Veinticuatro.

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Mi cumpleaños fue mucho mejor de lo que pensé que sería, se supone que grabaría el vídeo antes pero decidí hacerlo el mismo día, sería más divertido y el equipo estuvo de acuerdo.

En el lugar de grabación estuvo Tae, Hoseok y Jungkook. Luego estuve con mis padres y después me vi con Tae y los chicos, conocí a la novia de Nam y a la de Hoseok, eran chicas muy lindas, sencillas y amables, no tenían nada que ver con la fama y eso se notaba. Hacían su vida normal y por un momento sentí algo de envidia, a veces extrañaba eso; lo normal. Hacer cosas y que medio país no me juzgara por ello, aunque claro, ellas tampoco la tenían fácil porque al estar con alguien tan famoso, tenían que andar con cuidado y no exponerse demasiado para así preservar su privacidad o evitar ataques en su contra y no sólo eso, soportar los momentos que ellos estaban lejos y que no podían verlos en semanas o meses.

En fin, todo tenía un lado bueno y un lado malo.

Me desperté temprano, aunque me había dormido tarde. Taehyung fue muy especial y no creí que tuviese un gesto tan grande conmigo, el que se tomara el tiempo de hacerme un obsequio significó mucho para mi.

Y el beso... Así fue como cerramos la noche.

Tenía muchos pensamientos revueltos, por lo que antes de que él despertara y lo viera por la casa, había venido a la compañía, Star había enviado regalos y vine a verlos. Ellos hacían muchas cosas por mi, sus palabras de cariño abundaban por todas mis redes, además de las cosas especiales que hacían para celebrar mi cumpleaños, creo que nunca podría agradecerles lo suficiente.

Les había encantado el vídeo y yo me sentía muy feliz por eso, hasta que vi que algunos hablaban acerca de un comentario en la foto que subió Tae de mi. Era un comentario de Sunhee y eso hizo que volviera al ruedo el asunto del escándalo sobre la relación de esos dos y peor aún, lo que pasó en la fiesta con aquellas chicas.

Todos estaban asumiendo cosas y yo estaba molesta porque no sabía que creer. Volvieron las dudas acerca de que entre si ella y Tae no había pasado nada más como él dijo. Y estaba aún más molesta porque le estaba dando demasiada importancia a eso.

Me encontraba en uno de los salones de prácticas, con todas las cosas que habían llegado a la compañía para mí, eran entre: cartas, peluches, cuadros, álbumes de fotos, dulces, accesorios y hasta ropa.

La puerta se abrió y entró Sol, casi dando saltitos hasta llegar a mi, su cabello de un tono rosado se movió de manera graciosa.

–El vídeo fue un éxito, quedó muy bien. –Se sentó, mostrando una gran sonrisa.

–Si, el equipo hizo un trabajo excelente. –Tomé, lo que parecía un álbum, y lo abrí viendo varias fotos de uno de los fansign que hice el año pasado.

–¿Estás bien? –La miré, y ella me echó un vistazo mientras tomaba uno de los cuadros que consistía en un fanart de mi.

–Si, ¿por qué?

–No pareces tan animada. –Señaló de forma curiosa.

–No dormí bien. –Me excusé, aunque ni podía explicarle lo que pasaba. Ella no preguntó más y siguió viendo las cosas conmigo, luego me ayudó a guardar todo en donde iba para no perder nada.

Llamé a Woon para que llevara la gran bolsa negra, donde había guardado todo, a casa. Yo tenía planeado ir a casa de mis padres un rato.





–Linda, vi en las redes que están hablando mucho de Tae, de que estuvo con algunas chicas. –Ella miró atenta mi reacción.

Estábamos en su habitación, mientras ella acomodaba su ropa. Mi padre estaba en el trabajo, tenía muchos años trabajando en una consensionaria de autos, era el encargado y mi madre era dueña de una pastelería, de la cual había varios locales por toda la ciudad, por lo que a veces estaba en la principal o en casa.

–Si... eso fue antes de que comenzáramos a hablar, fue un malentendido –traté de no sonar tan incómoda y la verdad es que si lo estaba– él estaba en una fiesta y una chica publicó cosas que no habían pasado. –Según lo que me había dicho Tae, sólo se besó con una y no había pasado nada más de allí, pero esa chica dijo que se habían acostado.

–Dicen que tenía algo con una modelo.

–Eso no funcionó. –Me encogí de hombros, apretando los labios. Mi enojo había vuelto.

–Yoonie, ¿confías en él? –Se sentó en la cama junto a mi, estaba alerta ante cualquier cambio de mi parte. Al fin y al cabo me conocía y sabría si estaba mintiendo o no, pero yo tenía que hacerle ver qué no había ningún problema.

–Si, mamá, confío en él –le di una sonrisa tranquilizadora, a pesar de que esas palabras me quemaron– Tae ha sido muy claro conmigo.

Tenía un revoltijo dentro de mi, si bien él y yo fingíamos ser una pareja en público, ya nos habíamos besado varias veces estando a solas, le gustaba provocarme y yo cedía, me estaba dejando llevar, y estaba mal porque lo nuestro sólo era por un contrato, además de que no podía confiar por completo en él, tampoco quería salir dañada de todo este teatro.

–Cariño, no puedo meterme en tu vida, sólo tú sabes lo que haces pero no permitas que nadie juegue contigo, si él o cualquier otro te lastima y así lo quieras, tienes que alejarte.

–Lo sé.








Llegué a casa y Tae no estaba, Tannie tampoco, porque ya hubiese salido a recibirme. No sabía dónde podía estar, había apagado mi teléfono cuando estaba en casa de mis padres.

Me metí en mi estudio ahí estaban las cosas que me había enviado Star, Woon ya las había dejado allí, comencé a sacar los cuadros y los álbumes.

Un rato después escuché toques en la puerta y abrí, Tae estaba con Tannie en brazos, me di la vuelta dejando la puerta abierta siguiendo con lo mío.

–Te hicieron muchos regalos. –Escuché su voz detrás de mi.

–Si...

Dejó a la bola de pelos en el suelo quien vino directo a mi, lo acaricié mientras lo abrazaba. Luego noté como Tae veía todos mis obsequios.

–Sé que estás molesta por lo de Sunhee –dejé a Tannie y mantuve mi atención en el cuadro que tenía en mi mano– ella sólo quiere molestar, tiene novio y en realidad no entiendo por qué hace eso ahora.

Bufé.
Alguien con una pareja no le daría tanta importancia a algo de la persona con la que estuvo saliendo, era muy evidente que aún le interesaba Tae y le daba igual ser así de descarada siendo que su novio –si es que era verdad que lo tenía– podía enterarse de lo que hizo.

Espera, ¿por qué me estaba dando explicaciones como si de verdad fuésemos novios?

Bueno, lo son, Sky.

–No estoy molesta por lo que ustedes tienen o tuvieron, estoy molesta porque eso afecta todo lo que estamos haciendo para dejar los antiguos escándalos atrás. Afecta mi carrera, Tae.

El silencio nos envolvió por unos segundos.

–Tuvimos –enfatizó– Yo te dije la verdad, Yoonie, dejamos todo, ni siquiera la he vuelto a ver. No le prestes atención a ella y a lo que dicen los demás, las personas siempre van a hablar.

Centré mi atención en él, se veía sincero. Y también muy lindo.

Demonios.

–Bueno... –suspiré– está bien. –Sonrió, y me contagió su gesto.

Decidí darle el beneficio de la duda.
















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^^

Espero les haya gustado, gracias por leer💜

Spotlight. |KTH Donde viven las historias. Descúbrelo ahora