Prologo

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...Cuatro meses después...

-Siento que mi corazón ya no esta... el hombre que amo cada vez se aleja más... 

El pelinegro estaba sentado con las piernas abrazadas en el piso mientras trataba de tomar aire, sus lágrimas nublaban su vista tratando de no mirar su celular, pues la chica morena que tenía a su lado le había dejado una noticia.

Y Jaden no había tomado bien la situación, pues se había propuesto empezar una nueva vida, sin Sam ahora, pero eso no lo había creído ni él mismo, por más que quiso comenzar, encontraba en cada paso a su hombre de ojos color negro, ese profundo negro en el que tanto le encantaba perderse mirándolos.

-Si hay alguna esperanza... de que lo puedas recuperar, tienes que luchar por ese amor. -dijo Jess mientras ponía su mano derecha en su rodilla para hacerlo mirar. -No sabemos si esa foto sea real, no sabemos si realmente Sam esta saliendo con él... sabes que la vida de Sam cambio ahora que es pública.

-Tú has hablado más con él... a mi no me responde las llamadas... y  creo que mi cabeza cada vez se pone a pensar que si es cierto... no quiere saber nada de mí...

El pelinegro comenzó a respirar más deprisa y Jess tuvo que inclinarse a su lado para tomarlo de sus mejillas y la mirara, para que este se calmara y  pudiera recomponerse.

-¡Jaden! Necesito que te calmes... sí he hablado con Sam antes... ahora que esta más ocupado nuestra comunicación ha sido poca, pero sabemos que Sam cambia fácil si las situaciones lo afectan, alguna acción o palabra puede hacerlo cambiar, tú lo sabes.

La chica de cabello negro no supo si se había equivocado con la elección de palabras que había dicho para el pelinegro, pues sus lágrimas siguieron saliendo con más intensidad y su llanto se escuchaba por gran parte del pasillo en el que estaban sentados, la casa del pelinegro le había parecido bien confortable a Jess y estos se habían hecho más cercanos gracias a Sam y a su amigo Jack.

Luego de un largo rato el pelinegro llorando Jess sabía que lo mejor que podría hacer en esos momentos era acompañarlo en su llanto, pues a pesar del tiempo que había trascurrido desde la noticia que Sam y Jaden eran hermanos, al pelinegro aun le afectaba, podría ser que a la luz él solo jugaba con las apariencias, pues nadie sabía que en realidad en las noches él sufría su soledad, y se lamentaba por no haber detenido ese momento...

El momento en que él mismo decidió conquistar a Sam, pero tampoco se arrepentía de nada, quizá le hablaba a la luna de su soledad, pues ella sí sabia donde estaba... y le pedía que lo acariciara con su amor, que iluminara su camino, porque quizá no era bueno.

-Tarde en la noche, cuando todos están dormidos, solo me quedo despierto pensando en él, y le pido a la luna que él este también pensando en mí... -fue el pelinegro en romper el silencio después de calmarse y tomar aire. -Porque sueño con él todas la noches y mañanas, y no hay otro lugar en el que pueda soñar con él y conmigo sino es en mi cuarto de ese último día... solo quiero abrazarlo una última vez... pero todo lo que tengo son sueños con él.

El sol estaba dando en la pared mientras caía la tarde, y los ojos verdes de Jaden se hacían más brillantes por la luz calidad que inundaba el pasillo, pues el verde ya no era tan frío, pues no era el clásico y fuerte Jaden que Jess se había acostumbrado a ver, este era muy vulnerable en esos momentos, podrían atravesarle una daga al corazón en esos momentos y él no lo sentiría pues su corazón ya había sido lastimado, a pesar del drama que él pensaba que estaba haciendo.

-Quisiera que él y yo fuéramos felices en una nueva vida ¿Cómo puedo hacer?

-Entrega todo... -dice la morena.

-Todo se lo dí.

-No creo que todo... nunca entregamos todo.

-No creo que sea posible amar más. -dice el pelinegro.

-Pensando así lo perderás... siempre hay algún modo.

Los ojos del pelinegro no dejaban de mirar a todos los lugares y con eso el gran ventanal que daba a los jardines, con sus mejillas empapadas y sus ojos hinchados le clavaba los ojos a Jess en busca de alguna respuesta que le pudiera dar, algún otro dato... pero allí estaban los dos, mirándose a los ojos tratando de buscar una respuesta.

-¿Y si lo pierdo? ¿Qué me quedará? -pregunta Jaden.

-Lo que has vivido.

-Eso no ayuda de a mucho Jess...

-Lo sé y lo siento, pero solo hay dos opciones, hacerlo o no hacerlo... intentarlo o morir.

-¿Tú cómo lo harías?

Las dos personas que se miraban a los ojos esta vez se quedaron es silencio mirándose el uno al otro, pues la morena no sabía exactamente qué hacer en esos momentos, quizá una estupidez pasaba en su cabeza, pero se estaba dejando llevar de momento acercándose al pelinegro.

Y una vez lo suficientemente cerca, ya no había marcha atrás, se arrepentiría de lo que haría... pero eso sería después más tarde, ahora solo dejaría que pasara...

Sus labios se juntaron en un pequeño beso, que en un principio estaban quietos, quizá los nervios de los dos, o el shock del momento, pero una vez se disipo la incertidumbre de sus cuerpos, la mano de Jaden sostuvo las mejillas de Jess mientras los dos comenzaban a intensificar su beso.

Pero los instintos de Jaden se encendieron cuando su aire le falto y supo que era un error, aparto sus labios de la morena para alejarse de ella y levantarse del suelo.

-Lo siento Jess... no creo que...

-¡No! No... tienes que decir nada. -dice la morena mientras se levantaba del suelo y se trataba de acomodar el vestido que llevaba en esos momentos. -Creo que es mejor que me vaya... 

Las dos personas se quedaron de pie unos segundos y la chica de pelo negro se dio la vuelta para salir de allí mientras que el joven se quedaba con los ojos clavados en el suelo, con una maraña de pensamientos en su cabeza.

-Ve y busca a Sam... después de todo este tiempo aun podrías recuperarlo.

Y sin decir más Jess dio la vuelta al pasillo para salir por las grandes puertas, pues ahora sí se arrepentía de lo que hizo... y buscaría la forma de remendarlo o esperar que Sam nunca lo supiera.

Jaden en parte solo necesitaba bien qué hacer ahora, pues su instinto estaba cambiando, y dejaría lo que estaba haciendo ahora, sacrificaría parte de él para buscar algo que tenía perdido y quería.

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Me demoré en actualizar... Am sí y lo siento.

Pero aquí vamos de nuevo una nueva aventura, no soy capaz de publicar nada si no esta terminando, porque no quisiera fallar comenzando algo y dejarlo a la mitad.

Gracias a los comentarios que recibí en la anterior historia me ayudaba a continuar escribiendola, pues muchas veces me sentí estancado, varias cosas pasaron conmigo, así que nada.

La historia por fin está terminada y espero la sigan disfrutando... Gracias.

Iré poniendo algunas fotos, de un pequeño viaje que hice y también un poco de como me imagino los personajes. Espero disfruten este nuevo comienzo.

Sebas.

No Quería Decir AdiósDonde viven las historias. Descúbrelo ahora