada en disputa con los territorios de la dinastía anterior."
Xiao Xiye permaneció pasmado por un tiempo.
"Soy un incompetente, he hecho mi mayor esfuerzo para cuidar de la poca tierra que tenía, pero incluso acabé peleando con el Rey de Zhen Bei. Pero tu ambición es mucho más grande que la mía, hazlo. De ahora en adelante, el rey de Zhen Bei reinará el mundo."
Jun Xuan Xiao levantó su espada y esperó un momento.
"Vete."
Los ojos de Xiao Xiye se abrieron por la sorpresa. "¿No vas a matarme?"
"Tú y yo peleamos espalda con espalda en el campo de batalla. La última vez, cuando me dejé capturar, tu no me mataste. Jun Xuan Xiao nunca niega una deuda de honor, puedes llevarte a tu harén y a tus soldados."
Jun Xuan Xiao se giró para irse y Xiao Xiye rugió, haciendo eco en el gran salón.
"¡Jun Xuan Xiao!" Xiao Xiye lo miraba con el rostro rojo. "¡Te he reconocido como el emperador y he aceptado mi derrota! ¡Pero no tienes por qué humillarme de esta manera! ¡No necesito tus viejos sentimientos y tu lástima!"
Jun Xuan Xiao giró la cabeza y contestó. "No tienes que usar tus sufrimientos para provocarme, he dicho que dejarte ir es dejarte ir."
Xiao Xiye abrió la boca por un largo tiempo pero no habló, finalmente apretó los dientes viciosamente, como si estuviera tratando de romperlos.
"¡De lo único que me arrepiento es no haberte matado en la prisión! Me dejas ir en esta ocasión y, en cuanto tenga la oportunidad, ¡te mataré en el futuro!"
"Como pude derrotarte una vez, puedo hacerlo la segunda vez también." Jun Xuan Xiao habló con desprecio. "Si de verdad no quieres quedar en deuda conmigo, ¿dime donde está la madre de Yu-er?"
Xiao Xiye sonrió burlonamente en su cara y luego se rió sonoramente, como un loco.
"Jun Xuan Xiao, pienso que eres una persona inteligente y decente, y resulta que ese es el caso. También estás haciendo todo tu esfuerzo por conseguir lo que está en el Mausoleo Junshan, ¿cómo? ¿También quieres tomar a la madre de Yu-er como rehén? Jun Xuan Xiao, ¡eres tan malvado como yo!"
Jun Xuan Xiao frunció las cejas y dijo. "Desprecio usar tu método."
"¿De verdad?" Xiao Xiye le rugió con una expresión severa. "Entonces por qué trataste deliberadamente con crueldad a Chen Yu, lo forzaste a que abandonara tu palacio lleno de desesperación y dejaste que yo lo trajera al Palacio Imperial, ¿por qué?"
Jun Xuan Xiao se quedó callado.
"¡Lo diré por ti! Codiciabas el Mausoleo Junshan pero no tenías por dónde empezar. Cuando, por accidente, obtuviste a Chen Yu y descubriste que era un descendiente del Clan Chu. ¡Lo engañaste con palabras dulces para que se enamorara! Chen Yu había crecido en el patio de la Residencia del Magistrado, tenía un corazón sincero e inmaculado, y ¡lo podías mantener encerrado fácilmente! Pero luego te diste cuenta que ¡no sabía nada del Mausoleo Junshan! Así que cuando fui al norte, me incitaste a sentir curiosidad por él y dejaste que me enterara de su identidad, para luego dejarme pensar que yo era el que te estaba manipulando a ti. ¡Querías que yo te lo quitara! No dudaste en tratarlo tan cruelmente para que se sintiera completamente desilusionado de ti y ¡todo era para que él pudiera encontrar la respuesta! Como los registros del Mausoleo Junshan estaban en manos del Palacio Imperial, dejaste que me lo llevara para que descubriera donde estaba la tumba. Como lo habías planeado, harías tu rebelión y todos los contenidos del mausoleo acabarían en tu poder. Ja, ja. No estas peleando por el trono de la Dinastía Jing, ¡tú ambición es mucho más grande!"
La mirada de Jun Xuan Xiao era profunda y no mostraba ninguna vergüenza por haber sido expuesto.
"Cuál es el problema, sólo puedes decir que he buscado por más tiempo que tú." Jun Xuan Xiao habló burlonamente.
Xiao Xiye sonrió y luego miró a Jun Xuan Xiao. "Así que, mi Rey de Zhen Bei, de hecho tu y yo somos iguales, y hacemos cualquier cosa para cumplir nuestros propósitos. ¿Qué mejores cualidades tienes para compadecerme?"
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El Amante Mudo (Parte 1)
RomanceCuando el Rey de Zhen Bei se casa con la supuesta hija del Magistrado Chen no esperaba que conocería a la persona que lo haría cambiar sus ambiciones y planes. Después de perderlo todo, ¿qué estará dispuesto a hacer para recuperarlo? Traducción al e...