Habían pasado cuatro días desde la última vez que vi a Oliver, no lo había visto ni por la universidad desde entonces.
Ese día llame a Esteban a contarle que había pasado y él se mostró muy contento, pero tan rápido lo llame termino la llamada porque estaba atendiendo asuntos, en cuanto a mi mamá me quedé unos buenos momentos hablando con ella, igual que con Jess, que no le había contado mucho hasta el momento, y con ella, pude realmente ser franco, no le oculte ningún momento que me haya pasado, contando también lo que paso con Oliver. Y estuvo de acuerdo con que me mantuviera alejado de él, pues no transmitía confianza con lo poco que sabía.
Esa tarde iba a la universidad simplemente a recibir una clase y aunque era bastante corta... no importaba, el profesor nos había aplazado esta clase, y no le vimos problema con que lo hiciera, siempre quería mantener la mente ocupada, iba solo con Leonardo en el auto, él seguía manteniendo su distancia conmigo mientras yo iba hablando con mi hermano menor por el teléfono.
Leonardo se aclara la garganta, pero aún así yo sigo con la conversación.
-Joven Vega...
Quito la mirada de mi celular para esta vez mirar hacia el retrovisor para ver como tenía sus ojos azul claro clavado en los míos.
-¿Sí?
-Discúlpeme por mi comportamiento los días pasados...
-Tranquilo... pero no entiendo el motivo...
Ya casi habíamos llegado a la universidad, me había acostumbrado un poco a las calles, pero aún así se me siguen haciendo nuevas, pero reconocía pedazos de la carretera.
-No sé si sea prudente que lo sepa, pero no me genera confianza el joven rubio.
-¿Se refiere a Oliver?
-Así es...
-No se tiene que preocupar por él... -habíamos vuelto a comenzar a tratarnos de una manera indiferente, sin confianza, como si él hubiera olvidado que hace unos días me estaba ayudando a generar más confianza. -Hasta ahora lo he mantenido en su lugar.
Ya habíamos pasado la gran portería de la universidad para este pasar por el gran jardín dejándome en la puerta, la mayoría de veces Charlotte me esperaba en la puerta cuando acordábamos en llegar a la misma hora, y ese día la estaba esperando igual, iba vestida con un vestido corto amarillo pastel de flores y unos botines blancos, me reí por querer compararla con Naomi, pero las dos compartían esas auras de divas, pero más allá de un simple vestido o zapatos de tacón compartían un hermoso corazón.
Al bajarme del auto caminó hacia su encuentro mientras ella miraba su celular, como si no se hubiera dado cuenta de mi presencia, Leonardo me avisa que se quedará allí esperándome, pues tampoco me iba a demorar tanto.
-Hola...
-¡Sam! -la pelirroja me recibe un poco nerviosa como si la hubiera asustado. -Te estaba esperando, quiero que veas algo... bueno si es que no lo has visto.
-¿Qué es? -comenzamos a caminar hacia el salón, a esas horas de la tarde la universidad estaba bastante sola.
Cuando estábamos llegando cerca al salón nos sentamos en una banca de cemento y ella me pasa su celular donde tenía un artículo abierto donde se leía "¿Qué pasó con Jaden y Sam?" le doy una mirada rápida al artículo donde se veían varias fotografías mías junto con Jaden y otras más recientes mías aquí.
Miró a Charlotte para ver su cara igual de confusión que yo tenía, ella estaba también perdida o quizá con muchas preguntas.
"Desde la última vez que se les vio juntos el codiciado Jaden Vega y el afortunado Sam Clark no han vuelto a salir más cosas a la luz, pues de eso ya han pasado más de dos meses, en la última colección que sacó el multimillonario empresario Esteban Vega, para una de sus tiendas.
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No Quería Decir Adiós
Teen FictionQuizá no todo era tan bueno como creemos, pero... Quizá podamos aprender a darnos una oportunidad después de una gran caída, porque todo esto lo he aprendido. Unos ojos verdes que olvidamos, y unos azules que conocemos. Quizá sí te quiero... o te am...