dance with the devil: Ghost

Part.2

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La letra en mi cabeza no desaparecía.

Sin importar nada mas, seguía aquella voz que no paraba de cantar, tan dulce y tan tierno. Continúe. Dentro de mí se formó un pequeño atisbo de reconocimiento, era una voz particularmente familiar, una que ya había escuchado antes.
Al cabo de unos metros de distancia, la melodiosa voz, me había llevado hasta un almacén al fondo de la habitación, parecía más un salón que una habitación.
—_____(t/n), lo lamento pero debo sacarte de aquí — escuché a, Copia. Se escuchaba lejano, demasiado que no pude entender a la perfección sus palabras.
—He is — ligeramente entone la letra.

Mis ojos esta vez se cruzaron a un rincón en específico. Había una mesa redonda de madera, llana de polvo, y muchos artefactos viejos encima de esta. En específico, algo me atrajó hasta una caja de apenas quince centímetros de largo: color café, supongo que color caoba; pero es difícil de distinguir gracias al polvo y la suciedad que la cubría, con un crucifijo dibujado en la tapa y ese toque tan especial, con decorados de oro y joyas.
—¿Que es eso? — pregunté a nadie en específico. Estaba tan confundida, que no sabía a quién dirigirme, si a, Copia o la voz misteriosa.
Tome la caja en mis manos, y sostuve un poco de ella, tratando de mirar a detalle todo lo que la conforma.

The disobedience that hold us together.
Nostro dis pater, nostr' alma mater
And we are falling
Over the precipice.

Copia tocó mi hombro repentinamente.
Cerré los ojos debido a la gran presión que sentía sobre mi cuerpo. Mi cabeza dió un par de vueltas, Y nuevamente abrí los ojos, estaba en la habitación con Copia, una vez más.
—¡Que te pasa! ¿Por qué lo hiciste? Te dije que siguieras mis instrucciones — me regaño, mientras envolvía mis dos hombros con sus manos—. Te pudo pasar algo malo, o quizá, Nihil te pudo haber visto y Estoy seguro que habrías lamentado haberlo conocido.

—Tranquilo, Estoy bien — respondí. Estaba aún confundida, y lo último que quería era discutir o darle explicaciones a, Copia, de algo que ni siquiera yo estoy segura que sucedió.
—¿Pero por qué lo hiciste‽ ¿Por qué seguías esa voz? No podía distinguir nada, y no escuchaba nada de lo que me decías — dice con un tono más relajado—. Quería ayudarte, y tenía miedo de que algo malo te pasará — comento con las manos un poco más ajustadas a mis hombros.

Era un poco dulce ver qué, Copia
Se preocupara por mi; él sería el segundo hombre en hacerlo.
—Ya estoy bien. Relájate — le dije. Aparte sus manos de mi cuerpo y me retire un poco—. ¿Sabes que es esto?
Le pregunté a, Copia con respecto a la caja.
—Creí que no podías traer cosas de esos recuerdos — comentó con aire abochornado.
—Entonces, está caja debe tener algo especial. La voz que escuche me guiaba hacia ella, es posible que esta caja contenga algo que nos ayude a comprender tu propósito — dije entusiasmada. No cabía duda de que está caja pertenecía a la familia Emperator y que sería posible que contenga algo importante.

