_______________________________________Al pasar de las horas me fue inevitable ya no buscar a Copia.
No estaba segura de por qué esto habría pasado, por qué Copia no estaba conmigo en la oficina o si quiera en la casa, también seguía buscando la razón de por qué traía puesto ropa distinta... En específico ese vestido.Acabamos la cena felizmente, y en realidad lo estaba; aunque Copia no estuviera aquí.
"en algún lugar del mundo estará"
... y Por fin libre".
Me fui a la cama, no antes de darle las buenas noches a Hannah y Ann y a todos en general.
A pesar de mis intentos para dormir, me fue imposible, seguía teniendo aquella duda sobre dónde estará Copia, no sabía si estaba bien, o si estaba en Suecia.Me mantuve toda la noche pensando en eso y a la mañana siguiente, desperté gracias al frío. A penas comenzaban las ventiscas del invierno, cuando la nieve cubre gran parte de las ciudades de Suecia, y algunas veces, aquí en linköping también hay lluvias antes de la temporada de nevada.
—Copia — dije en voz alta. Me puse en el borde la cama y tome el collar.
Me fui a la ducha y después baje a la cocina donde estaba Avelinda arreglando algo en las cuerdas de su violín.
—Buenos días — le dije y ella dejo su instrumento.
—Buenos días, ¿Quieres comer? — me dice y se pone de pie.
—Gracias, me encantaría — avisé y ambas fuimos a la cocina. Pusimos nuestra comida y nos sentamos a comer.
Pronto Tobias y compañía bajaron
Y desayunaron junto con nosotras.
Al terminar, Asbjörn entrego la correspondencia.
—Señor Forge, hay una carta para la señorita _____(t/n) —.
Me puse de pie y recibí la carta que Tobias me entrego.
Al abrirla. Note que era la carta que me confirma la entrega de la mansión Emperator.
Abajo de esa carta venía la firma de los jefes de la empresa en las que aseguraban que esa casa ahora es de mi pertenencia.
En el borde inferior también estaba la rendija dónde debería ir mi firma.
—Vaya... Si te creyeron — comenta Tobias mirando la carta.
—Al parecer la casa ya es mía. Dijeron que podíamos ir a verla, ellos vendrán mañana para firmar los papeleos — le dije y puse la carta en el sobre correspondiente.
—¿Quieres ir hoy? — me pregunta—. Podemos ir contigo a ver la casa. Puedes hacer varios cambios si lo deseas — me dice Tobias y enseguida Correspondí.
Creo que sería buena idea salir. Necesitaba despejar mi mente y aunque sea por un momento, dejar de pensar en Copia. Solo espero que esté sano y salvo.Al pasar el día Asbjörn me llevo a la casa.
Fue un viaje algo largo, debido a las condiciones del clima: la lluvia parecía poner en dificultad el buen manejo de los autos, carruajes y algunas carrozas que pasaban por las avenidas.
Al llegar a la casa, Asbjörn me acompaño hasta la mansion.Al verla mi primera impresión fue muy distinta, ahora estaba diferente: seguía brillante, el color blanco hace que el brillo del crepúsculo se refleje en las paredes, apresar de tener algunas partes color gris neutral, supongo que eso explica las cenizas que cubren el piso.
El incendio había ocasionado que la casa, en su mayoría la parte de atrás, estuviera destrozada de una parte considerable de la infraestructura, pero nada grave afortunadamente, asi como dijo Tobias, aún es habitable.
Al entrar un olor a ceniza y humedad impactó en mi nariz, arrugue un poco el ceño disimulando el gesto incómodo que me causo el mal olor.
—Bueno, tengo que ir por el señor Forge, vendré en unas horas — me informa mientras me abraza.
(Avelinda al parecer había tenido un pequeño accidente, se cortó la mano intentando reparar las cuerdas del violín. Tobias y Boel se quedaron para curar de su mano); Avelinda podría tener una astilla enterrada y podría hacer parecer que tiene un fierro perforando su cuerpo.
—Felicidades... Al menos tienes algo bueno — me dice y me guiña el ojo, y de pronto un beso en la frente—. Da un vistazo, llegaré pronto — me dice y se va.Sonreí y mire adentro, reconocí buena parte de la casa, dejando de lado la cocina, una sala, una oficina y una bodega que nunca había visto.
Todo estaba idéntico a como lo recordaba, incluyendo esa escalera tan hermosa.
Mire por todos lados y aun los más alejados.De pronto y de la pared de la cocina y delante del comedor, salió corriendo una rata.
Al principio me asuste, pero después recordé a Copia, y su nueva empatía por las ratas.
La mire sin hacer ningún gesto, el animalito me miró y después siguió con su camino a un lugar incierto.
—Te dije que no hacen nada si no las atacas —."Copia"
Pensé.
Claro que era él, es su voz.
Me volví y mire a Copia. Llevaba puesto un sastre muy formal, con encajé y lindos detalles en los bordes, incluso parecía un traje de otra época.
—Copia — dije y corri a sus brazos.
