El aire cálido de la noche se filtro debajo de mi camiseta y respirar un aire distinto me hizo concentrar un poco en lo que estaba pasando por mi cabeza.
Una parte de mi quería aceptar que había visto a Jaden, pero quizá hubiera sido solo su reflejo, un engaño de mi mente, ya había tomado bastante, pues también me costo un poco bajar las escaleras.
-¡Sam! -era de nuevo esa voz.
Era un chico muy bello, con unos ojos que podrían hipnotizar a cualquiera, tenía esa misma esencia que Jaden, quizá eran mis deseos de verlo en esos momento que mi mente jugaba con eso.
Sus ojos tenían ese tinte que a la oscuridad de la noche que confundía.
-Jaden... -digo en un susurro.
Se acerca de nuevo a mí para mirarme de nuevo a los ojos.
*** oscuridad ***
-Creo que el universo nos unió aquí por algo.
Una parte de mi conciencia me quería decir que este no era Jaden, y en parte le creía, pero también me quería engañar solo.
-¿Lo dices enserio?
-Nunca he dicho cosa más enserio.
Sus ojos se estaban acercando a los míos, sentía su presencia muy cercana a mi cuerpo y eso me gustaba.
-Sam no creo que estés del todo bien...
Lo sabía.
No sabía si había sido el último trago que tome que me sentó un poco mal, pues era la primera vez que me sentía de esa manera, escuchaba un poco las cosas a la distancia, pero también me concentraba mucho en mis pensamientos, quizá sí tenía muchas cosas por decir a los demás, quizá me callaba en muchos momentos muchas cosas, o reprimía muchas acciones.
Pero al verle los labios al chico que tenía a mi lado me quise acercar a ellos, como si por ese simple hecho dejara de estar solo.
-Bésame. -digo.
Pero hasta no pasar mis manos alrededor de su cuello él no se acerca a mí, para posicionar sus labios en los míos.
*** oscuridad ***
Mi alrededor se desvanecía de a poco, no pensaba en ello, y más cuando quería que aquel chico me siguiera besando, un instinto crecía dentro de mi, en el que no quería parar ni un minuto de aquello que recibía, pues era como una adicción, una vez comienzas no querías parar.-No te separes de mí. -lo digo en un susurro con mis labios pegados a los suyos.
-No creo que lo quiera hacer.
Una risa se escapa de nuestros labios para volver a darnos un besos, pero el chico de los ojos verdes, lo deja de hacer por unos momentos, para tomarme de la mano y comenzar a caminar en dirección contraría a la disco, y yo me dejaba llevar.
Me gustaba que me llevara, él lo manejaba bien todo, siempre lo había hecho, y eso es lo que quería de mi en esos momentos que lo llevara muy bien todo, y al verlo llevarme de mi mano mi hizo recordar los momentos en que siempre me arrastraba a lugares en los que teníamos muy buenos momentos y recuerdos.
*** oscuridad ***
Era un callejón un poco oscuro, pero con la iluminación suficiente para ver a nuestro alrededor, la suficiente para verle sus ojos, las luces amarillas se confundían en ellos, para dejar ver el verde que tanto quería en esos momentos.
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No Quería Decir Adiós
Teen FictionQuizá no todo era tan bueno como creemos, pero... Quizá podamos aprender a darnos una oportunidad después de una gran caída, porque todo esto lo he aprendido. Unos ojos verdes que olvidamos, y unos azules que conocemos. Quizá sí te quiero... o te am...