Copia y yo fuimos al vestíbulo, pusimos la caja sobre una mesa de decoración que estaba en el centro de la habitación y abrimos la caja.
Estaba muy nerviosa, supongo que, Copia igual, o incluso peor.
—Un, collar — dije, aún mirando el bello collar dentro.
Es hermoso: color dorado, con una joya azul en el centro, era una especie de formas geométricas conectadas entre si, muchos rombos y al final una tira de oro que formaba la letra G.
Brillaba con un resplandor dorado, y estaba cubierto por una tela roja.
—¿No te es familiar? — pregunte. Copia estaba callado, quizá sería la primer vez que lo vi tan estupefacto.
—No tengo idea de lo que significa. Se parece a los símbolos de los papas Emeritus, solo que este jamás lo había visto — comento. Se acercó a mi, y colocó su mirada al dichoso símbolo envuelto por la tela.
—¿Papas Emeritus? ¿Te refieres a Nihil? — pregunté con confusión.
—los Papas Emeritus, I, II y III, son hijos de Nihil — dice con un tono molesto. Mi ignorancia al parecer lo ponía de mal humor.
—No quería molestarte. Solo que, aún no entiendo por completo todo esto de las familias Emeritus y Emperator, necesito más tiempo — le dije con una mirada fugaz.
Tome el collar en mis manos, estaba frío y pesado, era la misma sensación
Que sentía al tocar las manos de, Copia y del señor Forge.
Mire con detenimiento, quizá había algo más en él que no habíamos notado. Mi mano se torno un poco más débil, el collar sobre mi mano lo provocaba.
—Es una extraña sensación — dije en voz alta.
El collar ahora se volvió tibio, y a cada segundo su temperatura subía de nivel. Subió demasiado que quemo mi mano segundos después de sostenerlo.
Grite ahogada, y solté el collar inmediatamente.
Mi mano estaba temblando, teñida de color rojizo y una quemadura prominente en la palma de mi mano izquierda.
—¿Estás bien? — pregunto Copia preocupado. Tomó sus guantes y se los quito para poner sus manos sobre la mía—.¿Debes tener más cuidado? Regaño por segunda vez—. Estás cosas no son juguetes, y además, está caja viene de un tiempo diferente. No debiste tomarlo — conforme hablaba, el dolor disminuía.
—No creí que eso fuera a suceder — dije un poco molesta, a mi, el dolor me ponía de mal humor.
—Bueno, no importa ya — finaliza con impaciencia—. Tu quemadura no es tan grave, necesitas un poco de agua y cubrirla con algo; pero no tengo nada para curarte aquí — comento, mientras sus dedos recorrían mi piel rojiza—. Debes irte a casa, necesitas curar esa mano — me dijo Copia.
—Estoy bien — dije con algo de incomodidad. El tacto de, Copia era extraño, pero en este momento, creo que era muy satisfactorio, el frío de sus manos apagaron el dolor de mi quemadura—. Aun necesitamos descubrir que significa ese collar—.
—No hace falta, tienes que irte.
—Espera... No, no me quiero ir — dije
Sosteniendo fuertemente sus manos.
—No me interesa lo que quieras — dijo, sus dedos se entrelazaron con los míos, fue un poco doloroso, pero logré resistirlo—. "Duerme" — susurró cerca de mi. Su aliento tibio me hizo cerrar los ojos, y cuando volví a abrirlos, estaba en la oficina del señor Forge.

—Había olvidado lo que se sentía — expresé.

Mire hacia mi mano, tenía que descubrir una manera de ocultar mi quemadura de la familia Forge—. Cierto, la cena — comenté nerviosa.
Aún tenía que cenar con Tobias y sus amigos. Al menos, ellos resultaron agradables.

Baje enseguida, y por fortuna, esta vez no me caí.

Al entrar al comedor, me encontré con todos los chicos, quienes aguardaban en el gran comedor redondo.
—Hola linda. Toma asiento, llegaste justo a tiempo — aviso Avelinda, quién llevaba puesto un delantal blanco y una charola llena de lo que parecían verduras y una pasta delgada.
Tome asiento al lado de Dylan y Per. Frente a mi estaba Tobias y Neil's, quién estaba al lado de Hannah y Ann.
—Espero que te guste, prepare Råraka, con verduras. Un platillo muy famoso del lugar de donde vengo — dijo sirviendo un poco sobre mi plato.
—¿Y de dónde vienes? — le pregunté
—Estocolmo — sonrió, y terminó de servir a los invitados.
—Yo que tú, tendría agua cerca — comentó Per con humor.
Ambos reímos y comenzamos a comer.
—Oye... ¿Qué tienes ahí?, ¿Qué te paso?; ¿Estás bien?
Interrogó Dylan sobre mi oído, le fue fácil distinguir mi quemadura a tan corta distancia entre ella y yo.  Mire mi mano, intentando buscar una escusa, pero estaba muy claro, incluso ya tenía la forma del collar dibujada sobre mi piel.
—Un pequeño accidente — dije nerviosa, me urgía una escusa.
—¿Pero es una quemadura? ¿Cómo pasó? —.
la insistencia de Dylan, me era muy intimidante.
—La verdad... La verdad no recuerdo, pero estoy bien, no me duele. No hay de que preocuparse — dije, dando un gran bocado a mi comida.
Con eso evitaría tener que hablar.
—¿Segura? — intervino Tobias desde su silla.
Trague el bocado y respondí con un, "sí".
—Esta bien, pero cuando termines de cenar, te ayudaré a curar esa mano — comentó Boel, con una ligera sonrisa.
Esto ya era el colmo. Siempre que veo a, Copia, termino con una herida.
Al finalizar la cena, todos continuaron con su ensayo, y con las charlas graciosas de los chicos.
Boel y Avelinda se encargaron de mi mano, y al caer la madrugada, todos los amigos del señor Forge tuvieron que partir a sus casas, bueno, todos menos Neil's, Al parecer Tenía otros asuntos que resolver con, Tobias.
Antes de ir a dormir, Hannah y Ann se lograron escabullir a mi habitación y me dieron las buenas noches, como solían hacerlo, y por fin pude tener un momento a solas.
Tenía que pensar en lo que pasó con, Copia hace unas horas, sobre como es que ese collar llegó a nosotros y todo eso.
Era un misterio que resolver.

"____(t/n)"

Creo que, Copia hoy se preocupo mucho por mi.
Me producía un sentimiento muy curioso cuando escuchaba su voz; ya no era miedo o incomodidad.
Era, quizá algo más curioso.

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