La felicidad nuevamente se apoderó de mi. Al fin... Copia era libre y estaba aquí conmigo... No había necesidad de ir a la puerta para verlo y estar con él.
—Creo que tengo una fascinación por los roedores... ¿Eso es extraño?, Incluso creo que ellas son buenas conmigo — me dice y aprieta mi cadera con sus manos.
—¡Hum¡ — reí. Recordé el apodó que me dieron en la biblioteca—. A mí me dicen ratón de biblioteca, es mi apodó... O bueno Eduard me llama así — le dije y el sonrió.
—Entonces, creo que eres mi roedor favorito... Y además, ahora que soy libre podré ir con ese tal Eduard y asustarlo una vez más — me dice y pegó sus labios a mi frente
—No lo hagas... —. ¿Dónde estabas, por cierto? Te busque por todos lados y no estabas — rebuscó sus ojos.
—Al salir... Emeritus nos llevó devuelta al primer lugar en el que estuvimos antes de entrar a la puerta... Tu estabas en la sala de tu casa y yo, en el antiguo teatro de los Emeritus y Emperator, en Estocolmo. Así que solo deduje que estarías aqui, en la mansión y viene a buscarte. Tarde un día en llegar... Al parecer las cosas en todo este tiempo han cambiado mucho, no conocía los taxis — comentó y reí—. No te rías, tuve que escapar del conductor y después, corrí y pregunté del paradero de la mansión... Pero te vi llegar junto con Asbjörn y vine a reencontrarme contigo — me abraza y sentí su calor en mi cuerpo.
—Creí que me habías escuchado, yo tuve un problema con mi collar... Te llamé en mis pensamientos — le dije.
—El mío también, creo que su desperfecto formó parte de mi libertad. Pero ya no tienes que preocuparte más, ya estoy aquí, contigo — me dice y me separa.
—Entonces... ¿Ya eres totalmente libre? — puse mis manos en su rostro.
—Totalmente. Para estar aquí para ti... Y ya no habrá un puerta que se interponga.
—Eso me parece bien — le dije y sus labios me besaron.
Fue hermoso y demasiado dulce.
No quería que se acabará jamás.
Al separarnos ambos nos quedamos mirándonos.
—Te ves bien con esa ropa — le dije graciosa.
—Esto era la moda en 1910... Además, al parecer sigo teniendo 22 años. El tiempo que estuve en esa habitación solo fue relativo, así que me quedé con la edad que tenía el día que me encerraron — si había cambio.
—Para mi sigues teniendo 90 — acaricie su mejilla.
—Tu sigues siendo una niña — me dice y me abraza—. Pero eres la mejor de todas.
—Ahora tengo que pensar que le diré a Tobias... Supongo que cuando se entere que tengo novio se va a echar a golpearte o le va a dar un ataque de verdad, está vez — dije y ahora él cambia su mirada.
—De hecho... Tenía que decirte algo sobre eso — me dice—. Antes de que te estreses quiero que veas algo — anuncia y da un paso hacia atrás.
—¿Qué? — pregunto.
—Recuerdas que existen dos almas en mi ¿Verdad? — me dice y asiento—. Pues resulta que existe una tercera, que solo se presenta como una lejana apareción en mi cabeza y gracias al poder de Emeritus IV, puedo tener su apariencia física, aunque, solo la recuerdo como una lejana vida pasada, no tiene nada que ver con el futuro y presente que tengo ahora — me dice y con algo de confusión lo miro.
—¿Quién es? — pregunto y me concentré.El echo una vez más su cabeza hacia atrás y dijo la palabra.
"Deus in absentia"
Enseguida su rostro se transformó.
Un agudo atisbo de miedo apareció en mi pecho, la ansiedad y la confusión se reafirmaron en mi cabeza.
—¿Tobias? — dije mirando su rostro.
Era Tobias... Todo este tiempo Copia siempre ha estado en la mente de Tobias.
Suspiré impactada y dejé el aire sobre mi pecho.
—vaya —.
—Pero solo es temporal — comenta y regresa a su físico original.
—Siempre estuviste en la mente de Tobias — sin pensar me acerque a él. Aún con ese dolor en mi estómago.
—Algo así, como dije... Solo es una voz lejana en mi cabeza — me aproxima a él, si mano fría tocó mi rostro y acarició gentilmente mi mejilla—. Te tendré para mí... Sin que una puerta me separé de ti — me dice con extrema dulzura.
—Lo sé — comenté y me acerque a besarlo.
Sus labios eran para mí, la definición de perfección.
Me recargue en su pecho, tan agradable como siempre."Can you hear me say you name, Forever...
"She said, if you had life eternal".
Su hermosa voz me cantaba al oído... Simplemente nunca habría imaginado que Copia me hiciera tan feliz._______________________________________
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dance with the devil: Ghost
FanfictionSufrimiento, dolor, desesperanza, amor... Todo eso me ha estado atormentando desde que comencé a entrar a esa puerta. Desde que comencé a ver a Copia. Basado e inspirado en los integrantes de la banda Ghost. Y Tobias Forge en un UA(universo alterno...